En la presentación de la Memoria anual de la Iglesia católica en España 2024, celebrada en la Fundación Pablo VI (Madrid), la Conferencia Episcopal Española invitó a Fundación Altius, a dar testimonio de la ayuda prestada a los damnificados por la DANA que afectó gravemente a la Comunidad Valenciana.
Durante el acto, se puso de relieve un mensaje claro y profundamente eclesial: “Cuando la Iglesia llega, es para quedarse”, una afirmación que resume el compromiso sostenido de Fundación Altius con las personas afectadas, no solo en los momentos de emergencia, sino también en el acompañamiento a medio y largo plazo.
Una respuesta inmediata y una presencia que continúa
Santi Fayos, director de Fundación Altius Valenciana, explicó que la respuesta comenzó desde el primer momento, atendiendo tanto las necesidades materiales como las psicológicas de las personas afectadas:
Había mucha necesidad material y también muchas necesidades psicológicas. Cuando llegamos aquí, como Regnum Christi y como Fundación Altius, en ese primer momento de emergencia pudimos cubrir muchas de esas necesidades, especialmente las materiales”.
Fayos subrayó además el sentido profundo de esta presencia continuada:
Hay algo muy bonito: cuando la Iglesia llega, se queda”.
Somos Iglesia y, donde llegamos, nos quedamos
Cuatro meses después de la DANA, el balance es significativo, pero el dolor sigue presente. Junto a él, también emerge el agradecimiento y la esperanza de quienes se saben acompañados:
Hemos podido ver —y es precioso— cómo el acompañamiento a estas personas puede generar una esperanza muy grande: saben y sienten que no les vamos a dejar. Somos Iglesia y, donde llegamos, nos quedamos”, afirmó Fayos.
Este compromiso se refleja también en los datos presentados:
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Más de 8,4 millones de euros en donaciones gestionadas para ayudar a los afectados.
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Más de 56.000 personas atendidas en Valencia a causa de la DANA, que se suman a las más de 31.000 personas atendidas en las sedes de Fundación Altius en toda España durante 2024.
De la emergencia al acompañamiento estable
Por su parte, Antonio Martínez, coordinador de Fundación Altius en Benetússer y Paiporta, explicó el paso de la ayuda de emergencia a un acompañamiento estable y organizado en el territorio:
“Una vez pasada esta primera fase de emergencia, en la que hemos podido volcarnos en la ayuda, llega también el momento de analizar la situación… Hemos instalado una sede y permanecemos en la zona afectada”.
Tras atender a más de 1.000 familias en la primera etapa, Martínez señaló como prioridades actuales el apoyo psicosocial, así como el acompañamiento infantil y familiar, claves para la reconstrucción personal y comunitaria.
