El colectivo API de Catalunya volvió a reunir a buena parte del sector inmobiliario catalán en la X edición del evento Tribuna Immoscòpia, centrado en las perspectivas del mercado para el 2025, que tuvo lugar en el Auditori l’Illa Diagonal ante centenares de profesionales.
La jornada fue inaugurada por Vicenç Hernández Reche, CEO de Tecnotramit y presidente de la Asociación de Agentes Inmobiliarios de Catalunya (AIC). El experto subrayó la necesidad de reforzar la colaboración público-privada y señaló que “la Administración parece haber entendido que la crisis habitacional es un problema estructural que requiere soluciones profundas”.
“Estamos bastante esperanzados porque la percepción actual es que la Administración se ha dado cuenta de que el problema de la vivienda es poliédrico y no solo un tema que se solvente con medidas rápidas y de poca incidencia estructural”, aseguró el CEO de Tecnotramit.
La jornada también contó con la participación de altos cargos de la Administración Pública en el ámbito de la vivienda a nivel autonómico y estatal. Así, en la apertura intervinieron David Lucas, secretario de Estado de Vivienda y Agenda Urbana; y Josep Rull, presidente del Parlament de Catalunya; y Joan Ramon Riera, comisionado de Vivienda del Ayuntamiento de Barcelona.
Desde el ámbito estatal, David Lucas señaló que “España arrastra un problema estructural en materia de vivienda” y apuntó que el país carece de un pacto público como el de otros países europeos y que la producción de vivienda protegida “sigue siendo insuficiente”. Entre las prioridades del Gobierno central, mencionó acuerdos con comunidades y ayuntamientos “para aumentar la oferta de viviendas, la industrialización de la construcción a través del PERTE y medidas fiscales para viviendas asequibles destinadas a colectivos vulnerables”.
Josep Rull, presidente del Parlament de Catalunya, calificó el acceso a la vivienda como “el principal problema de la ciudadanía” y abogópor grandes acuerdos entre partidos para contener los precios y ampliar el parque de vivienda protegida, “siempre desde el diálogo con el sector inmobiliario”. Asimismo, insistió en la necesidad de “simplificar los procesos administrativos, actualizar la legislación urbanística y planificar mejor el territorio para generar oferta suficiente”.
Por su parte, Joan Ramon Riera destacó que “el Ayuntamiento de Barcelona no es un mero espectador en la cadena de valor de la vivienda”. Durante su intervención, afirmó que el mercado del alquiler en Barcelona está experimentando una bajada de precios y que la ciudad lidera el volumen de alquiler residencial en España. “La intermediación debe aportar seguridad y minimizar los riesgos sociales asociados al derecho a la vivienda”, subrayó.
