La importancia del onboarding en una empresa
La incorporación de un nuevo empleado a una compañía es un momento muy relevante, tanto para él como para la organización. Este proceso se conoce como onboarding en una empresa y va mucho más allá de una simple inducción; es la oportunidad perfecta para asegurar que el trabajador entienda la cultura empresarial, conozca sus responsabilidades y se sienta apoyado desde el primer día. ¡Te invitamos a descubrir todas sus claves!
¿En qué consiste el onboarding en una empresa?
El proceso de onboarding en una empresa supone seguir una serie de pasos para la integración de un nuevo empleado en la compañía. Es decir, abarca desde las primeras interacciones del trabajador con la empresa, hasta los primeros meses ocupando su puesto.
Durante este tiempo, el objetivo es proporcionar las herramientas, la información y el apoyo necesarios para que el nuevo miembro del equipo pueda adaptarse a su entorno laboral y ser productivo lo antes posible. Además, el onboarding en la empresa incluye no solo aspectos administrativos y operativos, como la entrega de equipos y la firma de documentos, sino también el acceso a formación, la inmersión en la cultura corporativa y la creación de relaciones con compañeros de trabajo.
Beneficios de un buen onboarding
Un proceso de onboarding en una empresa que esté bien diseñado tiene un impacto significativo en varios aspectos de la experiencia del nuevo empleado y en la eficiencia general de la empresa. Por ejemplo:
- Mejora la retención de los trabajadores. Ayuda a que los nuevos empleados se sientan valorados y apoyados, lo que reduce la posibilidad de que busquen otras oportunidades a corto plazo.
- Acelera el tiempo de productividad. Al proporcionarle la formación adecuada, asegurarnos de que entiende su rol, dejar claras las expectativas y las herramientas que utilizará, se reduce el tiempo que tarda el trabajador en ser plenamente productivo.
- Aumenta el compromiso y la motivación. Cuando un empleado que se siente integrado y comprende los valores empresariales y la misión, es más propenso a mostrar un alto nivel de compromiso y motivación hacia su trabajo.
- Promueve una cultura de colaboración. El onboarding en una empresa facilita la creación de redes internas, lo que contribuye a un ambiente de trabajo más colaborativo, al fomentar el contacto temprano con los compañeros y supervisores.
¿Quieres ver cómo todos estos beneficios llegan a tu empresa al incorporar a un talento nuevo? Te adelantamos que en PrideCom podemos ayudarte con ello, pero vamos a empezar contándote las claves para lograrlo.
7 claves para un buen onboarding en una empresa
El primer día de trabajo nunca se olvida. Todas las impresiones que uno tiene durante esas ocho horas en la nueva empresa dejan una huella imborrable en nuestra memoria emocional. El “día 1” es la oportunidad ideal de conectar con el recién llegado, para construir acciones de Employer Branding, para empezar a generar el engagement que le convertirá en fan de la marca desde el principio.
Por esta razón, te compartimos 7 tips para que el primer día de tus empleados sea especial.
1. ¿Por qué esperar al primer día?
Adelántate y allánale el camino antes de que ponga un pie en su nueva oficina… ¿Cómo? Enviándole el Welcome Pack una semana antes de que se una al equipo. También puedes invitarle a participar en una gymkhana virtual o proponerle un simpático quiz basado en preguntas sobre la organización o sobre la cultura y valores. No solo le quitarás presión en esos días previos a su llegada, sino que a través del juego conseguirás que se familiarice con la empresa… ¡Ah! Y si lo hace bien, no olvides reconocérselo en cuanto se incorpore.
2. ¿A qué huele tu nueva empresa?
De entre todos los sentidos, el olfato es el que más recuerdos evoca, lo que uno huele permanece siempre en la memoria. Por lo tanto, si quieres que el nuevo colaborador interiorice los atributos de la marca desde el primer día, ¡crea un aroma que defina a la organización e inclúyelo en el pack de bienvenida!
También podrás utilizarlo para ambientar las oficinas de trabajo e incluso para mantener vivo el recuerdo de la marca entre los clientes.
3. Dale valor al merchandising
Plantéalo como un elemento que favorezca el anclaje emocional. Los bolígrafos y los cuadernos son muy prácticos, pero no conectan con la emoción del recién llegado. Dale la vuelta al tan manido merchandising y transfórmalo en ese objeto que representará el compromiso mutuo entre el nuevo empleado y la organización.
