Nepal y Kailash Home, un viaje que llega al corazón

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Nepal y Kailash Home, un viaje que llega al corazón

Nuestro socio Luis María García, quien hizo de guía acompañante en nuestro viaje por Nepal, nos cuenta cómo fue una experiencia única e inspiradora junto a nuestros socios

Situado entre dos grandes colosos, India y China, se encuentra el pequeño país de Nepal. El país de las sonrisas, el país de las montañas, el país de los templos. Su variadísima geografía combina tierras llanas con los picos más altos del mundo, de 60 a 8848 metros sobre el nivel del mar. Con sus gentes que conforman un multivariado mosaico de etnias y dialectos, con su riqueza de templos, santuarios y stupas. Con su ritmo de vida templado, con su tolerancia de religiones y con un largo etc., Nepal todavía puede recordarnos a un Shangri-La.

Nepal es un país fascinante, complejo, irresistible, inolvidable. La experiencia de visitarlo produce la sensación de regresar a un tiempo olvidado. Una naturaleza espléndida, un arte sugerente, unas costumbres coloristas, y unas gentes hospitalarias y sonrientes nos hicieron las delicias del viaje. Después de una primera visita, pocos no hacen la promesa de volver.

Visitamos todos los templos importantes de Katmandu – Boudantah, Durbar Square, Pasupatinath, Suyambunath, etc – y ciudades cercanas como Patán, Bakthapur o Kirtipur. Paseamos por sus calles y plazas, y recorrimos sus tiendas. También fuimos a Pokhara, haciendo antes noche en Bandipur, precioso pueblo anclado en el pasado. En Pokhara visitamos el Lago Pewa y la Stupa de la Paz. El buen ambiente en el grupo fue la clave del éxito de tan buen viaje.

Nuestros socios disfrutaron de una aventura única en Nepal

La maravillosa experiencia de visitar a los niños del Kailash Home

La guinda a la tarta y el motivo principal de esta aventura era ir al Kailash Home – con el que ATF Turisferr tiene un convenio de ayuda a través de la Fundación Edurne Pasaban. El viaje trataba de dar dimensión a una afición (viajar) que pasa a ser acción (el Kailash Home). Gracias por hacerlo posible Turisferr.

Los pequeños actos que se ejecutan son mejores que todos aquellos grandes que se planean, porque es la acción lo único que puede llevarnos desde donde estamos hasta donde queremos ir. Nos vamos todos al Kailash. Vienen a buscarnos en un autobús escolar. Lo llenamos entre nosotros y la cantidad de bolsas que llevamos para repartir.

«¡Namaste!» nos chillaban a nuestra llegada. “Dios está en vosotros”, ”Dios está en mí”. Este es el verdadero significado del muy respetuoso y espiritual saludo. Y Dios está en el Kailash.

La armonía reinante dentro del recinto comienza a impregnarse en nosotros nada más llegar. Comienzas a quedar magnetizado mirando esos rostros que reflejan la más absoluta felicidad, que se iluminan ante tu mirada. Descubres nuevos sentimientos que ni siquiera sabías que existían. Sientes una gratificante sensación de unidad, de conexión y de amor. Vuelves a recuperar el verdadero contacto humano.

La felicidad que se respira en el Kailash Home es una sensación única

El Kailash (hogar de la Fundación) no es un sitio de paso. Estar allí es ver cómo la energía te atraviesa y te transforma. Ver cómo los niños te dan todo a cambio de nada. Esa es su plenitud, niños con grandes sonrisas en sus labios, cuya ilusión irradia de sus miradas. Porque una sonrisa con una mirada brillante te da mucho más de lo que imaginamos y cuesta menos de lo que hacemos pagar.

Repartimos ropa, bolígrafos, juguetes, bailamos, jugamos al baloncesto, hicimos otra nueva fiesta de la hamburguesa, escuchamos música…

Ayudar al que lo necesita no sólo es parte del deber, sino de la felicidad. En la vida sólo recibes aquello que das, es como un bumerang que siempre nos devuelve lo que hemos lanzado. El secreto de la vida está en dar, no en recibir. No hay mayor placer que poder ayudar a otras personas.

En mi caso el Kailash me ha enseñado como esperar por amor y como amar esperando, que es más hermoso que el acto en sí. LO IMPORTANTE NO ES ESTAR, ES APARECER. Gracias a todos los que estando en Katmandú habéis aparecido por el Kailash Home. De vuelta en el autobús escolar a Katmandú se habla poco, no hace falta preguntar, todos estamos viviendo la misma experiencia, estamos viviendo la vida.

El recibimiento que recibieron nuestros socios nos dejó huella

Una reflexión de un viaje inspirador

Las acciones son lo que marcan la diferencia, no las intenciones. La única manera de cambiar algo es a través de nuestro cambio personal; y el cambio está en uno mismo, no en los demás. Los sueños cuando son intensos y nacen del fondo del corazón te cambian la vida. No es una locura perseguir los sueños. En la vida se pueden hacer muchas cosas, y yo he querido hacer esta. Y lo he querido hacer intensamente y con pasión. Tengo por norte la solidaridad, y una máxima cristiana, yo que me declaro agnóstico (no creo en nada). Creo en la gente que aprecio, independientemente de sus ideas – AYUDAR. Ayudar a estos niños huérfanos, pobres y desamparados de las zonas montañosas más remotas de Nepal y a los que proporcionamos un alto nivel educativo en Katmandú.

Practico el más acá con entusiasmo y sin alardes neorrománticos, mantengo que es un deber material, no sólo moral, el restar, raer, roer, un resto de injusticia, de dolor, de miseria. Avanzar, aunque sea sólo un milímetro es algo más que la nada. El “todo” es consecuencia de incontables “casi-nadas”. Uno de vosotros influirá en otro, y luego en otro más, y luego en diez, cien, mil y el inalcanzable horizonte utópico siempre estará, sino más cerca, al menos un poco menos lejos. El compromiso individual es el triunfo colectivo.

Mira y descarga las fotografías de nuestro viaje a Nepal y el Kailash Home 📸

Autor: Luis María García Muñiz, socio de ATF Turisferr.

2025-12-19T13:55:40+01:00

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