Las líderes reivindican a las mujeres que son capaces de transformar la sociedad - Étnor

Compatibilità
Salva(0)
Condividi

La segunda edición del encuentro Liderazgo Femenino puso de manifiesto la necesidad de seguir abordando la corresponsabilidad y la visibilidad

Sara García

Las mujeres ocupan cada vez más espacios en la sociedad, en la política, en la ciencia, en las empresas o en la educación pero, quizás, no tienen la visibilidad que les corresponde. Debido a una larga tradición masculina en prácticamente todos los ámbitos, las mujeres han quedado relegadas a un segundo plano, a la vida privada, y, actualmente, si preguntamos a los más jóvenes por sus referentes, la mayoría serán hombres. Aunque esto ya está cambiando y cada vez hay más mujeres referentes en sectores como el deporte o la ciencia.

Con el propósito de contribuir a la difusión de estas referentes y con motivo del 8M, Día Internacional de las Mujeres, Levante-EMV celebró ayer el II Encuentro de Liderazgo Femenino. «Esta es una jornada para conmemorar los derechos adquiridos y para seguir reclamando una verdadera realidad justa e igualitaria en todos los ámbitos y, por encima de todo, el final de las violencias contra las mujeres», expresó Silvia Tomás, directora de Relaciones Institucionales de Prensa Ibérica en Valencia y moderadora del encuentro, quien también presentó la revista ‘Mujeres Influeyntes de la Comunitat Valenciana’ un producto de Levante-EMV, Información y Mediterráneo que «esperamos que sea la primera de muchas».

La C. Valenciana, a la cabeza en mujeres directivas

El acto centró el debate en el entorno profesional y laboral, en el que se puso sobre la mesa datos del informe Women in Business 2024 en el que se refleja que las mujeres ocupan por primera vez en la historia el 40 % de los puestos directivos en España, la mayor tasa de la Unión Europea. El estudio destaca que la Comunitat Valenciana se sitúa a la cabeza con un 40 % de mujeres directivas, seguida de Madrid (39 %) y Galicia (37 %).

Así, en la jornada participaron una representación de mujeres referentes en sus ámbitos como Adela Cortina, directora Fundación Étnor; Marta Rebull, directora general de Personas y Talento de Grupo Prensa Ibérica; Mar Mestre, directora de Comunicació i Experiència de Clients de Caixa Popular; Berti Barber, cofundadora y directora de Marketing de Teika; María José Valero, cofundadora de Womanation; Carla Basso de Albuquerque, miembro de la Junta de Gobierno del COIICV; Carmen de Rosa, presidenta del Ateneo Mercantil; Rosana Navarro, empresaria del sector naviero; Eva Antonino Daviu, directora del Instituto de Telecomunicaciones y Aplicaciones Multimedia de la Universitat Politècnica de Valencia; y Ángela Pérez, presidenta del Consejo Social de la Universitat de València.

 «El tema del liderazgo me parece apasionante, el liderazgo no solo es una persona, es un grupo, un equipo, es un liderazgo compartido, capaz de transformar», expresó Adela Cortina, quien fue la encargada de abrir el debate abordando el tema de la ética en las empresas y afirmó que, cuando fundaron Etnor, «nuestra idea era que las empresas no solo pueden ser éticas sino que deben serlo». «Ahora en cualquier contexto de empresa se habla de ética: códigos éticos, responsabilidad social corporativa, recursos humanos… dimensiones de ética que son parte de la empresa. Creo que la ética es fundamental para que las empresas funcionen, tanto desde el punto de vista de saber hacer como económico», reflexionó Cortina. Según la filósofa valenciana, la ética aporta confianzaprudencia justicia, tres de los elementos indispensables para el liderazgo.

«A lo largo de la historia se han ido generando dos modelos éticos, el masculino y el femenino, y eso ha servido para la división sexual del trabajo. Unos valores eran mejores para la vida privada y otros para la vida pública», explicó Cortina, haciendo referencia a que por esos valores atribuidos las mujeres se quedaban en casa y los hombres iban a trabajar.

Rompiendo todos los esquemas establecidos, Carmen de Rosa es la primera mujer presidenta del Ateneo Mercantil de Valencia, una entidad histórica fundada en 1879 donde no se permitía entrar a las mujeres ni ser socias. «En los 90 entró la primera directiva mujer y en 2013 empieza mi presidencia con una junta muy masculinizada. Era todo un reto pero en estos 12 años hemos creado un gran equipo, rompiendo tabúes». Desde la última junta directiva en diciembre de 2024, la junta está compuesta por más muejres que hombres y por más socias y cada vez realizan más actividades culturales dirigidas para mujeres.

Carmen de Rosa piensa que la mirada de una mujer sí puede ser determinante en el liderazgo: «aporto una visión moderna en una institución cultural histórica, con la vista puesta en el acceso a las nuevas tecnologías; la dinamización de actividades; fijarse bien en los socios y socias para conocer cuáles son sus tendencias y prioridades. He contado con gente muy joven, hemos establecido la jornada 35 horas sin reducción de sueldo, hemos contratado a mujeres en situación de vulnerabilidad. Juntos estamos haciendo un Ateneo muy fuerte», añadió De Rosa.

