Delegación de Castilla y León
Verdad, memoria, gratitud y justicia son las cuatro principales peticiones que realizan las víctimas del terrorismo, en palabras del consejero de la Presidencia de Castilla y León, Luis Miguel González Gago, quien apela al consenso y el diálogo y considera que es inadmisible el uso de bombas, pistolas o cuchillos para resolver las diferencias de pensamiento.
González Gago ha inaugurado en el IES Cardenal López de Mendoza de Burgos la exposición “Atentados del 11M: Memoria de dolor y solidaridad”, organizada por la Fundación Víctimas del Terrorismo, en colaboración con la Junta de Castilla y León, y que está compuesta por imágenes de la Agencia EFE.
El consejero ha recordado que en Castilla y León hay víctimas del terrorismo: a las catorce víctimas propias de los atentados de Madrid del 11 de marzo de 2004 se suman todas aquellas que murieron, o resultaron heridas, por otros atentados cometidos en pueblos y ciudades de la Comunidad.
“Ante una diferencia de pensamiento, lo que se debe provocar siempre es el consenso, el diálogo y la solución en común. No es admisible que ante diferentes planteamientos se pueda acudir a la puesta de bombas, a utilizar pistolas o cuchillos para imponer la voluntad de cada uno”, ha insistido.
Y ha recordado que las víctimas piden “cuatro cosas elementales”: verdad, que se cuenten las cosas tal como son para evitar la justificación de los atentados; memoria, que no se olvide lo ocurrido; gratitud, porque “no es normal que se puedan admitir actos de exaltación de aquellos que cometen actos terroristas”; y justicia, “que toda persona que haya participado en un atentado, que haya cometido un atentado, se vea juzgado y se le aplique la ley con todas sus consecuencias”.
Símbolo de la democracia
El consejero de la Presidencia ha inaugurado la exposición, acompañado de representantes del Ayuntamiento de Burgos, la Diputación Provincial, la Subdelegación del Gobierno, y las máximas autoridades de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
Burgos, 07/04/25. El consejero de la Presidencia de Castilla y León, Luis Miguel González Gago (d), en la exposición ‘Atentados del 11M. Memoria de dolor y solidaridad’, de la Fundación Víctimas del Terrorismo en Burgos. EFE/Santi Otero
Junto a él, el presidente de la Fundación Víctimas del Terrorismo, Juan Benito, ha insistido en que “las víctimas del terrorismo son el verdadero símbolo de la democracia”, porque murieron o sufrieron heridas como consecuencia de atentados contra el Estado de Derecho, y por ese motivo la sociedad está obligada a apoyarlas, para “preservar la memoria, mantener su dignidad, exigir justicia y defender la verdad”.
“Atentados del 11M. Memoria y solidaridad”, que se podrá visitar hasta el 11 de abril, cuenta con 67 fotografías procedentes del fondo documental de la Agencia EFE y está estructurada en nueve apartados, cada uno de los cuales lleva una cartela de texto a modo de introducción, en castellano e inglés, para contextualizar el contenido informativo.
Para el diseño de los contenidos y estructura de la exposición se ha contado con el comisionado de Laura Camacho y Sagrario Ortega, periodistas de la Agencia EFE y especializadas en informaciones sobre Interior.
El peor atentado de la historia
La muestra, que ha pasado por Madrid, el Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo, Azuqueca de Henares (Guadalajara), Haro (La Rioja), Badajoz y Alcalá de Henares (Madrid), arranca con un recuerdo al peor atentado terrorista en suelo europeo, que dejó 193 muertos y más de 2.000 heridos.
Entre los asesinados se incluye al miembro del Grupo Especial de Operaciones GEO, Francisco Javier Torronteras, fallecido en la explosión del piso de Leganés el 3 de abril de 2004.
Le sigue una reflexión sobre los antecedentes, la amenaza del terrorismo yihadista y los atentados del 11S; una cronología de los atentados del 11M, las diez bombas que explotaron en cuatro trenes en Atocha, la calle Téllez, el Pozo y Santa Eugenia.
Imágenes de la ola de solidaridad y dolor que recorrió España; y el macrojuicio por el que el 31 de octubre de 2007 la Audiencia Nacional dictó una sentencia en la que quedó demostrado que el atentado fue obra de células o grupos terroristas de tipo yihadista.
La exposición se completa con un recuerdo especial para las víctimas del 11M vinculadas a Castilla y León, y se cierra con una única fotografía que recoge la ofrenda floral durante el homenaje celebrado en el Bosque del Recuerdo del Parque de El Retiro en el noveno aniversario del atentado.
