La región portuguesa de Leiria, que es el destino invitado en esta vigésimo octava edición de Intur que se celebra en la ciudad de Valladolid, presume en su stand de ofrecer al viajero una oferta diversificada para todos los días del año.
El responsable del área de Turismo de la ciudad de Leiria, Ricardo Marques, explica a EFE que “sólo en nuestra ciudad programamos durante todo el año más de 600 eventos”, muchos de ellos festivales o conciertos, “a los que acuden numerosos turistas españoles”.
Además, en esta edición de Intur, Leiria ha mostrado “sus encantos” como “ciudad de Navidad”, ya que ofrecen una iluminación especial, sobre todo la del castillo que corona esta localidad situada al cien kilómetros al norte de Lisboa.
Marques también explica que otro de sus atractivos es la gastronomía, donde la morcilla de arroz, las yemas denominadas “brisa de liz” o el lechón son algunos de los platos típicos de esta localidad.
Los puntos claves de Leiria
Porto de Mós es otro de las ciudades más turísticas de la región de Leiria y su teniente de alcalde, Fernando Amaral, explica a EFE que “los turistas españoles acuden todo el año pero, sobre todo, en la época de Semana Santa”, donde, además de los actos religiosos y las procesiones, se celebra el festival del cabrito.
En Porto de Mós, explica Amaral, disponen de una red de senderos de 700 kilómetros que se pueden recorrer a pie, en bici o a caballo. Además, en esta localidad está la posibilidad de practicar espeleología o parapente. El turismo de naturaleza, por estar dentro del Parque Natural Serra Aire e Candeeiros o, incluso, el turismo militar, también son otros de los potenciales de esta ciudad de la región de Leiria.
De su gastronomía, Fernando Amaral destaca los dulces denominados “parrameiros”, elaborados con maíz, frutos secos y miel.
En el día de hoy, el presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, acudió al stand de la región invitada de Leiria para conocer los potenciales turísticos de esta zona que combina playa y montaña, ya que se encuentra en la costa atlántica. EFE
