Se trata de un método médico estético que no requiere cirugía y resulta completamente indoloro. Su propósito es eliminar las células grasas al exponerlas a temperaturas bajas mediante un proceso de succión dirigido a la región específica del cuerpo que se desea tratar. La criolipólisis se puede utilizar en cartucheras, abdomen, glúteos, flancos…
Después de la sesión, el tejido tratado experimenta la eliminación de la grasa localizada, la cual es absorbida y eliminada de forma gradual y natural a través del metabolismo del cuerpo. Este enfoque representa una opción simple y altamente efectiva para quienes buscan deshacerse de esa grasa localizada.
En Clínicas Dorsia, llevamos a cabo este procedimiento utilizando la tecnología de Coolsculpting. El Coolsculpting Elite se distingue como el único dispositivo médico de criolipólisis aprobado por la FDA desde 2010. Este equipo para remodelado corporal ofrece una solución no invasiva y definitiva para eliminar la grasa subcutánea localizada en áreas específicas del cuerpo.
Mediante este dispositivo, el equipo médico de Clínicas Dorsia congela la grasa en el adipocito, induciendo la muerte celular. Este proceso irreversible permite la eliminación de las células grasas muertas a través del sistema inmunológico y su posterior excreción por el sistema linfático. Coolsculpting representa una alternativa no invasiva a las cirugías tradicionales de remodelado corporal, ya que puede considerarse como una liposucción sin cirugía. Con una sola sesión, es posible lograr una reducción de hasta el 50% de la grasa en cualquier área del cuerpo de forma permanente.
Además está equipado con 9 aplicadores que permiten tratar múltiples zonas corporales simultáneamente, reduciendo tanto el tiempo del tratamiento como la duración de la sesión. En Clínicas Dorsia, nos comprometemos a brindar a nuestros pacientes un enfoque seguro, efectivo y personalizado para lograr los resultados deseados.
Este método se basa en la aplicación de succión al vacío, que desplaza el tejido adiposo separándolo y aislándolo de la zona hasta su eliminación. Se lleva a cabo mediante un dispositivo con un cabezal diseñado específicamente para la succión de la grasa.
Este enfoque implica el uso de un dispositivo con cabezales en forma de círculo y/o rectángulo que aplican presión plana sobre la zona del cuerpo a temperaturas muy bajas. Esta acción induce lo que se conoce en la medicina como apoptosis celular, es decir, lesiones en el tejido graso como respuesta al frío que facilitan su posterior absorción por el cuerpo.