Los X Premios Alimenta Navarra arrancan con un homenaje a los ganadores de sus anteriores ediciones
Los X Premios Alimenta Navarra arrancan con un homenaje a los ganadores de sus anteriores ediciones
La cadena agroalimentaria foral se reunió este viernes en El Molino de Urdániz, convocada por Navarra Capital y NAGRIFOOD, para analizar los principales desafíos a los que se enfrenta. De ese enriquecedor intercambio de ideas afloró la necesidad de defender de manera conjunta los intereses del sector, reforzar su influencia en los foros de decisión y proyectar hacia la sociedad su importancia estratégica. Dicho debate, aderezado con el excelente hacer de David Yárnoz, sirvió de preámbulo para los X Premios Alimenta Navarra, cuyo plazo de presentación de candidaturas permanecerá abierto desde este martes hasta el 19 de octubre.
En realidad, la cadena de valor agroalimentaria de Navarra, con una facturación anual de 4.500 millones de euros, constituye un ecosistema agroalimentario capaz de cubrir todas las etapas: desde la producción en origen hasta la transformación industrial. No en vano, es el segundo gran motor de desarrollo, responsable del 5 % del PIB regional y del 14 % del PIB industrial. Esta industria, por otro lado, no deja de crecer, diversificarse e innovar.
«A lo largo de esta década, hemos premiado a muchos, pero también hemos descubierto que queda aún mucho por reconocer», señaló Mikel Benet, CEO de Navarra Capital. De ahí que el objetivo de esta edición tan simbólica sea «rendir homenaje no solo a los galardonados, sino también a quienes forman parte de una industria construida con esfuerzo, compromiso y visión». Siguiendo ese mismo argumento, la presidenta de NAGRIFOOD, Berta Anaut, aseguró que los Premios Alimenta Navarra «son una experiencia muy positiva porque nacieron con el espíritu de que todos los miembros de la cadena de valor agroalimentaria de Navarra pueden sentirse muy orgullosos».
Como punto de arranque de los X Premios Alimenta, sus organizadores convocaron este viernes en El Molino de Urdániz, el único establecimiento navarro con dos estrellas Michelin, a una amplia representación de los ganadores de las nueve ediciones promovidas hasta la fecha.
El encuentro permitió a los asistentes mantener un diálogo abierto en torno a las principales tendencias y retos a los que se enfrenta un tejido productivo del que son protagonistas destacados.
CONCLUSIONES COMUNES
En concreto, de ese intercambio de ideas emergió con fuerza un mensaje central y compartido por todos: la necesidad de unidad. Los participantes coincidieron en que el sector agroalimentario navarro debe defender de manera conjunta sus intereses y, al mismo tiempo, creerse el papel estratégico que desempeña en la economía y en la sociedad. Esa convicción pasa por estar presente en los foros y espacios de decisión donde se marcan las reglas, reforzando la influencia de una industria que necesita dotarse de un mayor glamour, entendido como la capacidad de dejar de hablar solo para sí misma y abrirse a la ciudadanía y a su entorno. Todo ello en un contexto de creciente concentración de proveedores y clientes, que obliga a las empresas a ganar tamaño y presencia, convirtiendo la colaboración en una necesidad imperiosa para mantener la competitividad.
La internacionalización fue otro de los ejes destacados. Si bien Estados Unidos plantea dificultades adicionales con su política arancelaria, otros mercados están aportando importantes contrapesos. Así, el Este de Europa y Sudamérica se consolidan como destinos de gran potencial, al tiempo que el Sudeste Asiático empieza a dar resultados positivos a algunas compañías.
La conversación también sirvió para constatar cómo muchas empresas navarras están entrando en una nueva fase de desarrollo: la industrialización de sus propios proyectos. El paso de la investigación y el diseño de productos a su fabricación a escala comercial está marcando una evolución decisiva para ganar eficiencia y diversificación, generando nuevas oportunidades en áreas como la alimentación infantil, la cuarta gama o el aprovechamiento de ingredientes locales con alto valor añadido.
El relevo generacional, por su parte, apareció como un asunto ineludible. Y a la necesidad de incorporar nuevas ideas y visiones que aporten frescura y conexión con los futuros consumidores se suma otro reto acuciante: la falta de mano de obra en el sector primario. Cultivos emblemáticos como el espárrago o la alcachofa están encontrando serias dificultades por la ausencia de trabajadores, lo que amenaza la continuidad de producciones históricas.
En paralelo, surgieron voces que defendieron la apuesta por el mercado de proximidad, recordando que también ahí se encuentra un nicho de valor para las empresas más pequeñas y ligadas al ámbito rural. Y, en esa línea, la sostenibilidad se reivindicó como un eje transversal: desde el impulso del producto local y el aprovechamiento de los recursos hasta proyectos más avanzados como el desarrollo de biogás o la reutilización del agua para lograr centros de producción más eficientes y optimizados.
Todas estas ideas fueron expresadas por una importante representación de los galardonados en las nueve ediciones anteriores. De la categoría de Trayectoria y Desarrollo Empresarial, acudieron José Pedro Salcedo Herce (Conservas El Navarrico), Alfredo Arbeloa (Grupo AN), José Luis Medrano (Conservas Medrano), Juan Miguel Floristán (Florette) y Mari Carmen Arbizu (Embutidos Arbizu). Por otro lado, la categoría de Innovación estuvo representada por Daniel Palacio (Tutti Food Group), Patxi Larumbe (Cocuus) y Eduardo Gainza (Biosasun). A todos ellos hay que sumar la presencia de Samuel Jiménez (Embutidos Goikoa), Ruth Martínez (Natur All) e Irene Checa (Quesos Albéniz), quienes participaron por haber ganado en Internacionalización. Y también intervinieron varios de los galardonados en Sostenibilidad como Javier Campo (Conservas Pedro Luis), Juanma Garro (Lacturale) Alberto Loizate (Harivenasa), Joxi Jauregui (Maskarada) y Javier López (Uraphex). Un elenco que se completó con las aportaciones realizadas por la galardonada con el premio al Relevo Generacional en el Campo Silvia Lázaro (Granja El Moro).
