En los últimos diez años de Premios Goya, el Goya de Honor ha recaído en 5 mujeres Aitana Sánchez-Gijón, Ángela Molina, Pepa Flores ‘Marisol’, Marisa Paredes y Ana Belén y en 5 hombres Juan Mariné, Carlos Saura, José Sacristán, Narciso ‘Chicho’ Ibáñez Serrador y Mariano Ozores.
«una actriz muy querida y respetada por sus compañeros y reconocida por el público y la crítica desde sus comienzos. Una actriz completa: seria, responsable, competente, cercana y que sabe otorgar a todos sus trabajos verdad, sinceridad y profundidad», destacó el presidente de la Academia, Fernando Méndez-Leite.
Aitana fue la primera mujer en presidir la academia , nacida en la ciudad eterna debutó en el cine en 1986 de la mano de José María Forqué en Romanza Final (Gayarre), el mismo año en el que se convertía en un rostro habitual de la pequeña pantalla gracias a la serie Segunda enseñanza, en la que compartía reparto con Juan Diego, junto a quien recibió la Medalla de Oro de la Academia en 2015.
El próximo goya de Honor ha trabajado en películas de Fernando Fernán-Gómez, Pilar Miró, Bigas Luna, Vicente Aranda, Gonzalo Suárez, Jaime Chávarri, Imanol Uribe, Fernando Colomo, Pedro Almodóvar, Adolfo Aristarain, Juan José Campanella, Manolo Gómez Pereira o Patricia Ferreira, entre otros, cree que este Goya le llega en un buen momento profesional.
«Estoy en plenitud de facultades, soy más consciente de mis recursos, estoy más en paz con mis limitaciones y me doy más espacio a jugar y arriesgarme más», reflexionó la intérprete, a la que la llamada de Méndez-Leite para comunicarle la noticia le pilló a una hora de tener que subirse a las tablas para interpretar la obra de teatro La madre.
Para la actriz, el Goya de Honor «es un espaldarazo, es sentirme querida por mis compañeras…
Son 40 años desde que empecé a dedicarme profesionalmente a la actuación y 45 años desde que empecé con La Barraca. He nacido casi siendo actriz y sentir que esa trayectoria de vida es vista por mis compañeros me emociona profundamente. Muchos de los que nos dedicamos a esto necesitamos ser amados y esto es una prueba de amor máxima. Es un estímulo para seguir adelante».
Aitana que la descubrimos con el éxito de Bajarse al moro , además de una excelente carrera en España tanto en cine como TV y teatro, también tiene parte de su carrera internacional, hagamos un paseo rápido.
Su despegue fue en la comedia de Fernando Colomo Bajarse al Moro, continuó en Remando al viento, de Gonzalo Suárez, o Jarrapellejos, de Antonio Giménez Rico. También apareció en El mar y el tiempo, dirigida por Fernando Fernán-Gómez, o El pájaro de la felicidad, de Pilar Miró, al tiempo que empezaba a incorporarse a producciones internacionales, con El marido perfecto, de Beda Docampo Feijóo.
Continuó siendo una de las intérpretes más requeridas de nuestro cine, y encadenó importantes papeles en producciones como Un paseo por las nubes, de Alfonso Arau, en la que compartía protagonismo con Keanu Reeves; La ley de la frontera, de Adolfo Aristarain; Boca a boca y El amor perjudica seriamente la salud, ambas de Manuel Gómez Pereira; La camarera del Titanic y Volavérunt, de Bigas Luna; o Yerma, de Pilar Távora; además de encarnar en la pequeña pantalla a La Regenta, a las órdenes de Fernando Méndez-Leite.
También ya en el SXXI ha participado en El maquinista, de Brad Anderson, junto a Christian Bale; La puta y la ballena, de Luis Puenzo; o La carta esférica, de Imanol Uribe. Más recientemente, se la vio en Thi Mai: Rumbo a Vietnam, de Patricia Ferreira; Madres paralelas, de Pedro Almodóvar;La jefa, de Fran Torres, y Que nadie duerma, de Antonio Méndez Esparza.
El próximo 8 de febrero veremos a una exultante Aitana con un discurso que parece ya está preparando, y una carrera todavía larga donde podremos seguir disfrutando muchos años de su talento.