La carrera por las entregas ultrarrápidas ya ha comenzado y los retailers buscan fórmulas para ganar sin disparar costes. El micro-fulfilment está transformando la logística urbana y abriendo nuevas oportunidades de eficiencia, proximidad y velocidad. Un modelo capaz de redefinir cómo se preparan y distribuyen los pedidos en entornos cada vez más exigentes, impulsando una cadena logística más ágil, competitiva y sostenible.
¿Cómo están logrando los retailers entregar pedidos cada vez más rápido sin disparar sus costes logísticos?
El micro-fulfilment es un modelo logístico que apuesta por la proximidad y la sostenibilidad, consiste en crear pequeños centros de preparación de pedidos micro-hubs o mini-almacenes estratégicamente situados en zonas urbanas, barrios o incluso dentro de tiendas ya existentes. Su finalidad no es almacenar grandes volúmenes durante largos periodos, sino agilizar la preparación de pedidos de alta rotación, permitiendo recoger, gestionar y enviar productos en cuestión de horas. Este enfoque descentralizado rompe con el tradicional modelo de grandes almacenes en las periferias y abre paso a una logística más flexible, distribuida y cercana al cliente. Una evolución que será también abordada en el Retail Forum 2026, que tendrá lugar el 18 de marzo de 2026, donde se analizarán nuevas estrategias para optimizar este modelo.
En este escenario, la última milla es el trayecto final que lleva el pedido desde el micro-hub hasta la puerta del cliente o un punto de recogida, esto hace que se convierta en un elemento clave. Es, además, la fase más costosa y compleja de toda la cadena logística, condicionada por factores como el tráfico urbano, la variabilidad de rutas o la gestión de devoluciones.
No obstante, cuando una red de micro-fulfilment se integra con una última milla optimizada, el impacto es inmediato, los tiempos de entrega se reducen drásticamente, los costes operativos disminuyen y es posible ofrecer servicios ultrarrápidos, desde entregas en el mismo día hasta entregas en cuestión de horas. El resultado es una experiencia de cliente mucho más ágil, eficiente y competitiva, perfectamente alineada con las exigencias del retail actual.
¿Por qué el micro-fulfilment está ganando tanta relevancia actualmente y cómo se implementa en la práctica dentro de las operaciones logísticas modernas?
El micro-fulfilment se impulsa por el cambio en las expectativas del consumidor, que hoy exige entregas rápidas y experiencias propias del comercio electrónico, así como por la necesidad de reducir costes y mejorar la eficiencia acercando el inventario al cliente. A esto se suman la flexibilidad y escalabilidad de los micro-centros, capaces de adaptarse a distintos negocios y modelos omnicanal, además de su contribución a la sostenibilidad al disminuir distancias, emisiones y congestión urbana.
En la práctica, requiere una integración omnicanal que permita compartir stock entre tienda física y online, facilitar devoluciones y ofrecer entregas rápidas o recogida en tienda. Muchos retailers aplican modelos híbridos que reconvierten parte de su espacio comercial en áreas logísticas, complementando el sistema con una última milla optimizada mediante rutas eficientes y redes locales de reparto.
Oportunidades y desafios
Oportunidades
- Competitividad: Ofrece entregas ultrarrápidas, en el mismo día o incluso en horas, lo que lo convierte en un factor diferenciador esencial.
- Mejora de la experiencia cliente: Velocidad, fiabilidad, disponibilidad de stock cercana, menor fricción en devoluciones…
- Eficiencia logística y ahorro: Disminuye costes de transporte, existe menor inversión en grandes almacenes y flexibilidad.
- Sostenibilidad urbana: Reducción de emisiones, menos congestión y menor impacto ambiental.
Desafíos
- Coste inicial de implantación: exige adaptar espacios urbanos, invertir en automatización, tecnología y stock distribuido.
- Complejidad operativa: se deben coordinar múltiples centros pequeños, logística omnicanal, rotación rápida de stock y devoluciones.
- Gestión de inventario eficiente: se puede predecir la demanda local, optimizar stock y evitar roturas o exceso.
¿Qué puede esperar el retail en los próximos años?
La expansión continua del micro-fulfilment hará que cada vez más retailers tanto grandes como pequeños, apuesten por estos micro-hubs, especialmente en ciudades densas. A esto se suma la integración con tecnologías inteligentes, como la IA para optimización de rutas, la predicción de demanda, la automatización del picking y el uso de vehículos eléctricos o sostenibles.
Además, el modelo híbrido omnicanal seguirá tomando fuerza: la mezcla entre tienda física, logística y de eCommerce transformará las tiendas en auténticos centros logísticos urbanos. Todo ello irá acompañado de un mayor enfoque en sostenibilidad, ya que los centros urbanos, las rutas optimizadas y la reducción de kilómetros recorridos contribuirán a disminuir la huella ecológica del retail.
