Factura electrónica y Verifactu, ¿en qué se diferencian? - Altim.es

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Contenidos

  1. Introducción
  2. ¿Qué es la factura electrónica?
  3. ¿Qué es Verifactu?
  4. Similitudes y diferencias
  5. Conclusión

Introducción

La lucha contra el fraude fiscal y la necesidad de digitalización es un objetivo primordial no solo para los gobiernos, sino también para todas las empresas. Para ello, se han aprobado distintos proyectos que impulsan tanto la digitalización como la lucha contra la morosidad para mejorar el clima de negocios de nuestro país. De esta forma, entran en juego la Ley Crea y Crece y La Ley Antifraude. Con la aprobación de ambas normativas, surgen algunas preguntas sobre cómo coexistirán los sistemas de facturación como la factura electrónica y Verifactu, y cuál es el rol de cada uno de ellos. Como expertos en soluciones que cumplen con los requisitos legales gracias a nuestra experiencia en SAP, te aclaramos algunas dudas sobre estos sistemas.

¿Qué es la factura electrónica?

La factura electrónica es un documento fiscal emitido y recibido en formato digital que surge del proyecto de la Ley Crea y crece. Todos los empresarios deben emitir, transmitir y recibir facturas en formato electrónico. Esta nueva normativa supondrá, principalmente, un cambio o adaptación técnica de los sistemas de facturación de las empresas. Se estima que la medida fomentará la digitalización de todas las empresas, en particular de las más pequeñas, con ganancias en ahorro de costes y agilidad en la gestión administrativa al reducir el tiempo dedicado a la gestión de cada factura y facilitar la corrección de errores. Además, este proyecto viene impulsado por el Ministerio de Economía.

¿Qué es Verifactu?

Verifactu es un proyecto que forma parte de la Ley General Tributaria, de Prevención de Fraude, desarrollado por el Ministerio de Hacienda. Consiste en que todos los sistemas electrónicos de emisión de facturas deben cumplir con requisitos de legibilidad, inalterabilidad y trazabilidad en los términos definidos reglamentariamente. Además, deben producir un fichero estructurado y simplificado por cada factura, es decir, que tiene menos contenido que la propia factura. Si el fichero se transmite a la Agencia Tributaria (Verifactu) se entiende que cumple los requisitos exigidos. En otro caso se exigen requisitos de seguridad adicionales. El reglamento fue publicado en diciembre de 2023 y será obligatorio en julio de 2025.

Conclusiones

Las leyes que se están poniendo en marcha referentes a los sistemas de facturación electrónica tienen como objetivo principal controlar y evitar el fraude fiscal e impulsar la digitalización en todo tipo de empresas ayudándolas a simplificar el proceso de registro de las mismas y a minimizar el coste de tiempo y material en el envío. A corto plazo, a las pequeñas empresas les resultará complicada su implantación. Además, el sistema español de facturación electrónica no sustituirá al SII (Suministro Inmediato de Información). Hoy en día, en función de la facturación de las empresas, la obligatoriedad de ambos proyectos sería la siguiente:

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