Ciudades en las que se mira el Parque Central de Alicante

El Ayuntamiento de Alicante se fija en los proyectos de Logroño, Bilbao, València y Barcelona en la consulta pública que ha abierto a la ciudadanía para decidir sobre la futura infraestructura

DIARIO INFORMACIÓN 07/07/2024

El Parque Central de Alicante, una de las grandes demandas históricas aún pendientes, tendrá que resolver importantes cuestiones que cambiarán la configuración de la ciudad. Entre ellas, los detalles de la estación intermodal (donde confluirán trenes, autobuses, taxis y TRAM), la integración de las más de 1.300 viviendas que se proyectan en la zona o la utilización del espacio disponible para «compensar» la falta de dotaciones en los barrios colindantes.

El proyecto se encuentra ahora un paso más cerca después de que el Ayuntamiento haya impulsado una consulta pública como pistoletazo de salida a la última fase de la ordenación de los terrenos donde se ubicará el parque. En este proceso de participación, Alicante se mira en el espejo de otras localidades que están haciendo frente a situaciones similares, en las que las infraestructuras ferroviarias suponían una brecha para su espacio urbano, y han optado por «tejerla» mediante grandes zonas verdes.

En concreto, el documento dado a conocer hace escasos días por el Ayuntamiento, expone los proyectos del parque Felipe VI y la estación intermodal de Logroño; la estación de Abando en Bilbao; el parque central de València y la remodelación del entorno de la Sagrera, en Barcelona. Cuatro localidades que han resuelto, de formas diversas, problemáticas similares a la existente en Alicante, donde soterrar la playa de vías actual permitirá disponer de casi 500.000 metros cuadrados de espacio público que, por el momento, supone una barrera entre barrios como San Blas y La Florida.

Logroño

En el caso de Logroño, que ya cuenta con la vías soterradas desde hace más de una década, la integración de la estación intermodal se ha resuelto mediante dos estaciones enfrentadas, una para los trenes y otra para los autobuses, que se conectan entre sí a través de una gran cúpula vegetal. A ambos espacios es posible acceder a pie de calle, por lo que la zona verde se ha generado a lo largo de las cubiertas de los edificios.

Para conseguir dotar de iluminación natural al interior de las construcciones, el parque de Felipe VI (que se ha ido construyendo por fases desde 2011) cuenta con grandes lucernarios que, haciéndose servir de un sistema de grandes espejos, otorga luz a las instalaciones soterradas. Además, el parque resultante cuenta con un estanque y un sistema de drenaje y aprovechamiento del agua de lluvia. Sin embargo, debido a su espacio reducido en comparación con el disponible en Alicante, no cuenta con promociones de vivienda.

Bilbao

En la ciudad vasca, en cambio, introducir en el proyecto bloques residenciales ha sido una de las prioridades en el proyecto de integración de la estación de Abando. La estación intermodal soterrada incluirá el servicio de trenes, tranvías, taxis y autobuses, al igual que en Alicante. En cuanto al parque exterior, el proyecto se extenderá sobre un espacio de 128.000 metros cuadrados y permitirá también conectar barrios que hasta ahora estaban separados por las infraestructuras ferroviarias: Abando, Bilbao la Vieja, Zabala y Casco Viejo.

En este caso, al disponer de unos terrenos casi cuatro veces inferiores a los de Alicante, se ha pretendido que la integración de las construcciones en el entorno no disminuya la gran masa verde, para lo que los edificios contarán con cubiertas vegetales. En cuanto a las estructuras preexistentes, se conservará la gran bóveda de la estación actual y el parque central se dividirá de forma natural mediante anillos de especies arbóreas.

València

En la capital del Turia aún hay incógnitas por resolver para una infraestructura que, como en Alicante, los valencianos llevan décadas esperando. De hecho, ya en 1985 se recoge la proyección de la mayor zona verde de la ciudad en la estación de Renfe. En cuanto a la futura estación, el ministro de Transportes, Óscar Puente, anunció en el mes de marzo que antes de final de año estará listo el pliego para licitar un concurso internacional que decida el diseño del edificio.

Por lo que respecta al parque, el proyecto se adjudicó en 2011 al estudio de arquitectura y paisajismo «Gustafson Porter + Bowman».. El concepto, inspirado según sus autores en un poema de Ausiàs March, apuesta por un diseño a través de «cuencos» o «balcones» de jardines a diferentes niveles. Entre los espacios que ofrecerá, destacan cinco plazas y jardines, cuatro estanques y espacios deportivos, culturales, un edificio universitario y hasta oficinas.

Barcelona

En la ciudad condal, la futura estación intermodal de la Sagrera liberará un total de 48 hectáreas de zonas verdes. El proyecto pretende generar un nuevo espacio urbano servido por el transporte público, un parque con servicios y nuevos usos y una gran estación central. Un área compacta por su configuración y densidad, y por la cantidad de usos y actividades que se concentrarán en dicha zona. El reparto de suelo contempla la creación de 10.000 nuevas viviendas, de las que un 45% se estima que serán de Protección Oficial, mientras que en Alicante ese porcentaje se situará alrededor del 30%. También se reservan 500.000 metros cuadrados para suelo comercial terciario y hotelero.

Por lo que respecta al diseño del parque, destacan zonas como el amplio campo de rosales, que pretende generar un impacto visual de color en el pasajero que salga de la estación; una gran explanada donde se ubicará la fuente mayor y que servirá como punto de reunión y para la celebración de eventos al aire libre; y varias praderas de vegetación pisable para el esparcimiento ciudadano.