En prensa escrita o digital, en programas radiofónicos o televisivos y ahora, gracias a las redes sociales, podcasts, canales de YouTube y Twich o directos de Instagram, este género periodístico por excelencia puede alcanzar una mayor difusión hacia la audiencia deseada.
La entrevista sirve fundamentalmente para recabar información o contrastar un tema de interés público o simplemente para obtener el perfil de un personaje y su trayectoria. En cualquiera de los casos, va mucho más allá de poner en marcha la grabadora y dejar que nuestro interlocutor llene el silencio. Te damos algunos tips para sacar todo el jugo a tus entrevistas.
La Real Academia Española define la palabra ‘entrevista’ como el hecho de “mantener una conversación con una o varias personas acerca de ciertos extremos para informar al público de sus respuestas” o de “tener una conversación con una o varias personas para un fin determinado”. Ambas definiciones se adecúan al trabajo que, en la actualidad, hacen figuras mediáticas que en nuestro país van de Pablo Motos, David Broncano y Risto Mejide, a Mercedes Milà, Sandra Sabatés o Andreu Buenafuente, en televisión; Àngels Barceló, Júlia Otero, Carlos Herrera, Pepa Bueno o Iñaki Gabilongo, en las ondas, o las ya archiconocidas entrevistas que Ibai Llanos ha hecho este último año en su canal de Twitch a personas como Aitana, Messi, Gerard Piqué, Auronplay, Sergio Ramos o Nicki Nicole, entre otros.
Lo cierto es que, en los últimos tiempos, el género que tan bien defendían periodistas como Truman Capote u Oriana Fallaci ya no solo lo ponen en práctica periodistas titulados, sino un abanico cada vez más amplio de perfiles profesionales que han hallado en la comunicación su modo de vida. Algunas personas citadas anteriormente, de hecho, ni siquiera son periodistas, pero han sabido otorgar un estilo propio que logra atrapar al público.
Comunicación verbal, no verbal y paraverbal
Hacer una entrevista va mucho más allá que conversar con otra persona en torno a un tema de interés para ambos. Se trata de un género que, bien ejecutado, servirá también como fuente de crónicas, artículos, reportajes de investigación, documentales, novelas o blogs corporativos.
Las hay formales o institucionales, pero también informales, en encuentros casuales. Hoy en día pueden hacerse por escrito, por teléfono, por videoconferencia o incluso por WhatsApp, respondiendo a través de los audios que esta popular aplicación pone a nuestra disposición.
Sin embargo, ninguna de estas fórmulas se asemeja a la entrevista presencial, aquella que en las distancias cortas te permite captar mil y un detalles de todo aquello que tu interlocutor dice y no dice.
Hacer una entrevista va mucho más allá de poner en marcha la grabadora y dejar que nuestro interlocutor llene el silencio.
El 80% de la información que captamos de nuestros interlocutores procede de la comunicación no verbal (gestos, postura, mirada…) y de la paraverbal (entonación, vocalización, pausas durante el discurso), de ahí que la entrevista presencial sea de las más enriquecedoras para el periodista o comunicador que la realiza. Esas dos esferas son las que, junto a la comunicación verbal (aquello que se dice explícitamente), dotan de sentido aquello que nuestro interlocutor responde a cada una de nuestras preguntas.
Siempre es posible conectar con el entrevistado. Empatizar, observar y escuchar con todos los sentidos nos ayudará a entenderlo mejor y ganarnos su confianza.
Por eso es muy importante levantar la vista de nuestro cuaderno y prestar atención a los silencios, el ritmo de sus respuestas y los detalles del lenguaje corporal. Solo así podremos interpretar correctamente aquello que nos intenta transmitir con sus palabras y con sus silencios.
Si el objetivo es publicar la entrevista en un medio escrito, tomar nota acerca de lo que rodea a la conversación (gestos, risas, expresiones y muletillas) también nos ayudará a contextualizar mejor la conversación y a trasladar al lector a ese preciso instante, aunque él/ella no se encuentre presente.
Siempre es posible conectar con el entrevistado. Empatizar, observar y escuchar con todos los sentidos nos ayudará a entenderlo mejor y ganarnos su confianza
Documentación y diálogo, tándem ganador
Conectar y documentarse acerca de la persona a la que vamos a entrevistar y del tema en torno al que vamos a debatir es clave para lograr una buena entrevista y que la charla discurra de la mejor manera posible. El entrevistador debe ir muy bien preparado, pero aun así debe saber que, como humanos que somos, el margen de error siempre existe y que, por muy bien que nos hayamos preparado, puede que algún dato o alguna información que manejemos no sea del todo cómoda o veraz. Si el entrevistado nos corrige o nos reprende por ello, cabe mantener la calma, ser muy amable, pedir disculpas y reorientar la entrevista, algo que también cabrá hacer si la persona que tenemos delante se va por las ramas en algún momento 😉
Documentarse acerca de la persona a la que vamos a entrevistar y del tema en torno al que vamos a debatir es clave para lograr una buena entrevista.
Es importante plantearnos qué objetivo deseamos cumplir con la entrevista que vamos a realizar y preparar un guion de preguntas lo suficientemente abierto como para repreguntar o incluir nuevos temas que surjan durante la conversación también será sumamente interesante. Por último, no olvides que, por mucho que te imponga, la persona que tienes frente a ti es tan humana como tú, así que mantén la calma, ten paciencia, mucha empatía y antes de empezar, bebe agua, respira hondo y… ¡disfruta! Lo importante es que el diálogo entre ambos fluya y sea amable y enriquecedor para ambos.
La persona que tienes frente a ti es tan humana como tú, así que mantén la calma, ten paciencia, mucha empatía y disfruta.
El semanario de análisis de periodismo y comunicación del Colegio Oficial de Periodistas de Cataluña y el periodista e historiador, Francisco J. Rodríguez Baena publicaban el pasado mes de abril un interesante decálogo para una buena entrevista. Si estás empezando en este género o tu empresa necesita otorgar un estilo propio para cautivar a tu target, te resumimos las diez pautas recogidas en Report.cat.
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