¿Conoces los ingredientes para obtener el resultado deseado?
Así como en cualquier receta son empleados ciertos ingredientes para obtener el resultado esperado, en el storytelling ocurre lo mismo. Para lograr un vínculo con la audiencia, es imprescindible incluir algunos elementos esenciales.
Como en toda historia, el mensaje que queremos transmitir es el pilar del storytelling; sin mensaje, no hay historia. Por eso, es fundamental que esté alineado con un objetivo claro. Además, debe responder a las preguntas clave: ¿quién?, ¿qué?, ¿dónde?, ¿cuándo?, ¿por qué? y ¿cómo?, sin dejar de lado los valores, la misión y la visión de la empresa.
Otro componente crucial son los personajes. Estos deben ser memorables, bien estructurados y sobre todo relacionables para el público. ¿Quién no se acuerda de la historia de los cerditos y el lobo?, una historia que se ha perdurado por generaciones, precisamente por su capacidad de cautivar y permanecer en la memoria. Eso es lo que un buen storytelling debe lograr: emocionarnos y dejar una huella duradera.
En el ámbito del marketing, un ejemplo exitoso de storytelling es Airbnb, una de las empresas de alojamiento más reconocidas a nivel mundial. Destaca por campañas exitosas como “Belong Anywhere”, donde se narra la historia de María que viaja a Cuba y se hospeda en la casa de una mujer mayor, mostrando cómo las experiencias personales pueden conectar profundamente con la audiencia.
Además de sus personajes, la trama es otro pilar fundamental. Como cualquier buena historia, debe seguir una estructura clara como la introducción, el desarrollo del conflicto y la resolución. Esta estructura permite ubicar los personajes, dar contexto a los hechos y transmitir una moraleja o enseñanza final.
Al igual en la historia de los tres cerditos, donde cada cerdito construye un refugio empleando diversos materiales para protegerse del lobo. En el caso de Airbnb, por ejemplo, María llega a un lugar desconocido, pero gracias a la hospitalidad y la conexión con su anfitriona, logra sentirse como en casa. Esta narrativa refuerza la idea central de la campaña: pertenecer puede suceder en cualquier parte del mundo.
Por último, no podemos olvidar el conflicto. Toda buena historia lo necesita; sin él, no hay interés. ¿Qué sería de la historia de los cerditos sin el lobo? Probablemente, poco emocionante, ¿verdad? El conflicto es el motor que impulsa la narrativa, pero debe estar cuidadosamente pensado y alineado con los ideales de la empresa. De lo contrario, puede convertirse en un arma de doble filo. En el relato de Airbnb, María se siente fuera de lugar al estar en un país extranjero y es por esto que busca no solo un lugar donde quedarse sino vivir una experiencia diferente.