Visión general
El régimen iraní ha utilizado el terrorismo contra objetivos israelíes durante muchos años para promover sus intereses, incluyendo la disuasión y la venganza. Sus ataques terroristas globales apuntan deliberadamente a civiles y continuamente apoya a una serie de organizaciones terroristas proxy en Oriente Medio, proporcionándoles armas con las que atacar el frente interno en Israel.
La reciente Guerra Irán-Israel reveló un aspecto adicional del uso del terrorismo por parte de Irán contra Israel, que implicó el lanzamiento directo de misiles superficie-superficie contra centros de población. Irán apuntó deliberadamente al frente interno a pesar de su afirmación de que los misiles supuestamente apuntaban a instalaciones estratégicas y bases militares.
El ejemplo más flagrante del terrorismo iraní con misiles superficie-superficie fue el uso del misil Khorramshahr-4, presentado públicamente en Irán en 2023, definido como un misil balístico estratégico de largo alcance que transporta aproximadamente 80 pequeñas bombas de racimo, que se dispersan indiscriminadamente y causan daños extensos. Durante la guerra, Irán llevó a cabo el primer uso operacional del misil, causando daños generalizados.
Según la evaluación del ITIC, el concepto detrás del desarrollo de misiles superficie-superficie como el Khorramshahr-4 y su lanzamiento hacia el territorio israelí era causar el máximo daño a los civiles y servir como una herramienta de terrorismo para sembrar el miedo y perturbar la vida diaria. Como tal, el Khorramshahr-4 es otra forma de terrorismo iraní dirigido a poblaciones civiles, sentando un precedente internacional peligroso en el uso de misiles superficie-superficie de racimo de largo alcance como una forma de terrorismo de Estado.
El uso del terrorismo por parte de Irán
Durante décadas, el régimen iraní ha utilizado diversas formas de terrorismo anti-Israel como herramienta de disuasión y represalia por acciones atribuidas a Israel, tanto contra el propio Irán como contra sus proxies. La manifestación más obvia del terrorismo iraní es la participación directa de Teherán, a veces en colaboración con Hezbolá, en ataques contra objetivos civiles israelíes o judíos en todo el mundo. Ejemplos notables incluyen los atentados contra la embajada israelí en Argentina (marzo de 1992), el centro comunitario judío en Argentina (julio de 1994), el ataque a un autobús de turistas israelíes en Burgas, Bulgaria (julio de 2012), y la exposición de intentos de ataques contra turistas y empresarios israelíes en Turquía y Chipre en los últimos años (INSS, abril de 2025). [1]
Además, Irán es considerado el principal patrocinador estatal del terrorismo a nivel mundial, habiendo gastado, según informes, alrededor de 700 millones de dólares al año para apoyar a organizaciones terroristas como Hezbolá, Hamás, la Yihad Islámica Palestina (YIP), las milicias chiítas en Irak y los hutíes en Yemen. La Fuerza Quds del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI) es la entidad iraní principalmente responsable de proporcionar apoyo financiero y material a esos grupos (Informes de Países sobre Terrorismo del Departamento de Estado de los Estados Unidos, 2019).
Un aspecto central de la exportación de conocimiento militar de Irán a las organizaciones mencionadas es la transferencia de armas avanzadas como cohetes, misiles y UAVs, lo que permite a sus grupos terroristas proxy representar una amenaza significativa para el frente interno de Israel sin encontrarse directamente con las fuerzas de las FDI. Esto ha sido evidente durante la Guerra de la Franja de Gaza desde octubre de 2023, con el lanzamiento de cohetes, misiles balísticos y UAVs hacia territorio israelí por parte de Hamás y la YIP desde Gaza, Hezbolá desde Líbano, [2] los hutíes desde Yemen, y las milicias proiraníes desde Irak.
Cómo utiliza Irán su arsenal de misiles de superficie-superficie
Irán posee actualmente miles de misiles capaces de amenazar una amplia gama de objetivos en todo Oriente Medio, desde Israel y objetivos militares estadounidenses hasta la infraestructura energética de los estados árabes del Golfo, lo que le otorga a Irán la capacidad de causar graves daños. Teherán explota esa capacidad para disuadir los intentos de desestabilizar el régimen y como herramienta para avanzar en sus objetivos estratégicos regionales. Por ejemplo, Irán lanzó misiles balísticos contra objetivos de ISIS en Siria en respuesta a importantes ataques en Teherán en 2017 (Al Jazeera, 19 de junio de 2017); contra objetivos militares estadounidenses tras el asesinato del comandante de la Fuerza Quds Qassem Soleimani en enero de 2020 (Al Jazeera, 8 de enero de 2020); y contra objetivos en la región kurda sospechosos de servir a Israel en 2024 (Arab News, 17 de enero de 2024).
