Expedición Dakar. 633 cirugías y muchas sonrisas. - Fundación Elena Barraquer

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Expedición Dakar.  Enero 2025

Recién llegados de Dakar, sin apenas tiempo de recuperar el sueño, me gustaría transmitir a la Fundación Elena Barraquer (FEB) mi agradecimiento por haberme permitido vivir una experiencia como esta.

Mi sorpresa empieza en Barcelona. Un grupo de 20 personas que no nos conocemos pero que conectamos solo con la primera mirada, el primer saludo, rodeados de un interminable carro con enormes cajas negras y sacos amarillos, rojos y negros llenos de instrumental, lentes, microscopios, anestesia, medicación…, y todos los equipos quirúrgicos, sin ser aún conscientes que van cargados de esperanza e ilusión, para dar luz a la vida de muchas personas que la perdieron hace demasiado tiempo.

Un  confortable polo azul claro y una mochila gris nos identifican con un logo que simula una catarata y que ya nunca olvidaremos.

Ir a Senegal con Fundación Elena Barraquer nada tiene que ver con el lujo de un viaje más.

El lujo es ver la sonrisa de una madre al descubrir que por fin puede ver a su bebe. De una abuela que gracias a un único ojo operado puede volver a cuidar de sus nietos para que sus hijos puedan trabajar. De un padre que puede volver a traer el sustento a su familia o de un niño que puede recuperar la ilusión de poder jugar con sus amigos.

El lujo es ver llorar a un cirujano al abrir el parche del ojo de su paciente , un niño de solo 12 años, y comprobar que vuelve a haber luz en su vida, y a todo el equipo aplaudiendo emocionado. Es también recibir el cariño y agradecimiento constante de todos esos pacientes, 633 esta vez, por haber conseguido algo parecido a la magia. Todos ellos nos han dado también su luz y su magia a esta expedición.

Pero lo que hay detrás no es magia. Detrás hay una organización, una profesionalidad y un trabajo sin descanso que consigue convertir el caos  africano, en un engranaje perfecto que no pierde un segundo, porque todos esos segundos sumados en 6 días pueden suponer una persona mas operada de cataratas.

Todos sumamos, desde la propia Elena Barraquer, operando sin descanso hasta el último voluntario que, como yo, apenas sabemos nada de medicina.

Entre nosotros hay cirujanos, anestesistas, oftalmólogos, instrumentistas de quirófano y voluntarios de campo, pero sobretodo somos hombres y mujeres que vinimos de distintas partes del mundo (Bélgica, Argentina, Italia, Colombia, Venezuela , Portugal y España), pensando en ayudar y volvemos con el corazón lleno de gratitud, de reconocimiento al valor y a la  entereza y de los que menos tienen, nuestros pacientes de este año y los que ya esperan que volvamos.

Por todo ello, gracias:

Elena, Gustavo, Vincent y Borja (cirujanos)

Simona y Andrés (anestesistas)

Ana y Alix (oftalmólogas)

Sofi, Pau, Bruno y Henar (Instrumentistas de Quirófano)

Mónica, Luis, Cristina, Ricard, Montse y Marta (ayudantes de campo)

Y Mónica por estar siempre al lado de todos.

En nombre de todos ellos escribo esta nota, porque todos juntos hemos sido uno.

Gracias a la Fundación Elena Barraquer por la gran labor que hace en todo el mundo y por permitir a personas que no pertenecemos al ámbito sanitario, poder recibir este maravilloso regalo.

Volveré.

Pilar Vila-San-Juan –  Voluntaria de Campo

Son las 17:30. Vuelas a las 20:00. Has quedado 18:15. Todavía no has hecho la maleta. Vas tarde. Corres un poco. Te das cuenta de que tampoco hay mucho que meter en la maleta. Vas a estar todo el dia en pijama desechable y esos no los tienes tú. Pasaporte. Móvil. Cartera. Llaves. Pasaporte. Pasaporte.

Te viene a buscar Henar. Se nota que su maleta también está recién cerrada. Ella sabes que está preparada hace tiempo. Eso es lo importante. Sabes que vas a agradecer tener a alguien preparado alado.

Control de seguridad ok. Vuelo ok. Taxi ok. Hotel ok. Dormir ok. Taxi ok. Otra vez en el aeropuerto.

Primeras presentaciones. Más gente con dudas. Más gente con ganas. Más gente que viene viene a dar. A dar al de alado, a darse a ellos mismos, a darte a ti. A, entre todos, dar todo a los que ya están allí.

Bruno y Alix. Cristina. Marta, Pilar y Montse. Ricard. Moni, Sofi, Simona. Pau, Andrés, Ana, Gustavo. Vincent. Llega Elena. Se sabe tu nombre, se sabe todos los nombres. Quiere saber cómo vamos a ayudar cada uno. Habla, pregunta, cuenta. Todo es fácil.

Gente maja nos ayuda con las maletas. 12 duras + 24 blandas +1 (le petit valise).

Estás en Madrid. Mónica 2 y Luis. Ya estamos todos. Se te da fatal aprenderte los nombres de la gente. Esta vez no ha pasado ni 1h y ya te sabes todos. Hasta el de Paula.

