El primer vínculo que existe para un ser humano es el que se establece durante el embarazo con la madre. En un escenario ideal, la madre gestaría de manera consciente y amorosa a su bebé, centrada única y exclusivamente en esta etapa temprana de conexión y vínculo afectivo. Pero la realidad es otra. Hoy hablaremos del movimiento interrumpido.
Vivimos en un mundo complejo en el que afrontamos miedos, vivencias dolorosas, situaciones traumáticas y escenarios complejos que nos llevan a que la vida esté llena de altibajos emocionales y circunstancias confusas. Es imposible que lo que nos sucede y sucede en el entorno no nos afecte. No existe una máquina que nos desconecte de la realidad, por lo que lidiamos con la maternidad (y paternidad) en escenarios muy distintos a los idealizados.
Gestionar todo ello en un mundo que culpabiliza si no lo haces todo perfecto, dando como resultado mucha angustia y dolor. En algún punto, nos desconectamos cuando no podemos hacer frente a las expectativas y caemos en una vorágine de culpabilidad que se arrastra durante años.
En este artículo quiero compartir un concepto de las Constelaciones Familiares: el movimiento amoroso interrumpido.
El objetivo de ahondar en este concepto es por un lado, reconocer que el vínculo afectivo con el bebé es importante para la vida, y por el otro, que en algún punto, la vida nos lleva a la desconexión emocional y es algo natural.
Quiero normalizar tanto el hecho de ser responsables de lo que nos toca vivir (que el vínculo es imprescindible para la vida) como de hacernos cargo de aquello que estamos viviendo (que la vida nos lleva a no estar siempre disponibles para el otro).
Índice
La desconexión emocional durante el embarazo
La madre nos trae a la vida y eso es un inmenso acto de amor, generosidad y valentía.
Al periodo de gestación en el útero materno se le suele llamar “el paraíso perdido” ya que el bebé tiene todo lo que necesita gracias a la madre y puede flotar en el líquido amniótico protegido y permanecer en estado de bienestar. El bebé también percibe el mundo emocional de su madre y capta los estados conflictuales que vive.
¿Qué sucede si la madre tiene miedo, está triste, se enfada o está sufriendo por alguna razón? o ¿Qué ocurre si el embarazo se presentó sin buscarlo, si la madre siente un grado de rechazo, si es motivo de disgusto o si se plantea el aborto durante un tiempo? Se establecen una serie de improntas, a nivel inconsciente, que se graban en el cerebro límbico del bebé.
Cuando nace el bebé vuelve a encontrar cuestiones que le confrontan con la supervivencia y el trauma del parto y de los primeros minutos como el corte del cordón umbilical se graba también en el cerebro.
Qué es el movimiento interrumpido
Bert Hellinger, creador de las Constelaciones Familiares, llamó movimiento interrumpido a la conducta del niño (luego adulto) que tiene una rabia descontrolada hacia las personas que más ama o con las que convive. La persona no sabe de dónde surge ni tiene posibilidad de detenerla.
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El origen, para Hellinger, se encuentra en una separación precoz de la madre en el momento en que era muy importante para su supervivencia. La amenaza experimentada se transforma en ira o rabia que producen la tonalidad emocional que se experimentará ante una situación de estrés.
Por ejemplo:
- La separación durante el mantenimiento del bebé en incubadora.
- La ausencia de la madre por enfermedad.
- La ausencia por una adicción (droga, alcohol, etc.) que no permita asumir la maternidad.
- La separación precoz que se produce entre el nacimiento y los 6 años.
El bebé o el/la niño/a no tienen posibilidad de elaborar el duelo teniendo emociones o sentimientos que no puede calificar o entender (miedo, rabia, vergüenza, soledad) y por lo tanto no se produce una integración de la experiencia. Esta situación también se vive con el padre. Si bien el primer vínculo es el de la madre, el padre o progenitor, también puede vivir situaciones que le lleven a no vincularse de manera sana con el bebé, generando una ausencia y vacío profundo dejando de ser una figura de seguridad emocional.
¿Qué lleva a una madre (o padre) a no estar disponible emocionalmente?
Son varios los escenarios que podemos encontrar en los que hubo movimiento interrumpido porque los progenitores no pudieron conectar con el bebé, pero he aquí alguno de ellos:
- Problemas en la pareja durante el embarazo.
- Madres con traumas infantiles que no pueden cuidar adecuadamente.
- La muerte de seres cercanos.
- Diagnósticos de embarazo de riesgo.
- Pérdidas anteriores de bebés.
- Partos complicados.
- Separaciones tempranas (incubadora, muerte de la madre durante el parto).
- Falta de deseo de ser madre.
- Enfermedades o adicciones.
- Separaciones.
- Muerte de la madre durante los primero años de vida.
Efectos del movimiento interrumpido en la edad adulta
La separación temprana tiene un impacto profundo en la vida adulta. Si alguna de estas situaciones te resultan conocidas, te invito a reflexionar sobre la relación con tu madre, padre o progenitores:
- Miedo al contacto y a las relaciones: Dificultad para tolerar la cercanía en relaciones familiares, de pareja o amistosas.
- Imposibilidad de recibir el amor: Sentimiento de soledad interna, creyendo que se quedaron solos desde pequeños.
- Sentimiento de abandono: Desamparo al no contar con los padres cuando más se necesitaba, generando tristeza e impotencia.
- Enfado y rabia: Experimentación de abandono que se transforma en ira, especialmente hacia los padres.
- Patrón de dolor y sufrimiento: Evitar tocar el dolor experimentado en la infancia, alejándose de las relaciones.
- Frustración en el deseo de acercamiento: Deseo acercarme emocionalmente, pero el recuerdo de la interrupción temprana dificulta la cercanía.
- Repetición del patrón: Repetición de dinámicas similares con otras personas importantes en la vida.
- Dificultad en entregarse: Resistencia a entregarse plenamente en relaciones personales y profesionales.
- Problemas para alcanzar objetivos: Obstáculos para lograr metas debido a la activación del patrón de movimiento interrumpido.
- Bloqueo emocional: Limitación en la expresión emocional que afecta aspectos personales y profesionales.
- Bloqueo con el éxito: Asociación del alejamiento de la madre con la pérdida de éxito en la vida y el trabajo.
Cómo superar el movimiento interrumpido
La superación del movimiento interrumpido implica explorar el trauma en la infancia. A través del acompañamiento con Constelaciones Familiares se busca revivir y sanar esos momentos.
La reconciliación emocional con los padres es clave para recuperarse interiormente y abrirse a la cercanía en el futuro.
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¿Conocías este concepto del movimiento interrumpido? ¿Te has sentido reconocido/a en estos miedos o traumas? Cuéntame tu experiencia en comentarios. ¡Te leo!