Electra, como compañía líder en el desarrollo e instalación de puntos de recarga ultrarrápida para vehículos eléctricos en Europa, ha asumido el compromiso de trabajar para acelerar la transición energética y facilitar una movilidad eléctrica y sostenible. Con este propósito, la empresa ha presentado, en el marco del Salón del Automóvil de París, su nuevo concepto de Electralinera a la que ha denominado Electraline, que combina tecnología avanzada y un diseño innovador para convertir la experiencia de carga en una práctica tan sencilla como repostar combustible, pero mucho más agradable.
Con presencia en nueve países y más de 350 Electralineras operativas, la compañía planea expandir su red hasta alcanzar las 2.200 estaciones en 2030. En solo tres años, Electra se ha consolidado como un referente en la carga ultrarrápida de vehículos eléctricos en Europa, gracias a su compromiso con la mejora continua de los servicios, el diseño de las estaciones, la atención al cliente y los métodos de pago.
Un concepto sólido y modular
Este nuevo concepto de Electralineras ofrecen áreas de descanso y zonas de sombra que mejoran la comodidad de los usuarios. Sus curvas crean un ambiente acogedor y dinámico, mientras que los materiales, como la madera, aportan un carácter más ecológico.
Tanto la pantalla LED de la estructura como la del tótem no solo cumplen una función visual, sino que también sirven como herramientas de comunicación, proporcionando información relevante de manera clara y atractiva.
Dos tótems complementan la estación, con zonas de descanso para los usuarios: uno de mayor tamaño asegura que la estación sea más visible desde la distancia, mostrando de manera clara los precios, y el segundo más pequeño, ubicado cerca de la estación, ofrece información sobre los servicios cercanos, las comunicaciones de Electra, promociones de socios y tarifas, entre otros.
¿Cómo funciona la estación?
Las Electraline están diseñadas para guiar al usuario en cada paso del proceso de carga. Desde la reserva del punto de recarga hasta el final de la sesión, la estación se ilumina para indicar las etapas, permitiendo identificarla y reconocerla desde lejos. Las pantallas muestran el estado de las plazas (libres o reservadas), el precio y la potencia. Una vez realizada la reserva, se asigna una plaza y, si el usuario lo desea, su nombre puede aparecer en la pantalla.
Tras conectar el vehículo, la barra de progreso muestra en tiempo real el estado de la carga, visible desde cualquier distancia. Además, las estaciones incluyen altavoces que guían al usuario en cada momento: desde la preparación hasta el inicio y final de la recarga. Para garantizar la seguridad, las nuevas Electralineras están equipadas con cámaras de vigilancia y luces.
La diversión también es parte de la experiencia
Electra ha decidido incluir juegos en su aplicación y en la pantalla LED de la estación, pensados para uno o varios jugadores y con una duración de menos de 20 minutos (el tiempo de una recarga). El primero disponible es el clásico «Piedra, Papel o Tijera», en el que se pueden ganar kW que luego se podrán descontar de la factura.
El nuevo concepto de Electralineras están disponibles en cuatro tamaños para adaptarse a las necesidades de diferentes entornos. En las versiones M y L, la estructura incluye asientos para que los usuarios puedan relajarse al aire libre mientras recargan su vehículo. La versión L, además, cuenta con una marquesina de paneles fotovoltaicos que cubre las plazas de aparcamiento, proporcionando energía adicional a la estación. Por su parte, los modelos S+ y S incorporan un techo para protegerse del sol y la lluvia.
