Cómo hacer tu maleta sostenible de vacaciones

Compatibilità
Salva(0)
Condividi

Viajar con una maleta sostenible no significa renunciar a la comodidad ni al estilo, sino abrazar una forma de viajar más coherente con tus valores. Cada prenda, cada objeto y cada gesto suman. Este verano, ¿te animas a hacer la maleta de una forma más consciente? Desde aquí te ayudamos con los tips de dos divulgadoras sobre sostenibilidad: Magui Caviglia, al frente de Usar y Reusar, tienda Zero Waste de Barcelona; e Yve Ramírez, más conocida como La Ecocosmopolita, creadora del podcast Flores en el asfalto y de la newsletter Las cartas de la Ecocosmopolita.

¿Qué es una maleta sostenible?

Una maleta sostenible es aquella que se llena con criterio: priorizando lo que ya tienes, eligiendo prendas versátiles y evitando consumir en exceso si necesitas comprar algo para tu viaje. Preparar así la maleta implica pensar antes de incluir o comprar ropa “por si acaso”, y preguntarse: ¿lo voy a usar realmente? O ¿de dónde viene esta prenda?

¿Por qué es importante preparar una maleta sostenible para tus vacaciones?

Preparar una maleta sostenible es un gesto consciente que reduce nuestro impacto ambiental y refuerza nuestro compromiso con un consumo más ético, también cuando estamos fuera de casa.

Tener hábitos sostenibles es como un viaje, siempre hablamos de ‘transitar hacia un estilo de vida más sostenible’. Desde ese paradigma, cualquier evento es una ocasión para seguir avanzando”, apunta Magui Caviglia. Y añade esta interesante reflexión: “Además, es un gran indicador para ver si la transición la estás viviendo desde la alegría o desde la obligación y renuncia. Si la estás viviendo desde la alegría, posiblemente enfoques las vacaciones como una oportunidad más de seguir avanzando y no como ‘cogeré vacaciones de mis hábitos sostenibles’».

Yve Ramírez, por su parte, cree que las vacaciones “no deberían ser una pausa en nuestro compromiso con el planeta. Es verdad que las circunstancias cambian —lugares nuevos, rutinas distintas— y que algunas cosas no podremos hacer igual que en casa. Pero es importante mantenernos alineadas con nuestros valores también cuando estamos de viaje. No se trata de obsesionarse, sino de actuar con coherencia y conciencia, siempre dentro de las posibilidades de cada una”.

¿Qué tres recomendaciones prácticas darían nuestras expertas consultadas a quienes intentan reducir su impacto ambiental al hacer la maleta?

Los imprescindibles de Magui Caviglia: “Haz una lista de todo lo que crees que puedas necesitar, lleva tu botella reutilizable y cosmética sólida”. Por su parte, La Ecocosmopolita Yve Ramírez aconseja: “Primero: llevar solo lo que realmente necesitas. Cuanto menos peso, menos emisiones de carbono en el transporte. Segundo: prever con antelación para evitar compras improvisadas. ¿Refrescará por la noche? ¿Vas a caminar más de lo esperado? Pensarlo antes evita consumos innecesarios. Tercero: resistir la tentación de comprar cosas nuevas “porque te vas de viaje”. A nivel global, ya hay suficiente ropa para vestirnos hasta el año 2100… Si de verdad te hace falta algo, apuesta por la segunda mano o por marcas comprometidas. Y siempre, en lo posible, prioriza tejidos naturales frente a sintéticos: son más agradables, más sostenibles y mucho mejores para nuestra piel”.

En cuanto a los errores o hábitos poco sostenibles que, según la opinión de estas expertas, se repiten más a menudo al preparar el equipaje, ambas coinciden en los ‘por si acaso’. Magui Caviglia determina que son “el error más común y no hacen más que sumar peso a tu equipaje. Hacer una lista te ayuda a evitarlos”. Yve Ramírez comparte su propósito sobre este tema: “Hace tiempo que me propuse viajar siempre con una maleta de cabina —y, como mucho, una mochila— y es perfectamente posible. Viajar ligera es más cómodo y tiene menos impacto. Además, tendemos a olvidar que no hace falta vestir diferente de como lo haríamos en nuestro día a día: mejor llevar ropa que realmente usamos y en la que nos sentimos cómodas, y si puede ser, hecha de fibras naturales y de calidad”.

