En el sector porcino español nos hemos comprometido a tener un impacto climático neutro en 2050, en línea con el Pacto Verde Europeo. Además, en INTERPORC, en representación del sector, somos miembros de la Red Española del Pacto Mundial de la ONU, y ya trabajamos en 14 de los 17 ODS con una estrategia de sostenibilidad en toda la cadena de valor.
Gracias a este compromiso, el sector ha reducido un 43,6% las emisiones de GEI y un 49% las de amoníaco por cabeza de ganado desde 1990, además de disminuir en un 30% el consumo de agua por kilo de carne. Además, cada vez se implementa más el uso de energías renovables, la cogeneración de purines y la valorización de subproductos para impulsar la economía circular.
Así, con una visión de futuro sostenible, el sector sigue una hoja de ruta enfocada en luchar contra el cambio climático, mejorar la calidad del aire, apostar por la economía circular y reducir el consumo de agua, con el objetivo de optimizar recursos, reducir la huella ambiental y mantener nuestro liderazgo global.
Nuestra visión es un sector cada vez más sostenible en lo medioambiental, e implementando cada vez más proyectos de economía circular.
Para lograrlo, en 2024 presentamos un Informe de Circularidad que ha identificado seis palancas que pueden desarrollar un impacto positivo, tanto económico, como ambiental y reputacional en el sector porcino.
Las seis áreas son valorización energética de subproductos para producir biometano, producción de fertilizantes orgánicos mineralizados, valorización energética de subproductos para producir biocombustible, valorización hacia las industrias farmacéutica y cosmética, gestión eficiente del agua y optimización de la eficiencia energética.
Sin duda, en ese plazo de 10 años ya serán realidad muchos de los proyectos de esas áreas en los que ya están trabajando las empresas porcinas españolas.