El sector de la automoción, motor de la economía nacional, se encuentra en una encrucijada marcada por la innovación tecnológica, la transición a la sostenibilidad y los cambios estructurales. Ahora más que nunca se buscan perfiles de profesionales que puedan no solo atender los desafíos de digitalización, sostenibilidad y especialización, sino que sean capaces de generar nuevos retos.
Con más de 600.000 empleados y una contribución significativa al PIB, su estabilidad es crucial para el desarrollo económico del país. Sin embargo, para mantener esta posición y liderar los importantes desafíos de digitalización y las exigencias medioambientales, es fundamental abordar los desafíos que afectan al talento en automoción.
La era de la digitalización y la rápida evolución tecnológica está transformando el panorama laboral. Se espera que para 2030, millones de empleados en Europa cambien de ocupación debido a la adopción tecnológica y la inteligencia artificial. En un mundo en constante evolución, la industria de la movilidad se encuentra en un momento crucial. La adopción de la Industria 4.0, también conocida como la cuarta revolución industrial, está transformando radicalmente el panorama empresarial, y el sector de la movilidad encabeza esta capacidad de transformación.
Los operadores de movilidad y todos los grupos de interés que trabajamos brindando servicios tienen ante sí tres retos fundamentales: digitalización, sostenibilidad, y conocimiento técnico especializado. Para tener éxito, la captación del talento adecuado y su fidelización es uno de los mayores retos vinculados a los profesionales de la historia.
La revolución de la digitalización en las personas
La digitalización ha llegado para quedarse y las empresas de movilidad se están adaptando para aprovechar al máximo su potencial. Este cambio no solo implica la implementación de nuevas tecnologías, sino también la adaptación de los perfiles que buscan las empresas de movilidad. Se necesitan nuevos perfiles profesionales, como expertos en IA, STEM, Big Data, gestión de proyectos y robótica, que antes no eran tan solicitados en el sector. Esta demanda continuará creciendo, especialmente en áreas como Mecatrónica, Mecánica y Robótica.
La transformación digital también implica la necesidad de mejorar las competencias digitales del personal existente. Las empresas deben invertir en formación continua y en la actualización de habilidades para asegurarse de que sus empleados pueden manejar las nuevas tecnologías y adaptarse a los cambios constantes en el entorno laboral.
La creación de programas de capacitación específicos y la colaboración con instituciones educativas para desarrollar currículos alineados con las necesidades de la industria son pasos esenciales para superar este desafío.
La sostenibilidad como pilar fundamental
En términos medioambientales, la adopción de tecnologías avanzadas y procesos de fabricación o reparación más eficientes, así como la gestión de residuos y otras prácticas que promuevan la economía circular y la sostenibilidad medioambiental, trae la necesidad de encontrar perfiles especializados en sostenibilidad, gestión medioambiental, economía circular y tecnologías verdes, capaces de integrar estas prácticas de manera efectiva y rentable en las empresas de movilidad.
La sostenibilidad no solo se refiere a la producción y al diseño de vehículos más eficientes, sino también a la implementación de procesos de trabajo que reduzcan el impacto ambiental. La transición hacia un modelo de economía circular, donde los recursos se reutilizan y se minimiza el desperdicio, es fundamental para asegurar un futuro sostenible en la movilidad.
Conocimiento técnico y especialización
Además de las competencias digitales y medioambientales, es crucial contar con profesionales que posean un profundo conocimiento técnico en automoción. Los ingenieros especializados en mecánica automotriz, diseño de vehículos y sistemas de propulsión eléctrica son indispensables.
Las titulaciones en ingeniería mecánica, ingeniería eléctrica y mecatrónica son especialmente valiosas. Asimismo, la experiencia práctica en talleres o plantas de fabricación, junto con certificaciones en tecnologías de vehículos avanzados, es altamente valorada.
Además, la industria también requiere mecánicos, pintores, técnicos de carrocería, etc. quienes juegan un papel fundamental en el mantenimiento y reparación de los vehículos. Los peritos, cada vez más especializados, son esenciales para evaluar y gestionar los daños en los vehículos, asegurando que las reparaciones se realicen de acuerdo con los estándares más altos. La capacidad de estos profesionales para entender y trabajar con los aspectos técnicos y mecánicos de los vehículos es esencial para el desarrollo de soluciones innovadoras y eficientes en el sector.
