Inteligencia artificial en farmacia comunitaria

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En este artículo, explicaremos algunos de los usos, o áreas clave, en las que la Inteligencia Artificial (IA), puede cambiar de manera significativa la gestión de las farmacias comunitarias de nuestro país. 

La IA está impulsando una transformación sin precedentes en múltiples sectores, y el ámbito farmacéutico no es una excepción. Tradicionalmente, las boticas han sido pilares esenciales en la atención sanitaria, proporcionando acceso a medicamentos y asesoramiento profesional. Aunque, en un entorno cada vez más digital y orientado hacia la eficiencia, las farmacias enfrentan desafíos que requieren adaptaciones innovadoras. En este sentido, la IA se presenta como una herramienta que puede mejorar la gestión operativa y la calidad del servicio al paciente.  

Tareas en Farmacia con IA

En las farmacias, muchas tareas pueden ser muy laboriosas y consumir tiempo. Las IAs básicas pueden ofrecer soluciones económicas y rápidas, liberando al profesional farmacéutico para enfocarse en aspectos más humanos y valorados como el servicio asistencial a los pacientes. A continuación, se presentan algunos ejemplos de cómo la IA básica puede transformar la gestión de una farmacia:

1. Gestión del inventario con la IA

La gestión eficiente del inventario es uno de los mayores desafíos para cualquier negocio de venta, incluyendo las farmacias. Mantener un equilibrio adecuado entre la oferta y la demanda es clave, ya que un inventario mal gestionado puede generar dos problemas importantes: la falta de medicamentos o productos, que pone en riesgo la adherencia al tratamiento y la salud de los pacientes, y el exceso o acumulación, que puede llevar a la caducidad de los productos.

Ejemplo: 

  • Sin IA: El personal de la farmacia revisa el inventario utilizando los sistemas internos de gestión o mediante hojas de cálculo, dependiendo de cómo se lleve a cabo esta tarea en el establecimiento. Este proceso puede ser muy laborioso, consumir mucho tiempo y estar sujeto a errores humanos.
  • Con IA: La inteligencia artificial puede realizar un seguimiento automático de los niveles de inventario y enviar alertas por correo electrónico o notificaciones cuando sea necesario hacer un pedido o retirar productos por caducidad. Esto optimiza la gestión del inventario, reduciendo significativamente el tiempo y minimizando el riesgo de errores.

Verificación de recetas físicas con la IA

La IA puede asistir en la verificación automática de recetas, asegurando que cumplan con las normativas legales y que no existan errores como dosis incorrectas o combinaciones peligrosas de medicamentos. Este sistema realiza una revisión preliminar antes de que el personal farmacéutico finalice la validación, agilizando el flujo de trabajo y reduciendo el tiempo de revisión manual.

Ejemplo: 

  • Sin IA: El farmacéutico revisa cada receta manualmente, comprobando dosis, interacciones posibles y requisitos legales.
  • Con IA: La IA escanea la receta y resalta errores potenciales o incumplimientos normativos, mostrando alertas visuales y recomendaciones para correcciones, facilitando una revisión más eficiente.

3. Recordatorio de renovación de recetas con la IA

La IA puede automatizar, para los pacientes de la farmacia que así lo deseen, recordatorios para renovar sus recetas o la recogida de sus medicamentos. Estos avisos pueden realizarse a través de correo electrónico, mensajes de texto o apps móviles, mejorando la adherencia al tratamiento y reduciendo la carga administrativa del personal de la farmacia. 

Ejemplo: 

  • Sin la IA: El personal contacta manualmente a los pacientes para recordarles que renueven sus recetas, lo cual puede ser ineficiente y propenso a olvidos. Además, de suponer una dedicación de tiempo muy grande. 
  • Con IA: La IA envía automáticamente recordatorios basados en los datos de prescripción y el historial de renovación, con mensajes como: «Su receta para [Nombre del Medicamento] está apunto de caducar. Renueve antes del día [Fecha].»

4. Soporte al cliente usando la IA

De la anterior deriva una función de la IA, un chatbot puede ofrecer soporte al cliente respondiendo preguntas frecuentes sobre horario de apertura, disponibilidad de productos o si existe procedimiento de compra online. Este tipo de chats maneja consultas simples y repetitivas, permitiendo que el personal se enfoque en consultas más complejas o personalizadas. 

Ejemplo: 

  • Sin IA:  Los pacientes llaman, acuden o mandan un mensaje a la farmacia para obtener información básica como por ejemplo la disponibilidad de un producto concreto (crema solar Isdin SPF 50 para cara y pieles mixtas). El farmacéutico atiende la cuestión.
  • Con IA: El chatbot, que podría encontrarse por ejemplo en una app móvil, responde al paciente de manera automática sobre la disponibilidad del producto, y en caso de no trabajar la marca o falta de disponibilidad, recomendar otra marca similar de manera inmediata.

5. Generación de informes con IA

Como en cualquier negocio los informes nos pueden servir para saber los resultados y puntos de mejora de nuestro establecimiento. La IA puede automatizar la generación de documentos sobre ventas o tendencias de consumo, proporcionando datos valiosos sin necesidad de una intervención manual constante. Esto facilita la toma de decisiones basadas en datos precisos y actualizados, ayudando a identificar patrones de compra o áreas de mejora en la gestión de la farmacia y generando mayor rentabilidad. 

Ejemplo:

  • Sin la IA: El personal crea informes manualmente recopilando datos y utilizando herramientas de análisis, lo cual puede ser tedioso y consumir mucho tiempo.
  • Con IA: La IA genera informes automáticos y gráficos sobre el rendimiento de ventas, el consumo de medicamentos y las tendencias del mercado, presentando datos de manera visual y accesible para una rápida toma de decisiones.

