Durante su intervención, Guillem expuso ejemplos de gestión colaborativa en los que Fundación Global Nature trabaja junto a propietarios y administraciones mediante acuerdos de custodia del territorio. Además, presentó los primeros pasos del proyecto europeo LIFE AWoM, centrado en la restauración de humedales clave para la supervivencia del carricerín cejudo, un ave migratoria en peligro de extinción. “La clave está en conectar ciencia, territorio y ciudadanía”, señaló. Una conexión que, según remarcó, debe reflejarse tanto en la gestión diaria como en las decisiones estratégicas.
La jornada cerró con una llamada a reforzar la educación ambiental, ampliar los espacios de participación real y proteger legalmente los humedales aún sin catalogar. Porque conservar estos espacios no es solo una cuestión ecológica: es una cuestión de voluntad compartida.