Durante la Guerra Irán-Israel (13-24 de junio de 2025), se lanzaron 591 misiles balísticos contra Israel, de los cuales el 86% fueron interceptados. Se documentaron más de 50 lugares de impacto de misiles en todo el país, con 29 víctimas mortales y extensos daños materiales (portavoz de las FDI, 27 de junio de 2025; base de datos INSS, 24 de junio de 2025).
Destrucción en los lugares de impacto de misiles iraníes (portavoz de las FDI, 19-20 de junio de 2025)
Misiles de superficie-superficie de racimo como forma de terrorismo de Estado
El 22 de junio de 2025, los medios iraníes informaron del primer lanzamiento de un Khorramshahr-4, un misil de superficie-superficie de racimo, también llamado Kheibar, contra Israel (Mehr News Agency, 22 de junio de 2025). Tres días antes, las FDI habían anunciado que el primer misil de superficie-superficie de racimo iraní había impactado en un lugar en el área metropolitana de Tel Aviv. El análisis mostró que el misil liberó pequeñas bombas a una altitud de unos 7 kilómetros (un poco más de cuatro millas), cada una con un peso de unos 2,5 kg, que se dispersaron en un radio de 8 kilómetros (unos cinco millas) y explotaron al impactar en el suelo (medios israelíes, 19 de junio de 2025).
Una bomba de racimo encontrada en el suelo después del impacto del misil iraní (sitio web del Comando del Frente Nacional, 19 de junio de 2025)
El misil Khorramshahr-4, presentado por primera vez en mayo de 2023, es uno de los misiles más pesados y potentes del arsenal de misiles de superficie-superficie de Irán. Tiene un alcance de alrededor de 2.000 kilómetros (aproximadamente 1.243 millas) y una ojiva que pesa alrededor de 1,5 toneladas. Lleva una carga útil de 80 pequeñas bombas de racimo que se dispersan indiscriminadamente sobre una amplia zona (Mehr News Agency, 29 de mayo de 2023).
Un artículo publicado tras el anuncio del primer lanzamiento del misil hacia territorio israelí se tituló «Tormenta Kheibar: Khorramshahr-4 — La pesadilla de los sionistas en su primer lanzamiento». Afirmaba que el misil era un arma estratégica que desempeñaba un papel clave en la «doctrina de defensa» de Irán, y que su alta velocidad, precisión y resistencia a la interceptación lo convertían en una respuesta ideal a las amenazas regionales, especialmente del «régimen sionista» (Mehr News Agency, 22 de junio de 2025).
El Khorramshahr-4 (Mehr News Agency, 22 de junio de 2025)
La doctrina militar convencional, criticada internacionalmente, considera las municiones de racimo como un medio táctico para interrumpir las maniobras terrestres enemigas en zonas de combate definidas. Sin embargo, la lógica no se aplica al alcance del Khorramshahr-4, que excede con creces el ámbito relevante para interrumpir los movimientos terrestres. Por lo tanto, el lanzamiento de un misil de superficie-superficie de racimo de largo alcance representa una desviación del uso táctico militar clásico y refleja claramente la intención de sus desarrolladores de emplear el arma de una manera consistente con la definición de terrorismo, es decir, daño extenso e indiscriminado al frente civil enemigo, sin distinción entre objetivos militares y civiles.
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[1] Para obtener más información, consulte el informe del ITIC de agosto de 2012, La Fuerza Quds, una unidad de élite de la Guardia Revolucionaria Iraní, encabeza la campaña terrorista global de Irán.
[2] Para obtener más información, consulte el informe del ITIC de julio de 2024, Política de Hezbolá para el uso de la fuerza contra Israel; y el informe de enero de 2025 Armas utilizadas por Hezbolá contra Israel, del 8 de octubre de 2023 al 27 de noviembre de 2024.
Versión original publicada en The Meir Amit Intelligence and Terrorism Information CenterAt the Israeli Intelligence Heritage and Commemoration Center: https://www.terrorism-info.org.il/en/irans-use-of-surface-to-surface-cluster-missiles-as-a-manifestation-of-state-terrorism/
