La nueva línea de alta tensión con Euskadi se empezará a final de año | Institución Futuro

Compatibilità
Salva(0)
Condividi

Redia espera que las últimas autorizaciones lleguen para el invierno, aunque estas podrían retrasarse hasta la siguiente primavera

A falta de recibir las últimas autorizaciones para la construcción de la nueva línea eléctrica de alta capacidad con el País Vasco, lo que se espera que suceda este mismo invierno o en la próxima primavera a más tardar, Redia (antigua Red Eléctrica Española) confía en comenzar las obras inmediatamente. El nuevo trazado con una capacidad de 2.500 MW sustituirá a los dos existentes de 400 MW que datan de los años 20 y 70 del siglo pasado, según explicó ayer el delegado regional norte de Redia, Antonio González Urquijo, durante la jornada ‘Presente y futuro de la energía en Navarra’ organizada por el laboratorio de ideas Institución Futuro y los tres colegios de ingenieros de Navarra (de Caminos, Agrónomos e Industriales).

González Urquijo detalló que la construcción de la nueva línea avanzará todo lo posible sin interferir con las antiguas y que el plan pasa por mantener una de estas últimas hasta poner en servicio la nueva para “minimizar” el tiempo de desconexión con el País Vasco. El problema radica que el nuevo trazado coincide con el antiguo en uno de los tramos, por lo que inevitablemente habrá que cortar “durante unos meses” la conexión de una de las líneas viejas. La nueva línea será más larga (95 kilómetros frente a los 60 kilómetros de las dos actuales) para alejarla de las poblaciones y reducir la afección sobre el territorio. Esta mayor longitud también se debe a que la nueva línea no partirá desde Orkoien como las dos antiguas, sino desde Tafalla.

Medalla de Oro de Navarra

La jornada comenzó con la petición por parte de los representantes de los colegios de ingenieros para que se conceda la Medalla de Oro de Navarra a Esteban Morrás y a Julián Balduz en reconocimiento a su aportación como promotores del primer parque eólico comercial del mundo, el instalado en El Perdón, y el desarrollo del sector de las renovables en la Comunidad foral. La apertura contó también con la intervención del consejero de Industria y de Transición Ecológica y Digital Empresarial, Mikel Irujo, que hizo énfasis precisamente en la necesidad de aumentar la capacidad de evacuación de la energía eléctrica renovable en Navarra, especialmente tras la autorización de nuevos parques con una potencia que duplicará los construidos en los últimos treinta años.

Por su parte, la directora general de Energía, I+D+i empresarial y Emprendimiento, Uxue Itoiz, admitió que todavía queda un largo camino que recorrer para alcanzar el objetivo de descarbonización en 2050 habida cuenta de que, todavía en la actualidad, el 70% de la energía que se consume en Navarra es de origen fósil. La presidenta del clúster navarro de energías renovables (Enercluster), Ana Goyen, expuso la necesidad de proteger frente a la competencia desleal tanto la capacidad de fabricación y diseño de toda la cadena de valor en energías renovables, al tiempo que alertó de la “amenaza china” tanto en grandes componentes como en los pequeños. Las intervenciones terminaron con el director general del Centro Nacional de Energías Renovables (Cener), Pablo Ayesa, que incidió , entre otros temas, sobre la importancia de las baterías y la producción de hidrógeno verde como herramientas para almacenar los excedentes de energía proveniente de las renovables.

Una sobreproducción que está tirando el precio

Los bajos precios de la electricidad, con valores negativos algunos días, están teniendo un efecto muy positivo en la competitividad de la industria de toda España, pero también están desincentivando la construcción de nuevos parques eólicos y fotovoltaicos por la nula rentabilidad que proporcionan, según explicaron ayer los ponentes en la jornada ‘Presente y futuro de la energía en Navarra’ organizada por el laboratorio de ideas Institución Futuro y los tres colegios de ingenieros de Navarra (de Caminos, Agrónomos e Industriales). Los precios tan bajos se explican por el desajuste entre oferta y demanda al entrar en servicio un gran volumen de parques renovables en los últimos años, mientras que el consumo de electricidad ha caído. Las conexiones con Francia y la electrificación de industria y transporte debería corregir el problema en dos o tres años.

Habrá una línea directa con Francia desde 2030

La necesidad de seguir construyendo nuevos parques renovables, tanto fotovoltaicos como eólicos, para cumplir con los objetivos de descarbonización de 2050 está chocando con la imposibilidad para evacuar toda la producción actual y futura, según los expertos que intervinieron en la jornada ‘Presente y futuro de la energía en Navarra’ organizada por el laboratorio de ideas Institución Futuro y los tres colegios de ingenieros de Navarra (de Caminos, Agrónomos e Industriales). La modernización y dimensionamiento de la red fue una de las cuestiones que se abordaron, punto en el que se explicó que está previsto construir una línea eléctrica de unos 2.000 MW que conecte directamente con Francia. Se trata de un proyecto todavía en una fase muy inicial por lo que no hay detalles, pero la intención es que esté operativa entre 2030 y 2035, según explicó el representante de Redia, Antonio González Urquijo.

El reto de electrificar la industria y el transporte

De nada sirve contar con una gran potencia instalada para producir energías renovables y una red capaz de distribuirla y exportarla si falla la demanda de consumo eléctrico. Así lo constataron los ponentes de la jornada ‘Presente y futuro de la energía en Navarra’ organizada por el laboratorio de ideas Institución Futuro y los tres colegios de ingenieros de Navarra (de Caminos, Agrónomos e Industriales), que apuntaron a la necesidad de electrificar cuanto antes tanto el transporte como los procesos productivos en la industria, que son los principales consumidores de energías fósiles. En ese sentido, el delegado regional norte de Redia, Antonio González Urquijo, expresó su confianza en que “en dos o tres años” se materialicen muchos proyectos en las empresas para electrificar procesos, algo que contribuirá a compensar la oferta y la demanda y normalizar los precios de la electricidad.

Recapiti
Isabel Larrión