Entrevista a Daniel Ureña, presidente de NITID, en El Publicista
Durante 20 años la marca MAS Consulting en España ha sido un referente en el ámbito de la Comunicación y los Asuntos Públicos. Fundada en nuestro país por el consultor Daniel Ureña, se ha ido consolidando como una de las firmas de referencia en Public Affairs, pero también por sus programas de formación, por los que han pasado más de 5.000 directivos y representantes de partidos de todo color. Presidentes, ministros, parlamentarios, eurodiputados, alcaldes, candidatos y, por supuesto, docenas de portavoces políticos y empresariales que se han formado de la mano de MAS Consulting. Con motivo de su 20º aniversario la compañía desarrolló el pasado año un ambicioso proceso de rebranding, que analizamos con su presidente, Daniel Ureña.
MAS Consulting era una marca muy consolidada en España después de dos décadas de trayectoria. ¿A qué se debió ese cambio de marca tan radical?
Siempre decimos que no queremos ser los más grandes, que queremos ser los mejores, y eso nos obliga a tener que innovar continuamente, pero sin perder nuestra esencia. Por eso, a medida que se acercaba nuestro 20º aniversario, nos parecía el momento idóneo para transformar la compañía. Para ello, diseñamos un plan estratégico en cuatro ámbitos: accionariado, marca, sede y equipo. Hoy estamos ya culminando ese plan. En primer lugar, hicimos un cambio en el accionariado y los tres socios que dirigimos el día a día ampliamos nuestra participación hasta el 100%, ganando en agilidad, flexibilidad y libertad. En segundo lugar, de la mano de Brandfor, decidimos cambiar la marca a NITID Corporate Affairs para escenificar esta nueva etapa y reforzar nuestro posicionamiento hacia el mundo corporativo. En tercer lugar, hemos cambiado de sede, que inauguraremos muy pronto, y que va a suponer un gran atractivo para nuestros empleados y nuestros clientes y para nuestra proyección. Y, en cuarto lugar, el equipo, que paso a paso estamos transformando con perfiles más senior.
¿Qué balance hace del cambio de marca en este primer año?
Ha sido un gran acierto, ya que nos está permitiendo llegar a ámbitos donde antes nos costaba. Cada vez más empresas se nos acercan para conocernos, ya que el boca a boca es nuestra mejor herramienta de comunicación. Y, por supuesto, se refleja en que seguimos consolidando una buena tendencia de crecimiento en los últimos años.
¿Cómo están viendo el gran auge de los Asuntos Públicos en España?
Es muy bueno que los Asuntos Públicos tengan cada vez más reconocimiento. Nosotros llevamos muchos años trabajando por su profesionalización y hemos puesto nuestro granito de arena con diferentes iniciativas, por ejemplo, formando a más de 300 profesionales en nuestro Postgrado de Dirección de Asuntos Públicos (PDAP) junto a la Universidad Pontificia Comillas ICADE, un programa que está a punto de cumplir 15 años. Estamos creando banquillo y, por eso, nos encanta que muchas de las principales compañías que operan en nuestro país y las principales agencias de comunicación nos elijan para formar a sus consultores en Asuntos Públicos.
¿Qué aportan ustedes frente a otros actores del sector?
Nosotros creemos que los Asuntos Públicos no consisten en gestionar reuniones, que no somos conseguidores. Somos estrategas que ayudamos a que nuestros clientes se conviertan en aliados del legislador y que las causas y debates que promueven sean relevantes para la opinión pública y, por tanto, para los decisores políticos. En este sentido, nuestro modelo se basa en menos clientes y mejor servicio. Nuestro tamaño nos permite que los socios estemos involucrados en los proyectos y eso hace que el nivel de satisfacción de nuestros clientes sea muy alto. Al menos eso dice año a año el estudio PR SCOPE, que nos sitúa como la firma nº1 en Public Affairs y como una de las más recomendadas del mercado.
¿Cuál ha sido la principal lección que ha aprendido a lo largo de 25 años de trayectoria profesional?
Muy difícil elegir solo una, pero me quedo con esta: cuanto mayor es la reputación de una organización, mayor capacidad de ser escuchada tiene, y por ello, su capacidad de influencia es mayor. Por tanto, la Comunicación y los Asuntos Públicos son las dos caras de una misma moneada y deberían gestionarse coordinadamente.