La Relatora Especial sobre la violencia machista, Reem Alsalem, responsable de velar para que la violencia contra la mujer y las niñas se integre en el marco de derechos humanos de las Naciones Unidas y sus mecanismos, solicitó aportaciones para comprender mejor la relación entre la prostitución y la violencia contra la mujer, aclarar los términos, los enfoques y las medidas que los Estados deben adoptar para mantener el espíritu del derecho internacional de los derechos humanos y proteger eficazmente a las mujeres y las niñas de todas las formas de violencia.
Reem Alsalem, mostró un especial interés en escuchar a las organizaciones que facilitan la recuperación de mujeres y niñas prostituidas, así como a las supervivientes. Tras recibir más de 300 aportaciones de diversas partes interesadas, incluida las de esta Comisión para la Investigación de Malos Tratos a Mujeres, examina en un informe temático que se presentará al Consejo de Derechos Humanos de la ONU en la 56.ª sesión en junio de 2024, y en el que se aborda la violencia contra las mujeres y la explotación sexual como forma, causa y consecuencia de la prostitución, evaluando los principales marcos conceptuales y terminológicos, las normas internacionales de derechos humanos y jurídicas, y los modelos legislativos y políticos.
En su informe, la Relatora Especial de la ONU reconoce especialmente el sistema de prostitución como una forma de violencia y hace varias recomendaciones, entre ellas:
- Adopción del marco jurídico abolicionista y sus cinco pilares:
- Despenalización de las mujeres que ejercen la prostitución.
- Provisión de apoyo integral y vías de salida.
- Penalización de la compra de actos sexuales.
- Penalización de todas las formas de proxenetismo.
- Implementación de campañas de sensibilización para los compradores de actos sexuales.
Puedes acceder al informe en español a través de este enlace.