“No hay igual locura como emplear mal la salud,
ni igual cordura como sacar algún fruto de la enfermedad”
Antonio de Guevara Noroña (c.1480-1545)
Hemos querido titular así estas líneas debido a que es la frase que encabeza el programa de actividades para el próximo 51º Congreso de la Sociedad Española de Medicina Psicosomática. Zaragoza es su sede y como fecha de celebración el 28 al 30 de noviembre 2024.
Notable y bien conocido es el revuelo actual en torno al cuidado de la salud personal de nuestros coetáneos. Muchos son los frentes que se ven despertar con aire problemático o amenazante en la opinión pública de nuestros días. Citaremos algunas como muestras:
- Las crecientes listas de espera en cien campos distintos.
- El dificultoso acceso a la atención primaria en tantos lugares.
- Las setenta y seis fórmulas sobre aspectos sanitarios problemáticos que el Consejo Andaluz de Colegios Médicos de Andalucía ha señalado, recientemente, a nuestros dirigentes y gobernantes, con asequibilidad y sentido práctico del saber y ejercer la atención médica en nuestro medio social andaluz.
- La conflictiva crisis en la asistencia a un gran número de afiliados en mutualidades y en seguros privados que se viene despertando en los últimos meses.
- El crecimiento de la incidencia en la patología relativa a la salud mental de niños y jóvenes.
Uno de los titulares que encabezan este congreso de la Sociedad Española de Medicina Psicosomática S.E.M.P. enfatiza la innovación e integración de la dimensión psicosomática y de la Psiquiatría de enlace en la Medicina: “Retos y dilemas”. ¿No parece éste un grito de alarma que reclama la urgente humanización de nuestra actual medicina?
Y eso puede ser dirigido, tanto a médicos como a pacientes. Y es que la medicina de un centro de salud o de un hospital nunca puede ser como la mercancía que se solicita en un supermercado o en una oficina bancaria. Lo que allí se atiende es la salud global de la persona en cualquiera de sus ámbitos y esto exige de manera imprescindible el desarrollo de los campos clínico, psicológico, social y, también, humanístico.
Con adecuado alcance, en el citado congreso desde nuestro ámbito andaluz, abordaremos varios temas, entre los que destacaremos la inexcusable formación de estudiantes, post graduados y médicos residentes en el saber psicosomático, tan integrador en la medicina. También abordaremos la investigación psicosomática y diversas aplicaciones técnicas específicas de la misma.
Desde la enseñanza en Facultades y Colegios Médicos llegaremos a la valiosa que contribución que suponen las Reales Academias de Medicina y Cirugía, capaces de generar un sólido conocimiento, mediante la divulgación plural y de altura en la compleja y rica sociedad en que vivimos.
Mucho hemos de esperar de los frutos de este congreso psicosomático, así como de las Sociedades Española y Andaluza de Medicina Psicosomática. Ilusión y presencia no nos faltará y además apostaremos por todo ello una manera de pensar propia.
Con este objetivo hemos ampliado el clásico modelo tricondicional del trabajo seguro del profesor José Luis Meliá Navarro, titular de Psicometría en la Facultad de Psicología de la Universidad de Valencia. Hemos dotado de contenido humanista a las tres competencias básicas que capacitan el desempeño general de cualquier tarea, Y es que, como recordábamos en nuestra última columna, debemos saber ciertas claves para continuar avanzando en el camino de la vida, tenemos que querer utilizarlas de manera correcta en el momento adecuado, y para ello resulta imprescindible tener la libertad de poder llevarlas a cabo y así hacer lo que consideramos conveniente.
Dr. Manuel Álvarez Romero, Médico Internista
Dr. José Ignacio del Pino Montesinos, Médico Psiquiatra