Si tienes un vehículo eléctrico o estás considerando adquirir uno, es importante entender qué tipo de cable necesitas para cargarlo de manera eficiente y segura. No todos los coches eléctricos vienen equipados con el mismo enchufe, sino que existe una variedad de conectores o puertos de carga con distintas características, compatibles con unos cables y cargadores determinados. En este artículo analizamos los cables de recarga más frecuentes para vehículos eléctricos, cómo elegir el imprescindible en el maletero y algunos consejos de uso.
¿Qué cable de recarga se incluye en los coches eléctricos?
El cable que normalmente viene por defecto con un vehículo eléctrico (VE) suele ser monofásico, apto para recargar en casa y con una potencia muy lenta. Se trata de una carga básica con un enchufe convencional que se alarga entre 15 y 20h. Este cable original puede sacarte de algún aprieto pero solo si no tienes prisa. Por eso, lo más recomendable es invertir en un cable más potente.
Antes de comprar un cable para tu coche debes saber que…
No existe un conector universal para todos los coches eléctricos. En función del país de fabricación, los conectores son diferentes. La ficha técnica del vehículo recoge información sobre el cable que precisa en cada caso. Sin embargo, aunque no es universal, sí existe un conector estándar para la infraestructura de recarga europea.
Con la directiva europea 2014/94/UE se definió que los conectores estándar en toda Europa sean el Tipo 2 en carga alterna (lenta) y el conector CSS en carga continua (semirrápida a ultrarrápida). Este acuerdo ha supuesto que la industria automotriz lo aplique en todos los coches lanzados desde entonces, simplificando así la variedad existente hasta entonces. Por eso, lo más recomendable es optar por un cable de recarga compatible tanto con los puertos de carga del vehículo como con los cargadores presentes en la vía pública.
El cable imprescindible para recargar tu coche eléctrico
Actualmente la tecnología en equipos de recarga avanza muy rápido. Pero hoy por hoy, el cable imprescindible y básico que siempre debe estar en el maletero de un coche eléctrico es un cable trifásico de 22 kW. Así, se puede cargar cualquier vehículo eléctrico o híbrido enchufable a la máxima potencia que aguante el VE.
Cable de tipo 2 a tipo 2
Este cable es el que se conecta de una toma Mennekes a otra también Mennekes. Como decíamos antes, el conector tipo 2 es el estándar en Europa para carga en corriente alterna (CA) y se encuentra en la mayoría de las estaciones de recarga públicas y privadas. Por eso se aconseja llevarlo siempre en el coche.
Es compatible con sistemas monofásicos y trifásicos, y permite una potencia máxima de hasta 43 kW con velocidades de carga semirrápidas. La gran ventaja de este cable es que se puede usar tanto en casa como en puntos de recarga y que se adapta a la mayoría de los usos de los propietarios de vehículos 100% eléctricos o híbridos enchufables.
Estaciones de recarga con conector Combo CCS y su propio cable
Las estaciones de recarga rápida suelen venir equipadas con su propio cable. Para efectuar la recarga del VE solo se necesita enchufar este cable integrado en tu vehículo para que la carga se inicie y siempre que el puerto de carga del coche sea compatible con el conector CSS.
El conector CCS (Combined Charging System o Sistema de Carga Combinada) es una mezcla del conector tipo 2 con dos pines adicionales para carga rápida en corriente continua. La potencia de carga puede llegar hasta los 350 kW en estaciones de carga ultrarrápida y 700 kW en camiones y vehículos pesados. Este conector gusta porque es compatible con carga semirrápida, rápida y ultrarrápida. El cable CCS también es conocido como Combo o, siguiendo la norma, como IEC-62196-3, y es el más usado en electrolineras.