Columbares ha analizado el impacto del discurso de odio y la desinformación en la salud mental juvenil a través de proyecto Rompiendo el Silencio. Las investigadoras del proyecto, María Pina y Marina Dólera han participado en el curso “(Dis)Connected Realities”, celebrado el 15 de octubre. En esta formación se dieron cita técnicos de entidades sociales de España y Portugal. Así, analizaron el impacto de las redes sociales en la salud mental de las personas jóvenes.
La actividad forma parte del proyecto Erasmus+ (Dis)Connected Realities, impulsado por la Asociación Miras. Este programa busca promover el intercambio de conocimientos, estrategias y herramientas para un uso más saludable y responsable de los entornos digitales.
Columbares participó con la ponencia “El impacto del discurso de odio y la desinformación”. Durante la exposición, se analizó cómo el discurso de odio y la desinformación afectan al bienestar emocional de la juventud, a la cohesión social y a la convivencia. Asimismo, se dio a conocer nuestra entidad a a las personas participantes. Igualmente, se abordaron las definiciones de discurso de odio y desinformación, junto con los mecanismos que favorecen su difusión.
El equipo de Columbares explicó los efectos psicológicos y comunitarios de estos fenómenos y las consecuencias sociales derivadas de su normalización. La sesión incluyó además un espacio de reflexión colectiva, en el que los participantes compartieron experiencias, estrategias y buenas prácticas desarrolladas en sus entidades para prevenir el odio y la desinformación.
Con esta colaboración, Columbares ha tenido la oportunidad de mostrar su compromiso con la prevención de la discriminación, los delitos y el discurso de odio. Desde proyectos como Rompiendo el silencio la entidad promueve la salud mental y el bienestar juvenil desde la educación, la comunicación y la sensibilización social.
El proyecto Rompiendo el Silencio: Programa de estudio, información y sensibilización para luchar contra la infradenuncia de la discriminación y los delitos de odio está financiado por el Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030.
