Revelamos el impacto de vertidos en el río Guadarrama
Revelamos el impacto de vertidos en el río Guadarrama
El informe “Caracterización y Diagnóstico del estado ambiental del río Guadarrama” pone de manifiesto el estado de conservación de este importante cauce fluvial de la cuenca del Tajo.
El documento, que se enmarca en el proyecto SOSLab que desarrolla SEO/BirdLife con el apoyo de la Fundación Montemadrid y Caixabank, combina datos del Plan Hidrológico del Tajo con revisión bibliográfica y trabajo de campo. Revela las principales amenazas que comprometen su conservación como son la retención de agua en los embalses y la masiva contaminación por vertidos urbanos.
El informe subraya la enorme presión hidrológica que sufre el río y destaca que en los embalses de La Jarosa y Valmayor (Madrid), que en conjunto tienen una capacidad de 131 hm³, se retiene más del 87% de las aportaciones anuales del río. Este hecho produce un impacto muy significativo sobre el régimen natural de caudales, lo que significa que las fluctuaciones del río dependen en gran medida de la gestión de estos recursos por parte del Canal de Isabel II.
Con respecto a la deficiente calidad del agua en sus tramos más bajos, Citando estudios anteriores, como el de Larraz, B., et al., de 2023, el documento constata que entre el 70% y el 98% de las aportaciones anuales del río Guadarrama son aguas residuales. Esto implica que, en el mejor de los escenarios, solo el 30% del caudal transportado por el río es agua de origen natural, mientras que el resto son vertidos, tratados o no. Estas potenciales fuentes de contaminación, de origen eminentemente urbano, tienen un impacto muy significativo en el ecosistema fluvial y en sus valores naturales.
Por otro lado, el trabajo de campo realizado por SEO/BirdLife ha identificado otras presiones en tramos específicos. Por ejemplo, en la sección entre el río Aulencia y Bargas, se han detectado presiones significativas derivadas de la agricultura intensiva, plantas no EID (Estaciones de Depuración de Aguas Residuales) y zonas de eliminación de residuos. Además, en estos tramos se han registrado incumplimientos en los niveles de fosfatos, nitratos y otros contaminantes como la presencia de sustancias prioritarias como la cipermetrina y el mercurio.
Tramo del río Guadarrama incluido en el estudio de SOSLab.
La contaminación fluvial, un problema nacional
Si se extrapolan estos datos al resto de los ecosistemas fluviales ibéricos, el estado del río Guadarrama es un reflejo de los desafíos que enfrentan. No podemos seguir ignorando que la salud de nuestros ríos está directamente vinculada a la gestión de los recursos hídricos y a la calidad de los vertidos.
Los resultados de este informe apuntan en la misma dirección que los obtenidos del análisis de 140 masas de agua en Áreas Importantes para las Aves y la Biodiversidad (IBAs) en todo nuestro territorio nacional.
El 97,1% de las IBA analizadas presentaban algún tipo de contaminación en sus aguas. El 22% de las IBA analizadas reportaron niveles de contaminación de más de 5.000 ng/L.
Estas concentraciones no son compatibles con un correcto desarrollo saludable del ecosistema y suponen un riesgo significativo para las especies que allí habitan.
Esto evidencia cómo la presión de los núcleos poblacionales agrava el delicado estado de conservación de nuestros ríos, añadiendo una extensa lista de contaminantes emergentes (Cafeína, Valsatran, Carbamacepina y analgésicos) a los contaminantes clásicamente monitoreados, principalmente de origen agrario, ganadero e industrial.
Conclusión del estudio
SEO/BirdLife hace un llamamiento a las autoridades competentes, para que actúen con urgencia y garanticen el buen estado ecológico del río, se apliquen las medidas y acciones necesarias de restauración ecológica y se cumpla con la Directiva Marco del Agua y el Reglamento de Restauración de la Naturaleza que fija obligaciones en tratamientos para descontaminar muchos de los contaminantes que hoy se vierten.
Este informe, de carácter técnico, tiene también un claro objetivo divulgativo y social. Así se publica también, un documento riguroso y a la vez accesible para un público no especializado, de forma que se puedan entender los problemas que afectan al río Guadarrama y las posibles soluciones. El fin último es promover su conservación a través del conocimiento y la implicación social.
Así, promueve la participación ciudadana a través de la sensibilización ambiental en sentido amplio como agente de cambio de gran relevancia. En particular la educación ambiental y el voluntariado ya que actúan como vías para vincular a la población con este entorno de alto valor ecológico. Se abre la puerta a la ciudadanía al conocimiento del estado de conservación y de los servicios ecosistémicos del río Guadarrama a través de su implicación directa en la protección de este valioso patrimonio natural.
Más información:
https://seo.org/wp-content/uploads/2025/09/INFORME-SOSLAB-GUADARRAMA_FINAL.pdf
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