La formación sobre el abordaje de las prácticas tradicionales perjudiciales para la salud de las mujeres finalizó el 24 de octubre en Alicante. Columbares organizó este curso con el objetivo de fortalecer las competencias de profesionales y futuras personas profesionales en la detección, prevención e intervención ante prácticas que vulneran los derechos humanos y dañan la salud de mujeres y niñas.
El curso contó con 36 participantes de diferentes perfiles técnicos, sociales, sanitarios y educativos. Todas las personas asistentes compartieron un interés común: mejorar sus herramientas de intervención y acompañamiento en contextos donde estas prácticas continúan presentes. Las sesiones combinaron contenido teórico y práctico, con dinámicas participativas y análisis de casos reales.
En este contexto, el alumnado trabajó conceptos clave como mutilación genital femenina, matrimonios forzados, barreras culturales en el acceso a la salud y otras prácticas que limitan la autonomía y el bienestar de las mujeres. Asimismo, se abordaron las consecuencias físicas, psicológicas y sociales, así como el impacto en las familias y las comunidades.
El equipo formador destacó la importancia de realizar intervenciones culturalmente sensibles. Las y los participantes reflexionaron sobre la necesidad de escuchar, acompañar sin prejuicios y generar vínculos de confianza. Igualmente, se revisaron protocolos nacionales e internacionales y se compartieron recursos útiles para actuar desde servicios sociales, educación, sanidad y entidades sociales.
Uno de los aspectos más valorados fue el enfoque multidisciplinar. El intercambio de experiencias permitió ampliar la mirada y comprender la importancia de la coordinación entre instituciones y organizaciones. Además, se subrayó la relevancia de sensibilizar a la sociedad y promover entornos protectores que garanticen los derechos de las mujeres.
Esta formación se desarrolló gracias a la colaboración entre Columbares y la Universidad de Alicante. El proyecto Acciones formativas para profesionales cuenta con la financiación de la Vicepresidencia Primera y Conselleria de Servicios Sociales, Igualdad y Vivienda.