Trésdesis con nombre propio: así nació Ayúdame3D en el corazón de Kenia
por | 25, Jun, 2025 | Impacto social |
Lo que empezó como un gesto solidario en Kenia hoy es una red global de ayuda tecnológica. Esta es la historia de cómo tres peques de BAMBA dieron nombre a nuestras Trésdesis.
El camino de Ayúdame3D empezó en 2017, cuando nuestro fundador y CEO, Guillermo Gauna‑Vivas, realizó un voluntariado en la Comunidad BAMBA (Valle del Rift, Kenia), llevando con él cinco prótesis impresas en 3D para personas de la zona que las necesitaban. Había dedicado meses a investigar sobre estos dispositivos de ayuda. Imprimió cuatro diseños que encontró en abierto en una web, adaptándolos a las medidas que le habían proporcionado, y desarrollo y adapto los archivos que encontro para crear el primer brazo mecánico impreso en 3D para personas con amputación transhumeral.
La idea inicial era sencilla: entregarlas, realizar su voluntariado y regresar. Pero en el momento de hacer llegar estos dispostivos todo cambió. Vio que estas ayudas tenían un impacto real en la vida de las personas que las recibían, permitiéndoles recuperar movilidad y calidad de vida. En ese momento nace Ayúdame3D con el objetivo de ayudar a toda persona que los necesite.
Nelly, Mery y Vicky, posando con las Trésdesis a las que dan nombre.
Durante su tiempo en la Comunidad BAMBA, Guillermo conoció a tres personas que hicieron que su experiencia fuese todavía más inolvidable. Cada día, dos niñas y un niño, Nelly, Mery y Vicky, se acercaban al espacio donde montaba las Trésdesis. No venían porque necesitasen una, solo estaban allí, curiosas, acompañando y observando cómo aquellas piezas sueltas se convertían en “manos” capaces de devolver autonomía.
Fue allí, en esa conexión honesta y humana, donde todo cobró sentido. Guillermo comprendió que esas prótesis merecían algo más que un número o función técnica, merecían un nombre. Así nacieron las Trésdesis Nelly, Mery y Vicky: tres modelos diferentes, adaptados a tres necesidades específicas… y tres homenajes personales a esos peques que acompañaron e hicieron posible el comienzo de Ayúdame3D.
Desde entonces, cada Trésdesis incorpora algo de esa historia y ese vínculo. Este año volvimos a BAMBA y pudimos reencontrarnos con Mery, que sigue igual de curiosa que aquel primer día. Su sonrisa nos recordó por qué hacemos lo que hacemos. Porque Ayúdame3D no solo está hecho de tecnología. Está hecho de personas, de encuentros, de nombres que nos inspiran a seguir.
A la izquierda, fotografía de Mery sujetando una Trésdesis Mery en 2020, a la derecha, misma imagen tomada en 2025.