LOGRAR UNA GASTRONOMÍA MÁS INNOVADORA
Previamente, el chef y propietario de El Molino de Urdániz, David Yárnoz, compartió algunas de las claves para contar con una gastronomía local mucho más vanguardista. Un reto que pasa por ahondar en cuatro temas clave: la calidad, la tradición, la innovación y la sostenibilidad. «La apuesta por la calidad es permanente porque genera confianza y reputación. Es verdad que exige un mayor desembolso, pero siempre retorna y, además, supone una gran motivación para el equipo, que siente que trabaja en algo importante y quiere seguir formando parte del proyecto», defendió. A ese compromiso se suma la atención al cliente, donde «adelantarse a cualquier necesidad y dedicar tiempo a cada persona es fundamental».
El segundo pilar, la tradición, lo definió como «el origen» de todo su conocimiento gastronómico. Para Yárnoz, representa un valor intangible «que aporta identidad, credibilidad y un vínculo emocional con el territorio», a la vez que permite revalorizar el producto local. «La tradición es, en realidad, un puente hacia la innovación», remarcó. Precisamente, sobre esta última señaló que permite detectar y adaptarse a nuevas tendencias, alcanzar mayores niveles de eficiencia y reinventarse para proyectarnos hacia el futuro: «La tradición te da raíces y la innovación alas».
El cuarto elemento fue la sostenibilidad, entendida como «un compromiso ineludible con el entorno, las personas y el futuro». «Respetar el medio ambiente y el producto local, aprovechar mejor los recursos y cuidar la salud no son solo gestos, son la manera de proyectarnos hacia el mañana», concluyó.
UNA INDUSTRIA INFINITA
Tras esta primera actividad, los X Premios Alimenta Navarra se iniciarán oficialmente con el plazo de presentación de candidaturas, que se extenderá desde este martes hasta el 19 de octubre. Como en años anteriores, las empresas agroalimentarias interesadas pueden postularse a tres de las cuatro categorías oficiales: Sostenibilidad, Innovación e Internacionalización. Así, el jurado elegirá a las empresas ganadoras entre todas aquellas que cumplan las bases.
Por otro lado, serán las entidades organizadoras de los premios las que propondrán las candidaturas para el reconocimiento a la Trayectoria Profesional y Desarrollo Personal, cuyo ganador o ganadora también será escogido por los profesionales que integran el jurado. Toda la información al respecto está disponible en la web oficial de los galardones.
El jurado de esta edición estará presidido por Íñigo Arruti, director general de Fomento Empresarial en el Gobierno de Navarra. Y también forman parte de él el director general del Centro Nacional de Tecnología y Seguridad Alimentaria (CNTA), Héctor Barbarin; Idoya Labayen, directora del Instituto de Innovación y Sostenibilidad en la Cadena Agroalimentaria (ISFOOD) de la Universidad Pública de Navarra (UPNA); la responsable de Gestión y Desarrollo Comercial de GOe (Gastronomy Open Ecosystem) del Basque Culinary Center, Raquel Martín; Iciar Astiasarán, directora del Centro de Investigación de Nutrición (CIN) de la Universidad de Navarra; la presidenta de la Fundación Banco de Alimentos de Navarra, Marisol Villar; y el propio David Yárnoz.
DOS RECONOCIMIENTOS MÁS
El cuadro de honor de los X Premios Alimenta Navarra, en los que también colaboran el Gobierno de Navarra, el Ayuntamiento de Tudela, la Asociación Empresa Ribera (AER), UCAN y el Basque Culinary Center, incluirá dos categorías extraoficiales (fuera de concurso) con las que Navarra Capital y NAGRIFOOD quieren poner en valor a todos los eslabones de la cadena de valor (el campo, la industria y la gastronomía).
Así, el premio Relevo Generacional en el Campo, en el que colabora UCAN, tiene como propósito dar visibilidad y apoyar a quienes han tomado el testigo en la agricultura y la ganadería de Navarra. El ganador o ganadora será elegido por los lectores y lectoras de este medio, de una lista compuesta por varios profesionales. Los últimos galardonados fueron Iker Berrade, de la Cooperativa de Valdorba; el agricultor sangüesino Miguel Pérez de Larraya (2023); Mikel Hernandorena, del Grupo SAT Lacturale (2022); y Silvia Lázaro, propietaria de la Granja El Moro (Figarol) (2021).
Finalmente, el galardón Embajadores Emergentes del Producto Navarro reconocerá a un chef de hasta 40 años que destaque especialmente por su manejo sobresaliente de la materia prima cultivada en la Comunidad foral. De nuevo, la elección correrá a cargo de los lectores y lectoras de Navarra Capital, que a través de una votación online podrán escoger a uno de los candidatos o candidatas seleccionados en colaboración con el Basque Culinary Center (BCC). Anaïs Campo, de Halconeras de Sancho IV, de Funes, fue la última ganadora de un premio que también han recibido Joanna Artieda (2023) y Joxe Apezteguia, del Hostal Restaurante Santamaría (2022).
Fuente: NAVARRA CAPITAL X Premios Alimenta Navarra: un homenaje a una industria infinita
