El sector digital creció un 5,6% en 2024, llegando a facturar más de 138 mil millones de euros
El nuevo Barómetro de la Economía Digital de AMETIC revela un crecimiento sólido del sector, impulsado por el auge del comercio electrónico y el récord de empleo, pese al retroceso de la inversión pública en tecnología.
El Barómetro de la Economía Digital 2025 de AMETIC, presentado recientemente, ofrece un panorama alentador para las empresas del entorno digital. El estudio constata que el volumen de facturación del Sector Tecnológico Digital alcanzó los 138.205 millones de euros en 2024, lo que supone un aumento interanual del 5,6% respecto al ejercicio anterior y el cuarto ejercicio consecutivo de crecimiento, situando al sector por encima de la tasa media de crecimiento de la economía española.
En cuanto al empleo, el sector digital alcanzó las 722.990 personas ocupadas, lo que representa un crecimiento de casi 8 puntos frente a 2023. Este dato refuerza la tendencia de expansión que se ha producido en los últimos cinco años, con un crecimiento total del 39,62% desde 2019, cuando había 517.828 personas ocupadas.
El Barómetro resalta también la contribución del sector al conjunto de la economía. El impacto directo e inducido de la actividad digital representó el 26% del PIB en 2024. Cada euro invertido en el sector generó un retorno estimado de 2,99 € para la economía en su conjunto (un 8% más que el cálculo del año anterior).
Segmentos, comercio electrónico y desempeño internacional
El área de Tecnologías de la Información (TI) fue la más dinámica del sector digital en 2024, con un crecimiento del 7,9% y una facturación récord de 72.738 millones de euros, lo que representa más de la mitad del total del sector (52,6%). Este avance se apoyó principalmente en el buen comportamiento de los servicios TI y el software. En segundo lugar se sitúan las Comunicaciones, que alcanzaron 30.046 millones de euros (+1,7%) y suponen el 21,7% del conjunto.
El segmento de Telecom y Electrónica recuperó impulso tras varios ejercicios de estancamiento, con un aumento del 5% hasta 15.856 millones de euros, impulsado por la demanda profesional y por nuevos proyectos estratégicos europeos en electrónica. Finalmente, los Contenidos Digitales consolidaron su crecimiento con un 4,1% más de facturación, hasta 19.565 millones, destacando la expansión de la publicidad online (+12,4%) y de los sectores de cine, televisión y vídeo (+8%), todo ello pese a la caída de la radiodifusión (–7,7%).
Un dato que destaca es el del Comercio Electrónico, que volvió a moverse en niveles de doble dígito: 95.207 millones de euros facturados en 2024, lo que implica un crecimiento del 13,1%. Este canal sigue siendo motor estructural del sector digital, gracias a la expansión del consumo online, la mejora de la logística y la incorporación de nuevos productos y servicios.
Por otra parte, en el ámbito internacional, el sector digital continúa mostrando avances, aunque con desafíos estructurales. Las exportaciones TIC crecieron un 3,6% hasta los 23.646 millones, mientras que las importaciones crecieron algo menos (+0,2%), dejando un saldo comercial negativo de 9.411 millones de euros. A pesar del déficit comercial TIC, éste se redujo un 7,5% respecto al año anterior.
Parón en la inversión pública en tecnología
Si bien el sector privado exhibe dinamismo, uno de los puntos que preocupan es el fuerte retroceso de la inversión en tecnologías de las administraciones públicas. En 2024, la inversión pública ascendió a 4.968 millones de euros, lo que supone una caída del 38,4% interanual respecto a 2023. Expone el barómetro que una caída tan pronunciada, aunque esté influenciada por las circunstancias excepcionales del año anterior, podría limitar el avance en la digitalización de servicios, infraestructuras y procesos de gestión.
Los descensos se dieron en todos los niveles administrativos: la Administración del Estado redujo su inversión en TIC en un 32,9%, las comunidades autónomas en un 44,4% y los ayuntamientos en 36,6%. Entre los subsectores más afectados, el hardware (-28,7%), el software (-22,0%) y los servicios TI (-45,6%) soportaron los descensos más severos. Las inversiones en comunicaciones dentro del ámbito público también bajaron un 42,9%.
AMETIC advierte que estas caídas podrían estar influidas por retrasos en la ejecución de proyectos con fondos europeos y la complejidad organizativa de las licitaciones públicas. Sin embargo, para las empresas del sector, este fenómeno puede traducirse en menos oportunidades de contratos directos con la administración, una ralentización de proyectos públicos de digitalización y una menor demanda de innovación tecnológica desde el ámbito público.
