Con un tono marrón cálido y sofisticado que resalta la naturalidad del cacao, el confort del café y la atemporalidad de la tierra, este color se va a convertir en el protagonista del año. Al ser un tono neutro no solo aporta equilibrio visual, sino que también promueve una sensación de calma y bienestar en cualquier espacio, lo que lo hace un color ideal para aquellos proyectos que buscan ambientes acogedores y elegantes.
Desde Moinsa, expertos en proyectos integrales de interiorismo y equipamiento para diferentes sectores, mostramos cómo este color puede aplicarse en distintos entornos, transformándolos en lugares funcionales y estéticamente cautivadores.
Espacios comerciales.
Este tono terroso, aplicado en elementos como paneles de pared, expositores o mostradores aporta una sensación de exclusividad sin resultar intimidante al cliente. Además, al ser un color neutro, permite resaltar los productos expuestos, sin robarles protagonismo y creando un fondo elegante y limpio. Desde Moinsa han comprobado que un entorno bien diseñado puede aumentar el tiempo que los clientes pasan en la tienda, lo que se traduce en mayores oportunidades de venta.
Otro uso puede estar en la incorporación de Mocha Mousse en zonas de espera o de descanso. Combinado con materiales como la madera o tejidos en tonos claros, se consigue una estética sofisticada que invita a los clientes a relajarse y disfrutar de la experiencia mientras acompañan a sus seres queridos de compras.
Oficinas.
En un contexto donde el teletrabajo y los modelos híbridos se han convertido en la nueva normalidad, el diseño de oficinas debe adaptarse e ir de la mano con estas nuevas necesidades. Los espacios de trabajo ya no solo deben ser funcionales, sino también motivadores y cómodos, de manera que los empleados se sientan inspirados a desarrollar su trabajo.
Mocha Mousse se convierte en un aliado perfecto para este tipo de entornos gracias a su capacidad para generar ambientes serenos y equilibrados y, por eso, desde Moinsa creemos que este color puede utilizarse en zonas de trabajo abiertas para crear una atmósfera relajante que favorezca la concentración. Además, combinando el color del año con iluminación natural y plantas, se refuerza la conexión con la naturaleza, lo que reduce el estrés y aumenta la productividad.
Hospitality.
En el sector de la hostelería, la primera impresión es crucial. Los huéspedes y comensales buscan cada vez más experiencias que les ofrezcan un mayor confort. También desean encontrar un entorno que recuerden y quieran volver a visitar. Mocha Mousse es el color perfecto para lograr esta conexión con los clientes, ya que su calidez natural crea espacios que invitan a la relajación y al disfrute.
En hoteles, este tono puede emplearse en zonas comunes como lobbies, salones o pasillos y desde Moinsa recomendamos “combinarlo con texturas como el mármol o el lino para conseguir ese equilibrio entre el lujo y el confort”.
El color del año es una fuente de inspiración que marca tendencias y abre un abanico de posibilidades creativas. Sin embargo, elegir un color para un proyecto no debe ser una decisión únicamente guiada por modas, sino por la esencia de cada marca, el propósito del espacio y los objetivos que se desean alcanzar.
Si Mocha Mousse encaja con la identidad del proyecto y contribuye a crear el ambiente deseado, su uso será una gran herramienta para reforzar la estética y la funcionalidad del entorno. Pero, incluso si no se emplea directamente, la clave está en verlo como una oportunidad para explorar nuevas ideas y enriquecer el diseño con una mirada fresca este 2025.
