(Información remitida por la entidad que la firma:)
El Instituto Nacional de Estadística (INE) señala que las enfermedades del sistema cardiovascular y los tumores son las dos causas principales de muerte en España. A esta tasa de mortalidad, que es mayor en hombres que en mujeres, también cabe sumarle los errores cometidos por el personal sanitario en nuestro país. La Asociación El Defensor del Paciente realiza una memoria en la que indica el número de negligencias médicas denunciadas cada año en España. Además, también especifica cuántas de ellas han terminado con la vida de la persona. A este respecto, el pasado año 2023, se denunciaron 12.071 casos, de los cuales 602 acabaron con la muerte del afectado.
Aunque no son los datos especialmente llamativos del año 2018, cuando se reportaron 810 casos de muerte y 14.335 imprudencias de este tipo, sigue preocupando que someterse a tratamientos médicos e intervenciones quirúrgicas puedan conducir, precisamente, a aquello que se pretende evitar: el fallecimiento de un ciudadano. Esto nos lleva a pensar que España necesita, en efecto, despachos de abogados negligencias médicas capaces de, por lo menos, lograr una indemnización económica; una cuantía que, al parecer, es lo único que lamentablemente queda después de las secuelas que las incompetencias de algunos profesionales sanitarios (no todos, por supuesto) pueden dejar en los pacientes.
¿Cuándo se habla de negligencia médica?
Los casos de negligencias médicas se estudian dentro del Derecho Sanitario, una rama que aplica las leyes a la medicina. Etimológicamente, el término del que procede la palabra negligencia significa falta de cuidado. Por tanto, la negligencia médica es la falta de cuidado del personal sanitario que ha atendido al paciente.El número de médicos colegiados en España no ha dejado de aumentar en la última década. En 2023, ya había más de 301.000 médicos; una cifra que aún se eleva más cuando se trata de enfermeros, en cuyo caso el número asciende hasta los casi 346.000 profesionales. Evidentemente, este incremento en el número de sanitarios es sumamente positivo. Sin duda, cuantos más expertos haya en este sector, y en el de la investigación clínica, más probabilidades habrá de poder proporcionar una atención sanitaria eficiente.
Las negligencias médicas, incompatibles con las estadísticas
Mientras que la esperanza de vida de las personas se encontraba, según la OMS, en los 46 años (hace siete décadas aproximadamente), en 2019 se alcanzaron los 73 años; un número que se espera que aumente para 2048, cuando la esperanza de vida media de la humanidad se cifre en 77 años. Actualmente, en nuestro país, dicha esperanza se sitúa en torno a los 87 años (para ellas) y los 81 años (para ellos), según la información proporcionada por Datosmacro.com.Así pues, ya que se está poniendo tanto empeño en mejorar las condiciones de vida, no parece que sea oportuno obviar aquellos casos en los que las imprudencias cometidas por algunos sanitarios impiden que ciertas personas, convertidas arbitrariamente en víctimas de una reprochable práctica médica, vean su vida condicionada por secuelas causadas por una negligencia médica.
Casos de negligencias médicas más comunes
Así como las enfermedades del sistema cardiovascular se ceban con los mayores de 80 años, y las malformaciones congénitas con los más pequeños (siendo la primera causa de muerte en la población infantil española), las negligencias médicas pueden suceder indiscriminadamente, sin atender a unas edades u otras.Algunos ejemplos comunes, dentro de estas imprudencias médicas son:
Diagnósticos erróneos.
Prescripción de medicamentos inadecuados para pacientes que tienen ciertas patologías y/o alergias a determinados fármacos.
Dosis incorrecta de anestesia, ya sea por déficit o exceso.
Hipoxia neonatal, lo que puede llevar a que el niño experimente un desarrollo cognitivo más lento de lo deseable para su edad.
Infecciones contraídas en el centro hospitalario por una inadecuada limpieza de las superficies.
Microorganismos patógenos (virus, bacterias y hongos dañinos) que se han transmitido durante la intervención quirúrgica por material sanitario no esterilizado debidamente.
¿Qué profesionales cometen estas imprudencias?
Al tratarse de negligencias médicas, los profesionales que las causan son trabajadores del sector sanitario: médicos, enfermeros, auxiliares de medicina, auxiliares de enfermería, farmacéuticos, dietistas, nutricionistas, fisioterapeutas, consultores médicos en ética, etcétera. Este último perfil resulta bastante curioso, ya que son personas que, por su formación académica, pueden asesorar sobre dilemas éticos que pueden producirse a lo largo de cualquier proceso médico. Una equivocación de ellos, como la interrupción de un medicamento por su aparente ineficacia (cuando el fármaco requiere de más tiempo para actuar), puede considerarse también una negligencia médica.
Abogados especialistas en Derecho Sanitario en España
Después de tomar en cuenta los datos ya comentados, la respuesta a la pregunta formulada en el título del artículo es afirmativa: España necesita bufetes como Hidalgo Fernández Abogados, cuyos profesionales son especialistas en Derecho Sanitario, Negligencias Médicas y Defensa del Paciente. Su trayectoria profesional, que supera los 15 años de experiencia, con un porcentaje de casos ganados del 95%, avala la calidad de sus servicios.Dirigido por Álvaro Hidalgo Fernández, con Máster en Derecho Sanitario y Bioética, este despacho de abogados asesora también telefónicamente, por correo electrónico y mediante WhatsApp a las víctimas de negligencias médicas, y a sus familiares y allegados. Además, en la primera valoración, que es gratuita, el equipo profesional de este bufete español informa, desde el principio, sobre la viabilidad de solicitar una reclamación o no para el caso referido por la persona afectada. Las negligencias en medicina estética y los retrasos en el diagnóstico de cáncer también son cuestiones que estos especialistas en Derecho Laboral, Derecho Administrativo, Derecho Fiscal y Derecho Civil, aparte de Derecho Sanitario, abordan.
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