La angustiosa “nueva normalidad” de tensión geopolítica ha creado zonas de peligro para el transporte marítimo internacional, y la gente de mar se ha visto obligada a pasar a primera línea.
La Oficina Marítima Internacional (IMB) de la CCI publicó ayer su informe del primer trimestre sobre piratería marítima frente a las costas de Somalia, que muestra 33 incidentes registrados de piratería y robo a mano armada contra barcos.
Esto representa un aumento del 18,2% con respecto a los 27 incidentes ocurridos en los primeros tres meses de 2023.
“De los 33 incidentes reportados, 24 embarcaciones fueron abordadas, seis tuvieron intentos de ataque, dos fueron secuestrados y uno fue atacado a tiros”, dice el informe.
Durante estos ataques, 35 tripulantes fueron tomados como rehenes, nueve secuestrados y uno amenazado.
El secretario general de la Cámara de Comercio Internacional (CCI), John Denton, dijo: “El resurgimiento de la actividad pirata somalí es preocupante y ahora más que nunca es crucial proteger el comercio, salvaguardar las rutas y la seguridad de los marinos que mantienen el comercio en movimiento.
“Se deben tomar todas las medidas para garantizar el libre flujo ininterrumpido de mercancías a lo largo de las cadenas de suministro internacionales”.
La marina india y la guardia costera de Seychelles han estado haciendo esfuerzos para interceptar buques secuestrados y salvaguardar a las tripulaciones en la región de Somalia, y se ha pedido a los buques que cooperen manteniendo estrictas vigilancias contra la piratería y los robos y reportando ataques y avistamientos sospechosos a las autoridades locales.
Muchos transportistas también están optando por desviar la ruta de sus barcos para evitar zonas peligrosas o atracar ampliamente alrededor de las costas afectadas.
“La IMB PRC advierte a los propietarios y capitanes de buques contra la complacencia. Los incidentes recientes demuestran la continua capacidad y capacidad de los piratas somalíes para atacar buques a más de 1.852 kilómetros de la costa somalí”, advierte el informe.
Mientras tanto, Haití –un país que ha ido cayendo en la anarquía desde el asesinato en 2021 del presidente democráticamente electo Jovenel Moïse– fue testigo recientemente del secuestro de un buque de carga general que viajaba de Varreux a Cap-Haitien.
Radio Télé Métronome informó que el 4 de abril, unos pandilleros secuestraron a todos los que estaban a bordo del barco y robaron unos 10.000 de los 60.000 sacos de arroz que transportaba.
El barco fue recuperado el lunes por la policía nacional de Haití después de un tiroteo de cinco horas.
El informe de IMB también señala un aumento en los delitos oportunistas de bajo nivel denunciados en aguas de Bangladesh, con siete incidentes reportados solo en el primer trimestre, en comparación con un informe para todo 2023.
El informe también señala informes de cinco incidentes contra cuatro grandes graneleros y un buque de carga general en el Estrecho de Singapur.
Si bien la amenaza a la carga se considera de bajo nivel en esta área, la amenaza a las tripulaciones de los barcos sigue siendo alta: cinco marinos fueron tomados como rehenes en tres incidentes separados en enero.
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