El Dr. Luis Gutiérrez Bardeci es especialista en Medicina Familiar y Comunitaria, Diplomado en Sanidad, Máster en Tabaquismo por la Universidad de Cantabria y es el coordinador de la Red Cántabra de Centros Sanitarios sin humos desde 2015, que forma parte de la Global Network Of Tobacco Free Healthcare Services.
Entre sus destinos profesionales destaca la coordinación de la Zona Básica de Salud Alto Pas y de la de Puerto Chico, esta última a propuesta de sus compañeros, y tiene mucho que ver en que este Centro esté acreditado como centro docente, en que cuente con la distinción de plata por su labor en la prevención y consumo de tabaco, y en que obtuviera el Premio Nacional TOP 20 por su labor asistencial. Esta brillante carrera y la petición de muchos de sus colegas ha hecho que el Colegio de Médicos de Cantabria decidiera entregarle su Premio a la Trayectoria Profesional en el ámbito de la Atención Primaria. En esta entrevista para la web colegial nos cuenta los momentos más importantes de su labor y la realidad del tabaquismo en la actualidad.
-Tienes una carrera sobresaliente en el ámbito de la Medicina Familiar y Comunitaria muy vinculada a evitar el tabaquismo con muchos reconocimientos, y ahora has recibido el Premio a la Trayectoria del COM Cantabria a propuesta de compañeros ¿qué ha supuesto esta última distinción para ti?
Ha sido un reconocimiento inesperado y muy emotivo. Cuando me lo comunicó el Presidente sentí una enorme alegría que sirvió para paliar en gran medida la tristeza que tenía por la inevitable jubilación. Lo recordaré siempre como una de las mejores noticias que me han dado en mi desarrollo profesional.
-A lo largo de tu trayectoria has estado vinculado a proyectos que han obtenido importantes éxitos ¿cuáles han sido los más destacados?
Cuando en el año 2005 comencé a involucrarme activamente en los programas de ayuda a dejar de fumar, no me podía imaginar las satisfacciones profesionales que iba a producirme y los logros sanitarios que se consiguen a medio y largo plazo. La realización del Master en Tabaquismo, el nombramiento como Coordinador de la red de Centros Sanitarios sin humo y la concesión de una beca del IDIVAL fueron hechos que reforzaron mi actividad.
Otro proyecto que me gustó mucho fue la participación en la Ruta EPOC en 2014. La elaboración de este protocolo fue multiprofesional. Fuimos a todas las Zonas Básicas y sirvió, entre otras cosas, para establecer una mejor comunicación y colaboración con el segundo nivel
asistencial, algo que es muy importante y necesario. En este caso fue con el servicio de Neumología.
-Y ¿estás en la actualidad inmerso en algún proyecto novedoso?
Actualmente no, aunque las compañeras de la Unidad de Tabaquismo de la Consejería me han pedido colaboración para la publicación de un estudio sobre la prevalencia del consumo de tabaco en profesionales sanitarios y con mucho gusto procuraré ayudar.
-Y con respecto a tu empeño por acabar con el tabaquismo ¿crees que nos quedan muchas asignaturas pendientes en este sentido?
Para disminuir la prevalencia del tabaquismo es clave la actitud política y el apoyo social. En junio tuvo lugar en Santander la reunión de la Mesa del tabaco. A la jornada de clausura acudió el consejero de Industria, D. Eduardo Arasti, quien realizó , en mi opinión, unas
declaraciones poco afortunadas y que contradicen el Plan de Salud de Cantabria 2025-2029, recientemente aprobado. Afirmó que la región tiene en el Sector del tabaco “ una palanca de desarrollo que debemos seguir fortaleciendo”. Se basaba en la aportación al Producto Interior
Bruto y a los empleos que genera. Olvidó los gastos directos que ocasiona el tabaquismo que, según muchos estudios, suponen el 10% del gasto total en Sanidad, y otros indirectos derivados de la perdida de productividad, las ausencias laborales, el mayor número de consultas que precisan los fumadores o la necesidad de cuidados a largo plazo. Los gastos superan a los ingresos, según se ha demostrado y publicado. Creo que es necesaria una mayor involucración política en las recomendaciones que hacen la OMS y muchas sociedades científicas y sanitarias, basadas en la evidencia.
-¿Qué ocurriría en el Sistema de Salud si se redujera de forma drástica el consumo de tabaco?
Reducir de forma drástica el consumo de tabaco es difícil. Hay que tener en cuenta que el tabaquismo en la inmensa mayoría de los casos es una dependencia. Al disminuir la prevalencia disminuirá el porcentaje de carcinomas, de enfermedades, principalmente cardiovasculares, que se relacionan con el consumo de tabaco y se evitarán fallecimientos prematuros. Disminuirá el gasto sanitario y se dispondrán de más recursos para para abordar otros problemas de salud.
–Ejercer la Medicina en la especialidad de Familiar y Comunitaria es poco demandado por los nuevos médicos ¿por qué crees que es así?
Creo que se reconoce y potencia muy poco nuestra actividad preventiva de enfermedad y de promoción de la salud. Para que nuestra especialidad sea más demandada, habría que medir y valorar la actividad profesional por resultados en salud y compensar a quienes mejor lo hacen de forma proporcional a los resultados. También debería favorecerse y premiar la investigación más de lo que se hace. Debería compensarse mejor la penosidad y los desplazamientos por trabajar en determinadas zonas. Los contratos deben ser más largos, buscando la estabilidad.
-Para terminar, dinos cuáles son tus objetivos profesionales a corto y medio plazo.
Desde el punto de vista clínico, por desgracia, no tengo proyectos pues siempre estuve vinculado exclusivamente a la sanidad pública. Eso si, la Medicina no se olvida de la noche a la mañana y ofrezco ayuda y colaboración, si precisan, a familiares y amigos. Continuo siendo el Coordinador de la Red de Centros sin Humo, aunque ofrecí mi relevo a la Directora de Salud Pública. Por el momento, ha decidido mantenerme. Aspiro a que se publique un articulo que está en la Unidad Docente y que realizamos con la beca IDIVAL. También deseo colaborar con la Unidad de tabaquismo de la Consejería, en los trabajos que vayan a realizar y que consideren puedo ayudar.
