La compañía inicia las primeras paradas de Brickness 2025 en Lugo, Valladolid y Aranjuez.
Grupo Ibricks ha puesto en marcha Brickness 2025, su encuentro anual con los asociados, con las tres primeras paradas en Lugo, Valladolid y Aranjuez. Este recorrido, que se extenderá por distintas ciudades españolas en las próximas semanas, tiene como objetivo reforzar la colaboración entre la central y los almacenes de la red.
Durante esta primera etapa, el equipo de la central se reunió con los asociados de cada zona para compartir avances, recoger propuestas y analizar la evolución del grupo. Según explicó Javi Damiá, gerente de operaciones de Grupo Ibricks, “estas jornadas son esenciales para comprobar si las decisiones estratégicas del grupo están alineadas con la realidad de nuestros asociados. Escuchar de forma directa lo que ocurre en cada almacén nos permite avanzar con mayor certeza”.
En los encuentros se abordaron temas clave para el canal profesional, como las líneas de trabajo previstas para 2026, la situación del mercado y el desarrollo de las marcas propias. Entre las principales novedades destacan el lanzamiento de Koiné como marca independiente y la consolidación de Ibricks Pro dentro de la oferta del grupo.
La acogida de los asociados ha sido positiva. Desde Almacenes Castillo de Muros, distribuidor gallego con casi cuatro décadas de trayectoria, su gerente Marcos Lijo destacó el valor de estas jornadas: “Brickness siempre ha sido un punto de encuentro útil para compartir ideas y tomar perspectiva. Este año, además, muchas de las propuestas trasladadas en meses anteriores se han hecho realidad, especialmente en lo relativo a las marcas propias y a los nuevos enfoques digitales”.
La próxima semana, Brickness 2025 continuará su recorrido con nuevas sesiones en Bilbao, Zaragoza y Barcelona, manteniendo el objetivo de reforzar la comunicación entre la central y los asociados y seguir avanzando hacia una estrategia común.