4. Si le vas a contar una historia, que sea corta
No le avasalles con demasiada información el primer día, no entierres su mesa bajo antiguas publicaciones de la empresa, ni le invites a leer presentaciones que poco tienen que ver con él. Esto solo acaba de empezar, tendrá tiempo de sobra para conocer la organización al detalle.
Deja que ese primer día se centre en las personas y si quieres contarle misión, visión y valores, ¿por qué no hacerlo con un vídeo basado en visual thinking? Seguro que en dos minutos consigues más que en una jornada entera de lectura.
5. Dale visibilidad antes de que llegue
No esperes a que sean las nuevas incorporaciones quienes completen su perfil en la red social corporativa o en la intranet de la organización. Tómate 5 minutos para rellenar su ficha con los datos más relevantes para que el resto de la organización empiece a ubicarle. Y si también puedes incluir su foto, te ahorrarás muchas persecuciones por los pasillos de la oficina recordándole este asunto pendiente.
6. Es su día, ¡hazle sentir especial!
Organiza una gran acogida personalizando su mesa de trabajo con un enorme “¡Bienvenido!”, sorprendiéndole con un completo desayuno o anunciando su llegada a toda la organización. Si entre tus canales de comunicación Interna cuentas con una red de pantallas, comunica su incorporación e invita a los colaboradores a decir “¡Hola!”, al recién llegado.
¿Prefieres contarlo a través de la newsletter? Prueba con una entrevista desenfada en la que se vea el lado más humano y divertido del nuevo empleado.
7. Una acogida para cada momento
A lo largo de la vida en la empresa se pueden vivir diferentes bienvenidas: la incorporación de una baja, un cambio de puesto o el regreso de una excedencia.
Para conseguir un auténtico engagement es importante que convirtamos cada uno de estos recibimientos en una oportunidad para demostrarle el compromiso de la empresa con él. Será especialmente relevante dejarle claro qué se espera de él en cada momento y cuál es su aportación al proyecto de la organización.
Además de esto, debe tener claro quién es su mentor, para que sepa a quién acudir en caso de necesitar orientación sobre cualquier tema. Y, por supuesto, durante los primeros meses, el feedback es crucial. No solo debe ser el empleado quien reciba retroalimentación sobre su rendimiento, sino que también vosotros debéis estar abiertos a recibir comentarios sobre cómo está funcionando el proceso de onboarding en la empresa.
Imaginemos el caso de una empresa tecnológica que ha contratado a un nuevo desarrollador de software. El proceso de onboarding en una empresa comienza antes de su primer día con un correo de bienvenida que incluye un enlace a un portal donde puede completar algunos trámites administrativos, como firmar contratos y elegir beneficios. También se le proporciona información sobre su equipo, su mentor asignado y un cronograma de cómo será el primer día. Como detalle, se le hace llegar un pack de bienvenida a su dirección antes del comienzo.
El primer día, el nuevo empleado es recibido por su mentor, quien le muestra la oficina, le presenta al equipo y lo guía en la configuración de su equipo de trabajo. Durante la primera semana, asiste a reuniones de introducción sobre la cultura y los valores de la empresa, y recibe capacitación sobre las herramientas y tecnologías que usará en su puesto.
Además, se organiza un almuerzo informal para que el nuevo miembro conozca a sus compañeros en un entorno relajado. A lo largo del primer mes, se le proporcionan sesiones de formación más específicas. Por supuesto, su mentor sigue disponible para responder dudas y ofrecer orientación.
En su primer mes, se organiza una reunión de seguimiento con su supervisor para revisar su adaptación y ofrecer retroalimentación.
Este enfoque de onboarding en la empresa asegura que el empleado no solo se sienta bienvenido y apoyado, sino también productivo rápidamente, reduciendo la curva de aprendizaje y ayudándolo a integrarse tanto social como profesionalmente en la empresa.
Como hemos mencionado, el onboarding es una de las primeras experiencias que un nuevo empleado tiene en una compañía y, como tal, tiene un impacto profundo en su percepción de la organización. Por ello, invertir tiempo y recursos en perfeccionar el onboarding es una decisión estratégica que puede generar grandes beneficios a largo plazo para la empresa.
En PrideCom te ayudamos a crear un onboarding efectivo gracias a nuestra agencia de Employer Branding y de marketing en RR. HH., que aseguran una primera impresión positiva y duradera. Te ayudamos a facilitar la integración de los nuevos empleados en tu compañía desde el primer día, siempre con un enfoque personalizado para optimizar su adaptación y asegurando que comprendan rápidamente la cultura, valores y objetivos de tu empresa. ¡Confía en nosotros y enamora a tus nuevos talentos!
