Los ensayos clínicos tipo umbrella, basket y de plataforma surgieron como respuesta a la necesidad de adaptar la investigación clínica a los avances en medicina de precisión, la complejidad biológica de muchas enfermedades y la presión por acelerar el desarrollo de nuevos tratamientos.
Su aparición se sitúa principalmente en la última década, aunque sus fundamentos comenzaron a gestarse a partir de los años 2000 con el auge de la genómica y la caracterización molecular de tumores. Estos avances permitieron identificar biomarcadores que segmentan a los pacientes más allá del órgano afectado, lo que evidenció que los diseños tradicionales —centrados en una única enfermedad y un único tratamiento— eran insuficientes para abordar la heterogeneidad biológica observada, especialmente en oncología.
Al mismo tiempo, la industria farmacéutica y las agencias regulatorias comenzaron a demandar modelos más eficientes que permitieran evaluar múltiples hipótesis terapéuticas dentro de una misma infraestructura. Así nacieron los llamados master protocols, que agrupan bajo un mismo diseño metodológico a los ensayos umbrella, basket y de plataforma. Estos diseños permiten compartir grupo control, procedimientos y análisis estadísticos, lo que reduce significativamente los tiempos, los costes y la exposición de pacientes a tratamientos ineficaces.
El impulso definitivo vino de la mano de iniciativas regulatorias, especialmente por parte de la FDA, que desde 2010 comenzó a promover activamente estos enfoques como parte de su estrategia para acelerar el desarrollo de fármacos en áreas con necesidades médicas no cubiertas. Paralelamente, la evolución de las herramientas digitales, el análisis estadístico avanzado y la inteligencia artificial facilitaron la implementación de diseños complejos y adaptativos, como los que permiten los ensayos de plataforma.
En cuanto a su cronología, los primeros ensayos tipo basket y umbrella comenzaron a implementarse entre 2006 y 2010, con ejemplos pioneros como el estudio Lung-MAP en cáncer de pulmón y el NCI-MATCH del National Cancer Institute. A partir de 2012, se consolidó el concepto de master protocol con estudios como I-SPY 2 en cáncer de mama y, más adelante, con ensayos de plataforma como RECOVERY durante la pandemia de COVID-19. Desde 2020, estos diseños se han expandido a otras áreas terapéuticas como neurología, enfermedades infecciosas y enfermedades raras, y han sido adoptados de forma más amplia tanto por la industria como por las agencias regulatorias.
Ensayos clínicos tipo Umbrella
Los ensayos umbrella evalúan diferentes tratamientos dirigidos en una única enfermedad, pero en subgrupos de pacientes definidos por biomarcadores específicos. Es decir, se parte de una misma patología (por ejemplo, cáncer de pulmón no microcítico), pero se subdivide a los pacientes según alteraciones moleculares distintas, asignando a cada grupo un tratamiento específico.
Este diseño es ideal para enfermedades heterogéneas desde el punto de vista molecular, como muchos tipos de cáncer. Permite adaptar el tratamiento a las características genéticas del tumor, alineándose con los principios de la medicina personalizada.
Ventajas de los ensayos Umbrella
- Optimiza la selección de terapias dirigidas.
- Reduce el número de pacientes expuestos a tratamientos ineficaces.
- Aumenta la eficiencia del reclutamiento en subgrupos moleculares raros.
Ensayos clínicos tipo Basket
Los ensayos basket evalúan un único tratamiento en múltiples enfermedades que comparten una alteración molecular común. En lugar de agrupar a los pacientes por tipo de tumor, se agrupan por biomarcador, independientemente del órgano de origen. Resultan útiles cuando una diana terapéutica específica (por ejemplo, mutación BRAF V600E) está presente en varios tipos de cáncer. Permite evaluar la eficacia de un fármaco en múltiples indicaciones simultáneamente.
Ventajas de los ensayos Basket
- Acelera la validación de terapias dirigidas en indicaciones huérfanas.
- Reduce la necesidad de múltiples ensayos independientes.
- Favorece la aprobación regulatoria acelerada en enfermedades raras.
Ensayos clínicos de Plataforma
Los ensayos de plataforma son estructuras adaptativas y continuas que permiten evaluar múltiples tratamientos y compararlos con un grupo control común, con la posibilidad de añadir o eliminar brazos del estudio a lo largo del tiempo según los resultados intermedios. Se trata de un diseño especialmente útil en contextos dinámicos como pandemias (ej. COVID-19) o en áreas terapéuticas con múltiples dianas en evaluación. Contamos con ejemplos notables como los estudios RECOVERY y I-SPY 2.
Ventajas de los ensayos de Plataforma
- Flexibilidad para incorporar nuevos tratamientos sin iniciar un nuevo ensayo.
- Uso eficiente de recursos mediante un grupo control compartido.
- Reducción de tiempos y costes en el desarrollo clínico.