El grupo Damm siempre sorprende en sus anuncios veraniegos. Es el segundo grupo cervecero más grande del país y tiene una identidad de marca muy clara y esto se ve reflejado en sus anuncios. En este artículo, hacemos un análisis de su campaña de verano y buscaremos el porqué de su éxito publicitario.
Damm hace un muy buen trabajo a la hora de comunicar su marca, y tiene muy bien definido su target objetivo. Consiguen que los jóvenes se sientan identificados con el anuncio a través de una historia, en la que se introducen y se cuelan los colores corporativos.
Se apoya en el estilo de vida mediterráneo: el buen tiempo , las fiestas y siempre buscando situaciones que los jóvenes suelen o quieren vivir, con una Estrella Damm como protagonista secundaria. Y esto también se refleja en el anuncio de este año.
En esta edición, juega con la ambigüedad del su eslogan: «Lo mismo de siempre», sin que haya una conclusión clara sobre si hacer «Lo mismo de siempre» es algo bueno o malo. Se inicia con una pregunta, en la hoguera de San Juan, sobre cuál es el plan del verano, y el plan, por supuesto, es «El mismo de siempre».
El anuncio se va desarrollando con esos tópicos populares de un verano soñado, especialmente para el público al que se dirige, que son esos jóvenes que han crecido veraneando en un pueblo, en este caso, costero, con las costumbres y familiaridad típicas de un verano típico español: las fiestas o verbenas, las partidas de cartas, el tiempo perdido y el descanso… E incluye actores referentes, precisamente, para esta generación.
El final se resuelve con un brindis, con Estrella Damm, por supuesto, que responde a esa pregunta inicial con la que comieza el anuncio y la incognita que se plantea: que quiza lo mismo está bien y por eso no es necesario cambiar.
Eso hace que el consumidor se quede con la carga emocional de la historia y asocie ese sentimiento hacia beber una Estrella Damm.
"Mediterráneamente" y el storytelling
El anuncio de este año de Damm evoca uno que lanzaron en el año 2015, de «Vale», que fue un punto de inflexión en la historia de la marca. En el año 2009, Damm creó «Mediterráneamente«, una saga publicitaria que celebraba el estilo de vida y la cultura mediterránea y que sirvió como posicionamiento de la marca.
En 2015, siguiendo esta estela, fue más allá, apostando por el «storytelling«: contar una historia que trasmita los valores de la marca, y que incida en el sentimiento del consumidor. En ese caso fue un pequeño cortometraje, de 12 minutos, dirigido por Alejandro Amenabar, que contaba la historia de Rachel y Víctor, dos jóvenes que se conocen en Ibiza, pero que no hablan el mismo idioma.
«Lo mismo de siempre», on una duración mucho más breve, sigue también esa línea: refleja sin perder su esencia, cuenta una historia, la misma de siempre: la historia de todos esos veranos en la playa, con los amigos, de esos jóvenes que todavía se muestran un poco reacios a hacerse mayores y perder esas costumbres.