¿Cómo puede ayudarme el ChatGPT en una farmacia? 

Además de las aplicaciones previamente mencionadas, la inteligencia artificial ofrece una gama más amplia de capacidades. ChatGPT, una de las IAs más conocidas y utilizadas en la actualidad, puede ser una herramienta valiosa en diversas áreas de la gestión farmacéutica. Algunos ejemplos de cómo ChatGPT puede asistir en una farmacia son:

  • Gestión de turnos: puede facilitar la planificación y gestión de los turnos del personal, ayudando a crear horarios equilibrados y resolver conflictos de manera eficiente.
  • Organización de vacaciones: puede ayudar a coordinar las solicitudes de vacaciones, asegurando que el personal pueda planificar sus tiempos libres sin afectar la operación diaria de la farmacia.
  • Capacitación del personal: el chat puede generar materiales de capacitación y proporcionar recursos educativos para el personal en formación.
  • Resolución rápida de dudas: permite a los farmacéuticos resolver dudas y consultas rápidamente, proporcionando información actualizada y relevante sobre medicamentos, normativas y procedimientos.
  • Optimización de procesos: proporciona recomendaciones para mejorar procesos internos basadas en el análisis de datos y tendencias, ayudando a aumentar la eficiencia operativa.

Caso práctico de uso de IA en farmacia: ¿Cómo empezar?

Para comenzar a utilizar herramientas de Inteligencia Artificial (IA) como ChatGPT en tu farmacia, es recomendable seguir algunos pasos iniciales para integrar estas tecnologías de manera efectiva en tu práctica diaria. 

Primero, regístrate en una herramienta de IA gratuita y familiarízate con la redacción de prompts. En lugar de realizar búsquedas tradicionales en Google, comienza a utilizar la IA para consultar protocolos y acciones específicas, lo que te permitirá centrarte en los aspectos que requieran tu supervisión y experiencia profesional.

Por ejemplo, puedes probar con un prompt como: «Estoy buscando opciones de indicación farmacéutica para una paciente de 22 años con recidivas de cistitis cada 3 meses.» La IA te proporcionará una gran cantidad de información. Sin embargo, es crucial que verifiques y ajustes esta información según tu criterio profesional. Añadiendo un prompt como: «Dame un protocolo de actuación para…», la IA puede generar estructuras básicas que te ayudarán a elaborar protocolos detallados y adaptados a tu especialización.

Es fundamental recordar que la IA no sustituye el juicio del farmacéutico. Las herramientas de IA suelen ofrecer recomendaciones con advertencias, como: «Es importante que todas estas recomendaciones sean evaluadas y discutidas con un médico para ajustar el tratamiento según las características individuales de la paciente y su historial clínico.»

Para casos específicos, como la formulación magistral, puedes usar un prompt como: «Dame un PNT para una fórmula magistral de budesonida viscosa 5 mg/ml 150 ml.» La IA te proporcionará una estructura válida para un Procedimiento Normalizado de Trabajo (PNT). 

En definitiva, probar esta herramienta y observar cómo puede mejorar la eficiencia en tu práctica diaria, recordando siempre que la supervisión y el criterio profesional, son esenciales para dar los primeros pasos. 

El futuro de la IA en la farmacia

El futuro de la Inteligencia Artificial en la farmacia promete una transformación significativa con aplicaciones más avanzadas que revolucionarán el sector. Entre estos avances, la capacidad de la IA para gestionar el inventario de manera autónoma se destaca como una mejora significativa. La IA podrá analizar patrones de consumo y prever la demanda futura, realizando pedidos automáticamente para reponer los medicamentos y productos antes de que se agoten. 

Además, la IA podría predecir brotes de enfermedades basándose en datos epidemiológicos y patrones de consumo, permitiendo a las farmacias anticiparse a emergencias sanitarias. O incluso llegar a la personalización del tratamiento mediante el análisis de datos genéticos y médicos que permitirían una atención más precisa y adaptada a cada paciente.

Sin embargo, estos avances conllevan desafíos importantes relacionados con la ética y la privacidad. La protección de los datos personales de los pacientes es crucial, y, por ende, es necesario implementar regulaciones estrictas para garantizar el uso seguro de la información. Las normas deben asegurar que los datos se manejen con confidencialidad y que la IA se utilice como una herramienta de apoyo, en lugar de sustituir el juicio clínico humano. La responsabilidad última de la atención debe seguir recayendo en los profesionales de la salud, en este caso el farmacéutico.

Para que las farmacias se mantengan a la vanguardia, deben adaptarse a estas nuevas tecnologías. La inversión en herramientas basadas en IA y la formación continua del personal son esenciales para aprovechar al máximo los beneficios de la automatización y la personalización. La IA tiene el potencial de transformar la farmacia comunitaria, haciendo que los servicios sean más eficientes y personalizados, siempre que se aborden adecuadamente las cuestiones de privacidad y ética.

En resumen, al igual que ocurrió con la llegada de Internet, la Inteligencia Artificial puede ser percibida por algunos como un riesgo, pero la experiencia previa demuestra que las herramientas tecnológicas deben ser vistas como aliadas. Por ejemplo, muchos farmacéuticos inicialmente temían que las ventas online de parafarmacia significarán el fin de las farmacias tradicionales; sin embargo, estas ventas han resultado ser una nueva fuente de ingresos para las boticas, integrándose exitosamente en el modelo de negocio.

La IA, al igual que otras innovaciones tecnológicas, tiene el potencial de ofrecer mejoras en la gestión y operación de las farmacias, transformando desafíos en oportunidades, siempre que no olvidemos que esta no debe sustituye el juicio del profesional. 

Recapiti
David Gómez