El viernes vivimos una nueva sesión dominada por la volatilidad. El Dow Jones y el S&P 500 lograron ligeras ganancias del 0,08%, mientras que el Nasdaq destacó con un avance del 0,52%, gracias al impulso de los grandes valores tecnológicos. Sectores como IT (+0,49%), comunicación (+1%) y consumo discrecional (+0,63%) lideraron las subidas, mientras que materiales (-1%) e inmobiliario (-1,03%) sufrieron correcciones. Pero, más allá de las cifras finales, la sesión estuvo marcada por un fuerte vencimiento de opciones trimestrales, que generó un volumen récord de más de 21.000 millones de títulos negociados. A pesar de las incertidumbres económicas, los flujos hacia acciones estadounidenses alcanzaron en la semana un pico anual, reflejando un optimismo moderado a medio plazo, especialmente en sectores como tecnología y defensa.
En Europa, los principales índices cerraron mixtos. El Ibex 35 avanzó un 0,33%, mientras que el Eurostoxx 50 (-0,5%), el DAX alemán (-0,47%) y el CAC 40 francés (-0,63%) retrocedieron. Los sectores de comunicación (+0,68%) y utilities (+0,13%) tuvieron avances leves, contrastando con las caídas en materiales (-1,8%), industriales (-1,3%) y tecnología (-0,85%). Estas fluctuaciones reflejan las crecientes preocupaciones por el impacto de las tensiones comerciales entre Estados Unidos y Europa, aunque algunos inversores se refugiaron en activos defensivos ante los riesgos macroeconómicos.
Confianza del consumidor
El viernes se publicaron varios datos económicos relevantes. En Francia, la confianza empresarial mejoró ligeramente (97 frente a 96 esperado), aunque el sentimiento manufacturero mostró debilidad en los pedidos. En Suiza, la masa monetaria M3 creció un 2,3% interanual, destacando el aumento de M1 (+5,7%) y M2 (+7,1%). En el Reino Unido, la confianza del consumidor mejoró a -19 frente al -20 esperado, reflejando una percepción algo menos negativa sobre la situación económica. En la eurozona, la confianza del consumidor retrocedió a -14,5 y, en Turquía, este indicador mejoró significativamente a 85,9, aunque estos datos fueron recopilados antes de las recientes turbulencias políticas.
Renta fija
En los mercados de renta fija, los bonos estadounidenses cerraron con rendimientos del 4,25% en los vencimientos a diez y dos años. Mientras que, en Europa, los bonos alemanes a diez años ofrecen un 2,76%. En cuanto a las materias primas, el Brent subió un 0,22%, situándose en 72,16 dólares por barril, mientras que el oro retrocedió un 0,75%, cerrando en 3.022 dólares por onza tras alcanzar un máximo histórico a mediados de semana.
Reunión de la Fed
La principal noticia de la semana fue la reunión de la Fed. La Reserva Federal mantuvo los tipos de interés en el rango de 4,25% a 4,5%, anunciando dos recortes previstos para este año. Aunque revisó al alza sus proyecciones de inflación para 2025 y ajustó a la baja las de crecimiento, el mensaje fue percibido como moderado. El presidente de la Fed, Jerome Powell, reiteró que los efectos de los aranceles serán transitorios y que las expectativas de inflación a largo plazo siguen alineadas con el objetivo del 2%. Estas declaraciones impulsaron los mercados bursátiles, aunque las preocupaciones sobre el crecimiento económico y las tensiones comerciales persisten.
Otros bancos centrales también adoptaron posturas cautelosas. El Banco de Inglaterra mantuvo los tipos en 4,5%, con un voto minoritario a favor de una reducción. El Riksbank sueco dejó su tipo clave en 2,25% y el Banco Nacional Suizo recortó los tipos de interés al 0,25%, subrayando los riesgos a la baja.
Datos empresariales
El sector tecnológico vivió una semana volátil. Nvidia sufrió una corrección tras decepcionar en su evento GTC, mientras que Tesla se recuperó con fuerza gracias a una mejora en su calificación. Las tensiones comerciales también influyeron en el ánimo de los inversores, aunque un comentario del presidente Trump sobre flexibilidad en los aranceles ofreció un breve alivio. También a nivel corporativo, FedEx revisó a la baja su guía para 2025, citando una menor demanda y mayores costes, mientras que Nike despertó dudas sobre la velocidad de su recuperación. Sin embargo, el S&P 500 y el Nasdaq lograron romper una racha de cuatro semanas a la baja, lo que proporcionó un alivio psicológico.
En los mercados de divisas, el dólar mostró fortaleza a corto plazo, impulsado por el reequilibrio de carteras típico de finales de trimestre y las tensiones comerciales. Sin embargo, a medio plazo, se anticipa una debilidad estructural frente al euro debido a la convergencia de los diferenciales de crecimiento y el elevado déficit público estadounidense.
«Shock de oferta negativo»
El panorama global sigue marcado por la incertidumbre. Las tensiones comerciales entre Estados Unidos y la Unión Europea, incluyendo la posible imposición de aranceles del 25% la semana que viene, podrían desestabilizar los mercados en el corto plazo. Este entorno plantea riesgos de un «shock de oferta negativo», que afectaría tanto al crecimiento como a la inflación. Mientras que la Fed podría reducir tipos para contrarrestar estos efectos, en Europa se prevé un aumento del gasto fiscal, especialmente en infraestructuras y defensa, como posible amortiguador.
Avances de la semana
La semana que hoy comienza estará marcada por datos clave como el PCE de inflación subyacente, la confianza del consumidor o cifras inmobiliarias en Estados Unidos, el IPC en el Reino Unido, Japón y Australia, así como decisiones de política monetaria en México y Brasil. En el ámbito empresarial, se esperan los resultados de Lululemon, con expectativas de crecimiento, y de minoristas como Dollar Tree y Chewy, con una perspectiva más cauta. En China, las medidas para estimular el consumo podrían aportar un renovado optimismo.
Pero como diría Forrest Gump: «La vida es como una caja de bombones: nunca sabes…» con qué versión de Donald Trump te vas a encontrar. Así que los mercados seguirán buscando claridad en un entorno económico lleno de sorpresas y los PMI que conoceremos hoy podrán servir de guía.
Buena semana
Jorge González GómezDirector de Análisis