Carta del Presidente
Terminamos un año, 2023, en el que la actividad económica ha comenzado a mostrar signos de debilitamiento. En nuestro sector esos signos han empezado a ser especialmente visibles en la segunda parte del año. Sin embargo, hemos cerrado el ejercicio, teniendo en cuenta ese contexto general, con unos buenos resultados económicos.
Sidenor seguirá avanzando en 2024 a la máxima velocidad por el camino de la descarbonización. Hemos sido la primera empresa en firmar un PPA de energía renovable en España con la garantía del Estado, a través de CESCE. También en 2023 hemos invertido, en colaboración con el EVE, en la adquisición de ocho parques fotovoltaicos en Cataluña que garantizan el origen verde y la estabilidad de precios en una parte importante de nuestro suministro eléctrico.
Así, toda la energía eléctrica consumida por Sidenor tendrá en 2025 un origen renovable. Aspiramos, además, a ser el primer productor de aceros especiales de Europa en alcanzar las cero emisiones netas de CO2. Nos impulsa a conseguir este objetivo nuestro compromiso con la sociedad, y también la voluntad estratégica de hacer de este reto una ventaja competitiva decisiva.
El ejercicio 2024, siguiendo la tónica de los últimos años, va a caracterizarse sin duda por una gran incertidumbre a todos los niveles: las tensiones geopolíticas mundiales, la inestabilidad del escenario político español, los tipos de interés elevados y la evolución de la economía en general hacen que el arte de la elaboración de previsiones se haya convertido en una disciplina extraordinariamente complicada.
En ese sentido, creemos que la flexibilidad y la capacidad de adaptación a dicho escenario de incertidumbre van a ser cualidades de primer orden en la relación con nuestros clientes, especialmente en lo que se refiere a la capacidad de producción y de servicio. Pensamos que los mejores en ese terreno serán capaces de ganar posiciones en el mercado a pesar del contexto desfavorable; queremos ser una de esas empresas ganadoras, y por eso toda nuestra organización está trabajando en la mejora de nuestra capacidad de reacción y de adaptación al mercado.
Sidenor depende básicamente de sus ventas al mercado europeo del automóvil. Aquí también la incertidumbre es extrema; por un lado, la demanda de vehículos se ve afectada por una evolución económica general incierta, y por otro lado, los desafíos a los que se ve enfrentada esta industria (transición energética, desarrollo del coche eléctrico…) hacen muy difícil predecir la evolución, incluso a corto plazo, de la demanda de automóviles.
Sin embargo, somos optimistas sobre los resultados de este nuevo año. Sin duda, la diversificación geográfica y de productos de nuestras ventas, con un carácter, como en la mayoría de las empresas vascas, claramente exportador, será un factor que jugará decisivamente a nuestro favor. Además, nuestro compromiso con el ASG y, especialmente, los pasos que ya hemos dado en la descarbonización de nuestros procesos constituyen ya una clara ventaja con respecto a la mayoría de nuestros competidores, que va a traducirse en un aumento de nuestra cuota de mercado en Europa y de nuestra rentabilidad.
Creemos que los tiempos complicados, lejos de ser una fuente de dificultades, nos ayudarán a mejorar aún más la imagen que proyectamos hacia nuestros clientes.