Crear referentes

Una empresa que apuesta de forma firme por la promoción de las mujeres es Teika con su programa «Juegan ellas, ganamos todos». «El tema de la ética es fundamental, hace muchos años que en Teika, una empresa de alimentación, patrocinamos el deporte, para promocionar la salud. Hace unos 10-15 años íbamos mucho a los colegios a preguntar a qué deportistas admiraban y solo nos daban nombres de jugadores masculinos. Nos pusimos con este tema para crear referentes femeninos», contó Berti Barber. Así, hace ocho años arrancaron esta campaña que, más allá del patrocinio, fomenta el deporte femenino y realiza diferentes acciones como fue lanzar el primer álbum de cromos de futbolistas mujeres; o una guía para medios de comunicación, ya que las mujeres en el deporte solo aparecían como «mujeres de» y no como protagonistas.

Por su parte, Eva Antonino es la primera mujer en dirigir el Instituto de Telecomunicaciones y Aplicaciones Multimedia de la UPV. «Es importante poner en valor el liderazgo de todas nosotras. Las niñas y adolescentes necesitan tener referentes. En el sector de las telecomunicaciones todavía hay predominio de los hombres y a nivel académico solo hay un 20 % de mujeres», advirtió Antonino, que también puso de manifiesto la dificultad que tienen las mujeres que son madres para ascender a puestos de responsabilidad sin sentirse culpables. «Me tuve que ir un tiempo y mi hijo, entonces de seis años, me dejó de hablar durante unos días cuando volví. Yo no sé si esto a los hombres les pasa, pero como mujer y madre fue muy doloroso, pero no me ha parado porque creo mucho en el tema de crear referentes, que vean el tema tecnológico desde pequeñas, vernos capaces de hacer cualquier cosa».

‘Suelo pegajoso’

En este sentido, Ángela Pérez habló del «suelo pegajoso», término que se utiliza para referirse a las dificultades de las mujeres en el mundo laboral, y la necesidad de la corresponsabilidad. «‘¿Estás dedicando suficiente tiempo a tus hijos?’ Es una pregunta que nos planteamos todas, pero mi hija está orgullosa de que su madre haya ganado un Jaume I», planteó. «Todavía tenemos unos estereotipos gigantescos, no tenemos que justificar que estamos menos tiempo con nuestras familias», añadió. Además, Pérez expuso que cuando una mujer le pide una reducción de jornada, antes les comenta si han hablado el tema de la corresponsabilidad en su familia. «Como conclusión debemos querer estar en puestos de influencia, yo no os pido que seáis jefas, os pido que seáis superjefas, las que estamos en puestos de influencia altos tenemos que hablar de nuestra experiencia y levantar los pies de ese suelo pegajoso que nos hace estar justificándonos», concluyó.

«Tenemos que cambiar el ‘yo renuncié’ por ‘yo elegí’», enunció María José Valero, una de las líderes de Womanation, un movimiento comprometido con la visibilidad, el empoderamiento y la conexión de mujeres líderes en distintos sectores de la sociedad: «el objetivo de este movimiento es ser efímero, que deje de ser necesaria su existencia». «El talento no tiene género, las personas deberíamos relacionarnos por lo que somos». Para Valero debería aplicarse la regla de las tres G: ni género, ni geolocalización, ni generación.

«En Caixa Popular intentamos influir positivamente en los demás, apostamos por un liderazgo transformador y que cuide a las personas, que las acompañe en su desarrollo con un modelo de organización líquida, que nos ha permitido que cada vez se desarrolle más su talento», manifestó Mar Mestre. También explicó que la plantilla de la entidad bancaria es joven porque al salir de la universidad, realizan prácticas y tienen una política de cantera en la que les ayudan a crecer: «la gente quiere trabajar con nosotros y así llegamos a segmentos donde antes no llegábamos».

Identificar los sesgos

Marta Rebull, como directora general de Personas y Talento, abordó uno de los retos a los que se enfrenta: los sesgos. «Tenemos sesgos que son involuntarios, que tenemos tanto hombres como mujeres. Los sesgos están ahí y lo importante es identificarlos. Si no lo identificamos estamos perpetuando conductas que son invisibles para nosotros. Cuando tienes el problema bien planteado, eso ya es parte de la solución, y hay que atacar esos sesgos». Por ello, para Rebull hay que hacer procesos de selección «lo más asépticos posibles». «Si todo eso estuviera ya, no harían falta los planes de igualdad. Rebull ejemplificó algunos de los sesgos, como el del ‘mérito’: «está la creencia de que los hombres son movidos por su potencial y las mujeres con su experiencia demostrada»; o el sesgo a la diponibilidad o compromiso «asumir que los hombres pueden hacer más horas extras o viajar más».

Carla Basso es referente en cómo las mujeres se pueden dedicar a las carreras científicas y ocupar puestos de responsabilidad. «Con respecto a las carreras STEM muchas veces es difícil elegir lo que no se ve. Mis hijas proyectan un futuro que son capaces de proyectar a partir de algo real. Tenemos que fomentar- que no forzar- la posibilidad de que una chica joven elija una carrera científica porque sea lo que le apasiona», afirmó. Desde el Colegio de Ingenieros tratan de visibilizar a la mujer en la ciencia y «la mujer donde le dé la gana».

Por su parte, Rosana Navarro puso el foco en las pymes valencianas y la presencia de los hombres frente a las mujeres. «Las empresas en su mayoría son pymes, estas pymes en la historia reciente han sido muchas de carácter familiar, y estas empresas han estado muy marcadas por las herencias, que hasta hace muy poco estaba regida por la primogenitura y la masculinidad». Asimismo, también expuso que para ella el liderazgo «es la confianza del objetivo que tenemos que conseguir» y para ello la igualdad entre compañeros es vital. «Tenemos que crecer y conseguir los objetivos», finalizó.

Fuente: LevanteEMV

Recapiti
Martha Rodriguez