El 24 de enero se celebró en Madrid la jornada «Gestión de los nuevos costes laborales en 2025», organizada por la Confederación Empresarial de Madrid (CEIM) y la Asociación de Mutuas de Accidentes de Trabajo (AMAT). El evento contó con la participación de José María Roncero, secretario general de AECIM, y fue clausurado por Miguel Garrido de la Cierva, presidente de CEIM. Durante la jornada, se subrayó el impacto económico del absentismo laboral y la necesidad de abordar esta problemática en la agenda política.
El impacto del absentismo laboral en cifras
En la Comunidad de Madrid, el coste de las bajas laborales por enfermedad común o accidentes no laborales alcanzó los 5.027 millones de euros en 2024, un 99% más que hace seis años. A nivel nacional, este gasto ascendió a 28.987 millones de euros, con un incremento similar en el mismo periodo. Estos costes incluyen tanto las prestaciones económicas de la Seguridad Social como el impacto directo en las empresas.
La incidencia media de procesos de baja laboral por Incapacidad Temporal derivada de Contingencias Comunes ha crecido un 46,92% en la Comunidad de Madrid desde 2018. Este aumento representa un importante desafío económico y organizativo para empresas, Seguridad Social y trabajadores.
El papel de las Mutuas en la gestión sanitaria
Las Mutuas destacaron que podrían generar importantes ahorros si se les permitiera intervenir en la atención sanitaria integral de las patologías traumatológicas derivadas de Contingencias Comunes y emitir el alta médica. Según sus estimaciones, en la Comunidad de Madrid podrían ahorrarse 371 millones de euros y, a nivel nacional, más de 3.086 millones de euros.
En 2024, los trabajadores madrileños diagnosticados con patologías traumatológicas tardaron una media de 23 días más en recuperarse bajo la atención del Servicio Público de Salud, en comparación con los tiempos de recuperación gestionados por las Mutuas en casos de accidentes laborales. Esta ineficiencia no solo prolonga innecesariamente el sufrimiento de los trabajadores, sino que también genera un impacto económico negativo tanto para las empresas como para la Seguridad Social.
Reclamos de CEIM y AMAT
Miguel Garrido de la Cierva fue tajante: “Es un problema real que debería estar como prioridad en la agenda política. Como sociedad, no nos podemos permitir el gasto desproporcionado de recursos tanto públicos como privados que suponen las bajas laborales. Los datos demuestran que si las Mutuas pudieran participar en la gestión y agilización de estos procesos, se ahorrarían millones”.
Tanto CEIM como AMAT instaron a los responsables políticos a implementar acuerdos con los Servicios Públicos de Salud de las Comunidades Autónomas para mejorar la eficiencia en la gestión de las bajas laborales. Resaltaron que las Mutuas colaboradoras con la Seguridad Social han demostrado ser capaces de reducir significativamente los tiempos de recuperación en patologías traumatológicas, agilizando la reincorporación de los trabajadores y minimizando los costes asociados.
Un llamado a la acción
La jornada concluyó con un llamamiento a priorizar la lucha contra el absentismo laboral en la agenda política. Tanto CEIM como AMAT enfatizaron la necesidad de colaboración entre los agentes sociales, las empresas y los sistemas de salud para afrontar este reto creciente. Además, instaron a implementar medidas concretas que permitan a las Mutuas asumir un papel más activo en la atención sanitaria de las bajas por Contingencias Comunes.
El informe completo elaborado por AMAT está disponible para consulta, ofreciendo un análisis detallado de la situación actual y las propuestas para mejorar la gestión de los costes laborales en España.