La internacionalización ya no es una opción, sino una necesidad para muchas empresas del sector del metal que desean expandir sus horizontes y competir en un mercado global. Esta ha sido una de las conclusiones que hemos extraído del último episodio de Metal empresarial donde hemos reunido a figuras clave del sector, como, Soluciones Técnicas MTECH, Bralo y CESCE, quienes han compartido conocimientos prácticos y casos de éxito que pueden servir de modelo para otras compañías del ámbito metalúrgico.
AECIM impulsa la internacionalización del sector metalúrgico madrileño
Desde AECIM, la responsable de comercio exterior, Elena Arroyo, explicó cómo la asociación apoya a las empresas en su proceso de internacionalización. Este respaldo incluye eventos B2B, participación en ferias internacionales, servicios de búsqueda de socios comerciales, así como formación especializada para importadores y exportadores. Además, asesoran sobre normativas clave como el nuevo mecanismo de ajuste de carbono en frontera de la UE, que impacta directamente en las exportaciones del sector.
Cobertura de riesgos: el papel de CESCE
Por parte de CESCE, Ricardo Santamaría detalló cómo su entidad facilita la internacionalización al cubrir riesgos críticos como el impago de clientes internacionales. Gracias a esta cobertura, las empresas pueden ofrecer condiciones más competitivas y acceder a financiación con mayor facilidad, lo que representa una ventaja sustancial al operar en mercados exteriores.
Casos de éxito: MTECH y Bralo
Durante la tertulia, se presentaron ejemplos de empresas que han logrado consolidarse fuera de España:
- Soluciones Técnicas MTECH, especializada en equipos eléctricos para los sectores energético y ferroviario, ha desarrollado una estrategia internacional en dos fases: primero acompañando a sus clientes en proyectos como el AVE Medina-La Meca, y luego implantando equipos comerciales y soporte técnico en varios países.
- Bralo, fabricante de remaches metálicos, inició su expansión en mercados europeos cercanos como Portugal y Francia, para después establecer centros de producción en México y China. La clave de su éxito: calidad como elemento diferenciador en un mercado altamente competitivo.
Claves competitivas: calidad, adaptación y digitalización
Tanto Bralo como MTECH coincidieron en que la calidad del producto es fundamental para competir frente a ofertas más económicas. Además, subrayaron la importancia de adaptar la propuesta de valor a cada cultura local y aprovechar el prestigio de la marca España como valor añadido en mercados exigentes como los países nórdicos o Australia.
Elena Arroyo concluyó destacando que incluso las pequeñas empresas pueden dar el salto internacional gracias a herramientas accesibles como el marketing digital B2B, que permite abrir mercado con inversiones moderadas.