La Universidad San Jorge (USJ), se ha consolidado como una institución académica de referencia en Aragón, con un modelo educativo que apuesta por la innovación, el acompañamiento personalizado y la conexión directa con el mundo profesional. Con esta institución, hemos podido abrir este curso STEM Talent Girl Zaragoza.
Hoy, conversamos con la artífice de este compromiso, su rectora, Silvia Carrascal, sobre educación STEM y diversidad.
Desde la Universidad San Jorge, ¿qué retos os estáis planteando en relación a la búsqueda de talento STEM?
En el ámbito universitario, uno de los principales retos es alinear la formación académica con las necesidades reales del mercado laboral, especialmente en los sectores STEM, donde la demanda de perfiles cualificados es creciente. Aunque con iniciativas como STEM Talent Girl se está contribuyendo a la promoción de las vocaciones STEM entre las niñas y jóvenes, en algunos sectores empresariales siguen faltando referentes. Por ello, la Universidad San Jorge, en una apuesta firme por una formación innovadora y de vanguardia, está en diálogo continuo con la empresa para diseñar titulaciones acordes a las necesidades de la sociedad actual.
¿Qué perfil profesional es el que más demandáis actualmente y cuáles pensáis que se impondrán en el futuro?
Actualmente, observamos una alta demanda de perfiles en inteligencia artificial, ciencia de datos, bioinformática y todo lo relativo a la transformación digital, sin descartar el importante papel que tiene la formación en ciencias sociales y humanidades en algunas de las carreras que hemos implantado, como Ingeniería Biomédica, Biomedicina, Ingeniería de la Ciberseguridad y el mismo grado en Inteligencia Artificial. En el futuro, creemos que se impondrán los perfiles híbridos: profesionales capaces de combinar el conocimiento técnico con habilidades en liderazgo, ética, sostenibilidad y pensamiento crítico.
Por eso, desde la Universidad San Jorge impulsamos programas formativos interdisciplinares, con enfoque humanístico y que desarrollen las competencias y habilidades blandas de los alumnos que les permitan adaptarse a los retos de una sociedad en constante evolución.
¿Por qué creéis que es importante que haya diversidad de género en las áreas STEM?
Porque favorece la excelencia y la innovación. Las mujeres pueden aportar perspectivas, ideas y formas de resolver problemas que enriquecen los equipos de trabajo y mejoran los resultados. Los equipos, cuanto más diversos, mejor, y no sólo en cuestión de género, también en cuestiones como la edad, la formación y el contexto cultural y social, entre otros. En este sentido cabe afirmar que la combinación de perspectivas aporta nuevas formas de pensar, rompe con ideas preconcebidas y permite descubrir soluciones innovadoras.
¿Por qué consideráis que hay que apoyar a programas de fomento de vocaciones femeninas como lo es STEM Talent Girl?
Porque STEM Talent Girl no solo identifica vocaciones tempranas, sino que inspira, conecta y guía a las jóvenes a través del acompañamiento de mentoras referentes. Es un programa transformador que genera impacto real, y que se alinea perfectamente con nuestra misión como universidad: formar personas comprometidas, críticas y preparadas para liderar el cambio. Apoyar esta iniciativa es apostar por el futuro del conocimiento, la equidad y la innovación.
¿Tenéis iniciativas propias de fomento del talento femenino dentro de vuestra universidad, además del apoyo a STEM Talent Girl?
Por supuesto. Un ejemplo es el Ada Lovelace Day, un evento que la Escuela de Arquitectura y Tecnología celebra todos los años para recordar y poner en valor el papel de la mujer en el sector tecnológico, con el objetivo de darles mayor visibilidad. La Universidad San Jorge promueve la diversidad de talento en todas las áreas de conocimiento y también garantizamos, a través de la mentoría y el desarrollo de actividades formativas y extracurriculares, la incorporación de mujeres en las titulaciones del área de Ciencia y Tecnología.
