La Policía Nacional ha detenido en Santander a dos personas, una mujer y un hombre, como presuntos autores de delitos de intrusismo profesional y contra la salud pública, ya que realizaban tratamientos con bótox y ácido hialurónico sin contar con la titulación oficial para ello y sin cumplir los requisitos sanitarios.
En la operación, se han intervenido, en un piso turístico, utensilios, materiales y productos de naturaleza sanitaria, dos teléfonos móviles y 8.345 euros en metálico.
La Policía explica en un comunicado que los detenidos, que han quedado en libertad pero con la prohibición de salir del territorio nacional, se anunciaban a través de una red social, indicando los tratamientos que ofertaban, así como los días que la mujer iba a estar realizándolos en distintas ciudades de España.
Además, la comunicación con las víctimas solamente se realizaba a través de mensajes a través de la red social, informando de la dirección exacta instantes antes de llevar a cabo el tratamiento, y exigiendo el dinero en efectivo como única modalidad de pago de los tratamientos.
La mujer, que era quien hacía los tratamientos, iba acompañada de un hombre con una participación activa, según la Policía, ya que esperaba a pie de calle a los clientes para facilitarles el acceso al portal del inmueble, al tiempo que vigilaba que no hubiera nadie por las inmediaciones.