Estás en Dakar. Todo es un pequeño caos. Todo está a medio hacer. Coches a medio hacer. Carreteras a medio hacer. Casas a medio hacer. Normas de trafico a medio hacer. En realidad también hay cosas hechas del todo que están a medio deshacer. Te paras y piensas cuál de las dos opciones se ajustaría mejor a ti. Estás por hacer o por deshacer. Está claro que hecho del todo no estás. Miras por la ventana y ves un coche a medio hacer o medio deshecho tirado. Entre tres lo empujan para conseguir que arranque. Arranca. Miras dentro del autobús y ves gente con ganas de empujarte.

Día 2. Día de ajustar expectativas. Día de conocer la realidad. La realidad del hospital, del espacio, de la gente, de los pacientes. La realidad siempre es más dura. Las expectativas siempre hay que ajustarlas un poco a la baja. Hay que reimaginar espacios e inventar circuitos. Elena sabe lo que quiere, Sofi sabe lo que necesita. Pilar no lo dice, pero lleva 1 mes estudiando los planos del hospital y sabe ya donde colocar cada cosa para que todo encaje, todo fluya, la luz sea la correcta y los colores nos transmitan a la vez calma y brío para seguir operando.

Con lo que no contaba pilar es con que las puertas no tienen manillas. Y eso si están abiertas. Da igual. Ya está. Hemos montado 4 quirófanos donde solo entraban 2. No hay pacientes así que no podemos operar. Aprovechamos para ir a una isla. Encontramos unas maracas. Quién quiere un mvl si tiene kes kes.

Dia 3. Llega tu turno. Por favor que no esté a medio hacer. Por favor que no esté a medio hacer. Por favor que no esté a medio hacer. Primer paciente. Primeros sufrimientos. Hay que cogerle el pulso al micro. Hay que cogerle el pulso sl faco. Hay que cogerle el pulso al pedal. Hay que cogerle el pulso a la lente. Pero Henar está ahí y es todo más fácil y más paz. Cristina, Mónica y Luis están ahi y todo es más sencillo porque antes de venir se implantaron 4 manos, 3 orejas y 5 ojos. Ahora han desarrollado un sentido de la anticipación y una velocidad de encontrar, coger y dar cosas que hace que nunca falte de nada.

Sofi y Elena no están ahí, pero por la noche ha pasado Michelin a recogerlas para instalar una cámara y unos micrófonos en mi quirófano. Ahora lo ven y lo escuchan todo. Con un ojo miran a su paciente mientras con el otro están pendientes de la pantalla para ayudarme en todo con el mío. Sientes como todo el mundo te empuja. Esperas que los demás también estén sintiendo cómo los intentas empujar tú.

Hay más gente que no está ahí pero que sabes que están. Lo sabes porque gracias a marta y ricard, nunca falta un paciente en la camilla. Porque gracias a simona y Andrés ningún paciente se queja de dolor. Porque gracias a alix y ana sabes a qué atenerte antes de empezar cada cirugía. Lo sabes porque ves de reojo entrar pacientes sin parar en el quirófano de alado, donde Gustavo y Pau se han convertido en máquinas de explantar cataratas e implantar luz a los pacientes, y Montse y Pilar en expertas en sacarles el miedo y ponerles una sonrisa. Ça y est. Tout c’est bien passe.

Alado Vincent pasa del francés al inglés y luego al español para hablar con todos y contarnos lo a gusto que está. También lo mal que lo pasa a ratos. Todos lo pasamos mal a ratos. Por eso es importante seguir empujando.

Y más allá Elena sigue cantando. Sigue operando. Sigue atenta a todo y a todos. Mientras bruno solo tiene ojos, oidos y manos para ella. Se vacía para Elena. Figurada y literalmente.

Pasan los días. El micro esta ajustado. El faco esta ajustado. El pedal está ajustado. La lente está ajustada. Henar está mas compenetrada todavía. Pero los pacientes siguen sin estar todos curados. Es a lo que hemos venido. Hay que seguir. Quieres seguir. Quieres la camilla vacía el menor tiempo posible. Oyes el ruido que viene de fuera y sabes que todavía quedan muchos. No quieres perder el tiempo. Pero a la vez miras la ficha con respeto. Que no sea un punto rojo, que no sea otro punto rojo. Punto rojo. 30G. Azul. Punto rojo. Visco. Asa de Snellen. Lente de cámara anterior. Punto rojo. Vitrectomía. Lente de tres piezas. Punto rojo. Lo pasas mal. La cirugía va bien. Punto rojo. Lo pasas mal. La cirugía se complica. Pero acaba bien. Hoy. Y mañana. Esperas que en 1 mes también. Pero no lo sabes. Punto rojo. Catarata blanca. LIO en saco. Este paciente mañana estará contento le comentas a Henar. Ella ya tiene todo preparado para el siguiente. Y sigues. No quieres parar. Pero agradeces que vengan a pararte. Mañana hay que seguir. Hoy ya toca descansar.

Siguen pasando los días. Cada vez estás más cansado. Cada vez estás más a gusto. Cada vez te ríes más. Cada vez operais más. Ya van más de 300. Más de 400. Más de 500. Más de 600. Último paciente. 633. Un aplauso. Abrazos. Lágrimas. Fotos. Videos. Recuerdos. Risas. Muchas risas. Y muchas sonrisas. Gracias.

Sigues sin tener claro si estás medio hecho o medio deshecho. Para ahora ya tienes claro que arrancar has arrancado. A base de empujones. Gracias a los empujones. Pero arrancaste. Y ya has llegado al final. Por lo menos por esta vez. Ça y est. C’est tout bien passé.

Borja Errazquin – Cirujano

Recapiti
Teté Ferreiro