Ventajas de preparar una maleta sostenible:

  • Reduce nuestra huella ecológica desde el primer paso si, por ejemplo, evitamos incluir en ella materiales contaminantes o de un solo uso, buscando alternativas más sostenibles.
  • Nos ayuda a viajar con más comodidad y eficiencia. Una maleta sostenible suele ser más minimalista. Al priorizar lo esencial, se evita el exceso de equipaje y se gana en movilidad y claridad mental, ya que pasarás menos tiempo decidiendo qué ponerte. Además, si reducimos el peso, reducimos también las emisiones al viajar en coche o en avión.
  • Fomenta un consumo más consciente y menos impulsivo. Planificar tu maleta con criterio sostenible evita compras de última hora que muchas veces acaban siendo innecesarias o poco sostenibles. Además, te invita a: revisar lo que ya tienes antes de comprar, apostar por calidad y durabilidad en lugar de cantidad y valorar el origen, la ética y los materiales de lo que llevas.

Marissa Grootes / Unsplash

¿Cómo reducir el impacto ambiental al hacer la maleta?

El contenido de tu equipaje, el modo en que lo organizas y las decisiones que tomas antes de viajar pueden marcar una gran diferencia.

Reducir el impacto ambiental de tu maleta implica consumir menos y mejor, elegir con criterio lo que llevas, pensar en todo tu viaje (no solo en la ropa) y sustituir lo desechable por cosas reutilizables. Toma nota de las siguientes claves prácticas para que tu maleta sea más sostenible:

  • El primer gesto sostenible es usar lo que ya está en tu armario. Muchas veces, la compra de última hora responde más a un impulso que a una necesidad real. Por tanto, es recomendable que hagas una lista de lo que necesitas llevar y, si te falta algo, pregúntate si tienes otra cosa que cumpla la misma función y prioriza alquilar o comprar de segunda mano antes de adquirir algo nuevo.
  • Lleva lo esencial y optimiza el espacio utilizando organizadores o bolsas de tela para agrupar ropa.
  • Minimiza envases y apuesta por productos reutilizables. El neceser es otro punto crítico pero también puede ser sostenible si optas por fórmulas biodegradables y naturales, especialmente si vas a destinos de naturaleza. Además, puedes reducir residuos incluyendo alternativas reutilizables y sin plásticos: cosmética sólida (champú, jabón, desodorante, etc), envases rellenables y de vidrio o aluminio, algodones o toallitas reutilizables de tela….
  • Incluye extras que te ayuden a reducir residuos durante el viaje. Además, también te ayudarán a ahorrar sin ocupar mucho espacio en la maleta. Hablamos de, por ejemplo, “una botella reutilizable, nunca la dejo en casa”, comparte Magui Caviglia; “bolsas de tela para las compras, y un portabocadillos o un táper por si surge un picnic improvisado…”, continúa Yve Ramírez.

    ¿Qué tipo de ropa se debe llevar en una maleta sostenible?

    Como estamos viendo, preparar una maleta sostenible es una forma de alinear nuestras vacaciones con los valores que defendemos el resto del año: responsabilidad, respeto por el planeta y compromiso con un futuro más justo.

    Así es como puedes viajar con menos pero mejor y más versátil:

    “Viajar con consciencia no resta placer, lo multiplica. Cuanto más ligero viajas (literal y simbólicamente), más disfrutas. El estilo no está en el exceso, sino en elegir bien”, comparte Magui Caviglia.

  • Incluye en la maleta lo que ya tienes: reutilizar es uno de los actos más sostenibles.
    • Si no lo tienes, pide prestado: “si vas a una playa rocosa y necesitas escarpines, pero no crees que vuelvas a hacerlo en un tiempo, seguramente puedes pedirlos prestados en lugar de comprarlos. Y lo mismo se aplica para ropa de esquí o incluso para una tabla de paddle que, por ejemplo, podrías alquilar si no vas a usar habitualmente”, propone Yve Ramírez.
      • Si finalmente necesitas comprar algo, prioriza prendas de tejidos naturales, reciclados o de bajo impacto como el algodón orgánico, el lino, el cáñamo o las fibras regeneradas. Si es posible, elige marcas locales o de comercio justo. ¡Aprovecha! Este es un buen momento para empezar a darle forma a tu armario cápsula de viaje. Elige prendas atemporales, cómodas y que puedas combinar fácilmente entre sí.
        • Otra (muy) buena idea es planificar los looks por días y actividades, y probarlos para ver que realmente funcionan. De esta forma evitarás el exceso de equipaje y optimizarás tu organización.
          • Consulta la información meteorológica para evitar incluir prendas ‘por si acaso’ (llueve, hace frío, hace calor, etc) y llenar tu maleta de contenido extra que en realidad no te hace falta.

          “Al viajar, siempre somos invitadas en el lugar que visitamos. Por respeto a las personas, los espacios y los ecosistemas, deberíamos comportarnos aún mejor que en casa propia. No se trata de renunciar al disfrute, sino de enriquecerlo viajando con más sensibilidad y más conciencia”, reflexiona Yve Ramírez.

Recapiti
Cristina Sánchez de Pedro