Fredi y la montaña – Fundación Deporte Solidario

El esquí en silla es otra forma de vivir mis queridas montañas, de disfrutarlas. Desde la elección debía ruta, la bajada, dónde girar, cómo controlar la velocidad, a maravillarse con los paisajes, con el entorno.

Es otra manera de sentir la dureza de las montañas con el frío invernal, o el brillo radiante del sol. Es otra forma de disfrutar de las nubes de nieve polvo que levantas con los giros…

Son un montón de espectaculares sensaciones que puedes experimentar, o volver a experimentar, superando las barreras que la movilidad reducida parece imponer.

Se pueden superar estas barreras que marcan las enfermedades, los accidentes o la edad. Y se puede encontrar uno mismo inmerso en las montañas gozando de días increíbles con la familia, con los amigos, en la mejor compañía. Se puede. Y merece muchísimo la pena.

Fredi