Cómo se cubre una guerra o una catástrofe natural, cómo se informa de manera veraz, cómo se transmite la información, cómo se evita caer en el morbo a la hora de narrar la tragedia, cómo se muestra el dolor y la destrucción, qué siente el periodista, etc., etc., han sido analizados en un coloquio sobre periodismo de guerra y catástrofes naturales, dentro del Máster en Periodismo de Agencia que imparten la Universidad Carlos III de Madrid y la Agencia EFE.
En el aula de EFE Escuela, los periodistas de la casa Sara Gómez Armas, desde Jerusalén; Marcel Gascón, desde Kiev y el fotoperiodista Manuel Bruque desde Valencia, que cubren la guerra en Oriente Medio, en Ucrania y la catástrofe causada por la DANA en Valencia y han cubierto otros conflictos por el mundo, han dado una clase magistral a los alumnos del curso 2024-25 del Máster UC3M-EFE, en la que se ha analizado desde qué lleva a un periodista a cubrir un conflicto, cómo se desenvuelve en el país en guerra o que sufre una catástrofe, cómo busca las fuentes, cómo transmite esa información y cómo se lucha contra la desinformación.
El uso de teléfonos móviles, ordenadores y cámara, las fuentes informativas, el papel de las redes sociales, la ética periodística y la responsabilidad a la hora de informar, así como el dolor de las víctimas, fueron algunos de los puntos analizado por los tres compañeros.
Sin dejar a un lado la parte logística, desde buscar la comida, el alojamiento, el desplazamiento, contratar a los fixers (ayudantes), idiomas, imprevistos, precauciones, identificación de riesgos, medidas de protección y relaciones con los militares o autoridades civiles.
Los tres profundizaron asimismo sobre las posibles consecuencias psicológicas y físicas que pueden causar las coberturas de guerras y catástrofes.
Los tres coincidieron en que además de contar la dureza y la tragedia de una guerra o de una catástrofe natural también es necesario contar al mundo qué ocurre en un país en guerra, mostrar la vida diaria de sus habitantes, ir a algo más que a narrar sólo lo que ocurre en el frente.
Sara Gómez Armas, que es la delegada de EFE en Israel, narró el día a día de la situación en Oriente Medio, la cobertura de la guerra en Gaza, el conflicto entre Israel-Hizbulá en Líbano, el enfrentamiento Israel-Irán, etc., y destacó la importancia de las fuentes y de discernir entre lo que es información y propaganda por parte de todas las partes.
Marcel Gascón, que es corresponsal de EFE en Ucrania, coincidió en la necesidad de distinguir entre información y propaganda, señaló que muchas veces los gobiernos intentan tapar la realidad de lo que está ocurriendo, por lo que es necesario buscar en la otra parte del conflicto para entender la realidad.
Manuel Bruque, fotoperiodista de la delegación de EFE en Valencia, que ha cubierto conflictos por el mundo, destacó que el fotoperiodista debe huir del morbo, que se puede contar lo que ocurre sin mostrar en primer plano la sangre y la muerte y que el dolor se puede narrar sin dañar la dignidad de las personas, de una población que sufre.
Por todo ello consideró que las tragedias deben ser contadas por periodistas, fotoperiodistas o cámaras con ética y humanidad.
