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El Juzgado de lo Penal nº3 de Santander ha condenado a una paciente por tres delitos de amenazas a dos médicos y a un enfermero en un centro de salud a la pena de 6 meses de prisión por cada delito, a la inhabilitación especial por el tiempo de la condena, al alejamiento de de los médicos agredidos y a una indemnización de 3.500 y 5,500 euros, respectivamente, para cada uno de estos facultativos. Las amenazas de la paciente condenada consistían en mencionar que tenía pistolas en casa con las que iba a matar a estos profesionales de la salud.
Esta es una nueva sentencia que ha ganado el Servicio Jurídico del Colegio de Médicos de Cantabria que se ha personado como defensa de los médicos agredidos. La Junta Directiva del COM Cantabria insiste en que se debe denunciar cualquier agresión física o verbal para luchar contra esta lacra social que afecta a cada vez más médicos en España.
